Aprendiendo A Amar

Narra Dominic

Camino hasta mi oficina y espero que la ira que llevo dentro se calme un poco, luego de algunos minutos llamó a Baker y le ordeno que consiga a uno de nuestros mejores hombres para que este a la disposición de Tessa, pero sobre todo que la vigile, el asiente y sale de la oficina, para luego entrar Eliot

− Tienes cara de pocos amigos – menciona con burla

− Esta mañana me encontré con Tessa y estaba con el inútil de Joel – le explico

− ¿acaso estas celoso? – indaga con sorna

− ¿Eres imbécil o te haces? poco me importa ella, pero lo que si no permito es que me vean la cara de cornudo – explico

− Si tú lo dices, aunque debes admitir que Tessa Wilson es una mujer sumamente hermosa, así que no solo tienes que cuidarla de tu primo, sino de todos los hombres que quieran acercarse a ella – explica Eliot

− Eso lo sé, ya tomé cartas en el asunto – menciona

− ¿para cuándo será la boda? – pregunta

− En un mes y medio – le cuento la suelta una carcajada

− Felicitaciones, quien creería que el temido demonio encontraría la horma de su zapato – dice con burla

− No digas estupideces, tu más que nadie sabe que esto es un proceso legal, que entre Tessa y yo no pasa, ni pasara nada, no me interesa complicarme la vida – explico

− No lo sé amigo, pero puede que ella te haga cambiar de opinión – dice Eliot con una sonrisa sarcástica en su boca

− Si sigues con lo mismo, me encargaré de llenarte esa boca de moscas – le amenazo y el alza sus manos en señal de rendición

− Bueno, pongámonos a trabajar más bien – dice Eliot que también es mi asistente

Paso el resto del día y la tarde entre trabajos y documento legales, estoy a punto de cerrar uno de los mejores tratos de la historia.

Además de que mi abuelo posee el banco más grande e importante del estado, también tenemos un conglomerado en la infraestructura en la ciudad, somos los pioneros de la construcción, además de trabajar con la industrial vial del país, pero esta vez me apoderare de la línea de área más grande de todas, cosa que no sabe nadie.

Llega la noche y con ella la dichosa reunión, me cambio de ropa en la oficina y salgo directo a casa de Tessa, al llegar me recibe su madre con una gran sonrisa que me solo me da jaqueca, pero toca aguantar por el bien de mi bolsillo.

Me quedo conversando con su padre hasta que su voz me saca de aquel incomodo momento, la veo hermosa en ese tono azul turquesa que solo resalta su pálida piel, y resalta sus hermosos ojos azules, su abundante cabello negro cae como cascadas por su delicado pero provocador escote, que me hace querer lamer sus monte, maldita sea, en qué momento se me vinieron todos esos pensamientos a mi cabeza.

Pasamos a la mesa y nos sirven un exquisito vino, luego los meseros ponen a nuestra disposición un festín digno de un rey, tomo una cuchara de mi crema, pero en ese momento su madre me comienza bombardearme con pregunta sobre nuestra relación, la primera reacción de Tessa fue toser el vino que tenía en su boca, la veo nerviosa, así que decido tomar las riendas de la situación, explico lo que gusta de ella y hablo un poco de lo entusiasmado que estoy con nuestra relación, veo que no están convencidos del todo, pero cambio de tema para cambiar el hilo de la noche, hablo sobre lo mucho que me interesa las propuestas del señor Wilson, él se entusiasma al saber que patrocinare toda su campaña electoral, así que no le queda más de otra que omitir mi relación con su irracional hija.

Terminamos la velada y es hora de ir a descansar, cuando me levanto y me acerco a su padre para estrechar su mano, luego voy directo hasta su madre y beso los nudillos de su mano, pero al final cuando me acerco para despedirme de Tessa veo como su madre nos observa expectante.

− Por nosotros no se preocupen, puedes besarla – dice su madre

− ¡mamá! ¿Qué te sucede hoy? – le reprocha Tessa

− No te preocupes princesa, si tu madre quiere ver que lo haga, igual tú también lo disfrutas – le digo pícaro y me acerco a ella, veo como abre sus ojos sin creer que lo hare, la tomo se su cintura y con mi mano la tomo de su cuello, la siento rígida y antes de besarla le hablo cerca de su boca – debemos fingir, debe parecer que te gusta – le susurro y acto seguido me apodero de sus labios, la obligo a abrir los suyos con delicadeza y siento como suavemente se relaja y se deja llevar al punto de sentir sus manos en mi cintura, no la invado con mi lengua, solo le doy un tierno, pero apasionado beso y al final siento como su padre carraspea su garganta

− Lo lamento señor, pero me siento enamorado de su hija, ella es única y excepcional – explico y Tessa es como una estatua

− Eso vimos – dice su madre con una sonrisa

− Está bien, pero por favor deben contenerse en mi presencia – habla su padre y ella sigue sin emitir un sonido

− Agradezco la velada, fua un placer – agradezco

− Esperamos verte por aquí más seguido – inquiere su madre

− Así será – acepto sin saber en el lio que me estoy metiendo – adiós princesa – me despido de la estática Tess

Antes de subir a mi auto me acerco a Duck y le especifico lo que ya sabe que debe hacer, el asiente y luego me voy directo a mi auto donde ya Baker me espera.

Llego a casa y parece no haber nadie, camino hasta el bar y tomo una copa y la voz de Vera me saca de mis recuerdos de aquel beso.

− No sabía que vendrías hoy – dice ella con timidez

− Ni yo, solo quiero descansar – menciono mientras tomo un sorbo de mi copa

− La cena ya se ha servido, pero puedo pedirle a uno de los empleados que te prepare algo ligero y si quieres te lo puedo llevar a tu habitación – me propone

− No, gracias ya cené fuera con mi novia – le hablo para que dé una vez por todos se enteren

− ¿novia…? – pregunta ella incrédula

− así es, mi novia y futura esposa – explico

− Pero si yo…, yo te am… – no la dejo terminar lo que sé que dira

− Tu nada Vera, yo nunca te he dado ningún indicio que demuestre que me interesas, acepto que te veo diferente al resto de tu familia y que tu al igual que a mi nos tocó difícil desde niños, no niego que en algún momento pensé que serias una candidata ideal, pero ahora veo que no es así – le explico frio y sin emociones