El Juego Del Amor

Carmen se mantenía sentada en su lugar de trabajo, movía el mause de la computadora de un lado a otro, con la mente en otra parte, agarró su móvil y comenzó a llamar al esposo, pero no le contestó, luego se metió en las redes para distraer la mente, ya que la ansiedad la estaba enloqueciendo, ella estaba segura de que ese sería el boleto de Juan Pablo para crecer como profesional, sacarlo de ahí de la vigilancia era un poco complicado, Golpeaba por momentos el escritorio con sus uñas, hasta que por fin se abrió la puerta de la oficina, entonces suspiró aliviada y asustada

Arsenio caminó hacia ella, el corazón de Carmen se mantenía acelerado, cuando por fin el hombre llegó a donde ella le dijo

- Carmen me dijiste que esos balances los hizo tu hermano?

-si, señor- estaba realmente nerviosa y la voz la delataba, Arsenio volvió a hablarle

-Dónde está tu hermano?

-esta en la vigilancia señor, hoy le tocó en el portón principal

-llama a uno de los vigilantes, manda que lo releve, dile a tu hermano que lo espero en mi oficina en quince minutos, ya la junta terminó, necesito que recojas los documentos de los balances que se estudiaron hoy-Arsenio se dió media vuelta y regresó a su oficina, Carmen esperó que entrara a la oficina y agarró el teléfono para marcarle al hermano, cuando este por fin respondió

- Juan, el jefe quiere verte en su oficina en quince minutos

-pero... Y a quien dejó aquí? la entrada no puede quedar sola!

- yo me encargo, ya voy a buscarte un relevo

- está bien, esperaré que llegue mi relevo y me voy- ambos cerraron la llamada, Carmen inmediatamente llamó al supervisor de seguridad

-Alfredo, necesito que mandes a alguno de los vigilantes a relevar a Juan Pablo en el portón principal

-señorita Carmen, en estos momentos, el personal de seguridad está cada uno asignado, si cambio uno al portón, cómo hago con el que queda sin vigilante?

- señor Alfredo, por los momentos coloque a alguno en el portón principal, usted maneje la situación como vea conveniente, son órdenes de presidencia!

-esta bien señorita Carmen- el señor le contestó resignado

-por favor trate que sea lo más antes posible, porque el jefe necesita a Juan Pablo en quince minutos aquí

-eso trataré!- Carmen cerró la llamada y por un momento la felicidad la invadió-"creo que por fin mi hermano va a obtener lo que se merece"- entonces dijo en voz alta mirando al techo - gracias Dios mío! En verdad mi hermano se lo merece, ha sido un excelente hermano y un excelente hijo, sacrificó tantas cosas para que yo pudiera estudiar y graduarme y a mamá no le faltara nada, yo sé que pronto tendrá todas las ganancias por ser tan bueno- después de un momento volvió a marcar al señor Alfredo

-hola, pudo resolver lo del vigilante?

- si, señora Carmen ya hice los cambios pertinentes, tengo una pregunta, eso será solo por hoy? O ... ya busco un relevo para siempre? Lo pregunto para ir haciendo los ajustes necesarios

- haga los ajustes necesarios, el señor Juan Pablo, desde hoy será uno de nuestros ejecutivos

- me alegro por él, es un buen muchacho, se lo merece

- gracias señor Alfredo- Carmen cerró la llamada mientras esperaba impaciente la llegada de su hermano.

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