NovelToon NovelToon
COMPRÉ UNA ESPOSA

COMPRÉ UNA ESPOSA

Status: Terminada
Genre:Matrimonio por contrato / Matrimonio arreglado / Matrimonio antes del amor / Contratadas / Completas
Popularitas:1.5M
Nilai: 4.6
nombre de autor: Smiling_2.0_

Un día eres el soltero más cotizado, mujeriego y millonario y otro día te obligan a comprar una esposa.
Edward, pensó que lo tenía todo a sus veinticinco años pero le faltaba algo, una esposa, así que tendrá que comprar una o su fortuna se le irá de las manos.

NovelToon tiene autorización de Smiling_2.0_ para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

15.

[EDWARD]

Apenas y pude dormir en esa semana.

Abuela: Irás, es importante que estés allí.- me ordenó al otro lado de la línea.

Estaba furiosa.

Edward: No me siento bien.- mentí.

Abuela: Oh por Dios Edward, deja las mentiras que no tienes doce años. ¡Son tan tontas cuando te lo propones!

Ajá, la abuela era muy astuta y sabía cuando mentía.

Edward: No te miento.

Abuela: ¡Excusas y más excusas!.- gritó al otro lado de la línea.___ ¡Se me está acabando la paciencia contigo!

Suspiré.

Edward: ¿Qué no tenemos un personal extenso para eso? Puedo firmar los cheques otro día.- me quejé.

Abuela: ¡Edward no me hagas ir a por ti y patearte el puto trasero!.- me amenazó sin miramientos.

Suspiré una vez más, con cansancio claramente.

Edward: Vale, tú ganas.- dije colgando el teléfono de inmediato.

Me relajé un poco en el sillón del despacho en lo que me preparaba mentalmente para volver a la galería.

Doce días sin ir a la dichosa galería.

Quizás me había pasado un poco.

Había mucho trabajo en la empresa y en la galería. Agnes estaba fuera de la ciudad hace dos días. Volvería dentro de dos días más. Me había pasado una que otra hora a la empresa, no había sido suficiente, lo sé. Estaba furiosa por eso.

Y entonces volví, había tanto por hacer.

Que no esté aquí. Que no haya venido...

Has vuelto a tener doce años.

¿No hay un botón automático para apagar mi conciencia? ¿No? Bueno, cállate, lo último que quiero es escucharte.

Muy ingenuo de mi parte, al llegar al lugar no pude evitar pasar por el almacén. Y ahí estaba ella, la vi de reojo mientras pasaba, estaba de espaldas con Grace, la cual era la asesora, la que negociaba y la que elaboraba las ideas para el marketing.

___ Oh, Edward. Ahí estás.- dijo cuando me había detenido a mirarla, pero no ella, a Woody la cual estaba de espaldas. El aire se tornó pesado de inmediato. La atmósfera cambió de manera radical. Mis músculos se volvieron rígidos y mi mandíbula se tensó cuando mi corazón se aceleró y sentí algo de miedo y vergüenza. Y eso que ella seguía sin girarse.___ La señora Miller me encargó unos documentos, necesitan ser firmados por tí.- me informó.

Edward: Pasa a mi oficina.

___ También me pidió organizar tu agenda para la semana. Para mañana una reunión importante con un par de inversiones sobre la exposición que recaudará millones de dólares para más de cincuenta orfanatos. Las donaciones serán un éxito, solo necesitamos...

Levanto mi mano para callarla.

Edward: Espérame en mi oficina.

___ Claro, también quería informarte que hoy saldré más temprano de lo habitual. Tengo un inconveniente familiar.- avisó.

Sí, Grace era una mujer casada, me llevaba unos diez años. Era muy dedicada a su familia y muy entregada al trabajo.

___ Gracias, con tu permiso.- dijo pasando por mi lado.

Nos quedamos solos. Ella y yo, ella seguía sin darse la vuelta. Estoy seguro de que mi presencia la había puesto nerviosa. Y no me importó, sin siquiera mirarme y tan siquiera sin hablarme ella también me había puesto nervioso.

Vale, yo era todo un crío en ese momento.

Pool se hubiera desvanecido en el piso de tanto burlarse de mí.

Avancé con pasos precisos hacia dentro del almacén donde ella se encontraba. Cerré la puerta detrás de mí y ella se sobresaltó sobre el mismo sitio en el cual estaba parada.

Edward: ¿No vas a mirarme?.- pregunté con mis manos dentro de mis bolsillos mientras la contemplaba de espalda. Traía el cabello recogido a diferencia de la última vez que la había visto. No pude evitar recordar cómo le aparté el cabello para hundir mi cara en su cuello, intento mantener la calma y la compostura pero me es casi imposible. El olor de su piel, la sensibilidad con la cual la besé y la succioné, era tan frágil. Me dió miedo succionar más y marcarla. El olor aún seguía preso en mis fosas nasales y eso me jodía.

Woody: ¿Qué es lo que quiere?.- preguntó sin voltearse.

Edward: Olvida el tratarme con formalidad. Aquí somos tú y yo y no "usted".

Es ahí cuando ella se da la vuelta.

Dejo de respirar en el momento en el cual nuestras miradas se encuentran.

Es ella quién aparta la mirada.

Edward: Lamento lo que pasó el fin de semana.- empecé.

Woody: No te preocupes, no pasó nada.- responde a la ligera.

Nada...

Nada...

Edward: ¿Nada?.- pregunto en un tono de voz absurdo.

Woody: Edward...

Edward: No.- negué acercándome a ella.___ No Woody, porque yo sentí que pasó de todo.- dije en un tono algo desesperado cargado de frustración.

Woody: Fuiste a mi casa, estabas ebrio y luego te fuiste después de intercambiar dos palabras conmigo. Palabras que creo que no has de recordar.

Edward: ¿Dos palabras?.- refuté con una sonrisa absurda bailando en mis labios.___ Woody pasamos más de dos palabras y claro que lo recuerdo todo.

Woody: Estabas ebrio.- dice de repente.

Edward: Si, lo estaba. Pero también soy un ebrio consciente. Sé lo que dije, sé lo que quería y sé lo que buscaba.- dije sin miramientos. No puedo acobardarme. Tengo veinticinco años, joder, no soy un puto crío que no sabe cómo coño expresarse ante una situación como esta.

Woody: ¿Y qué querías?.- preguntó ingenuamente.

Edward: Te quería a tí.- confesé.

Ella pareció quedarse sin palabras en ese momento.

No apartó la mirada de mí ni yo de ella.

El contacto visual era más que mutuo en ese momento.

Woody: Edward.

Negué.

Lo que sea que fuera a salir de boca no sería lo que yo quería escuchar.

Así que no le di tiempo y me acerqué a ella, me quedé a un paso de chocar contra su cuerpo.

Ella pareció estremecerse por mí total cercanía.

Su olor inundó mis fosas nasales.

Yo descendiendo por su cuello aquella noche...

No quiero pensar en eso.

No ahora.

Así que sacudí mis pensamientos.

Edward: Lamento tanto el haberte ido a buscar sin ninguna explicación.- mentí en partes. Porque en realidad no sabía que hacía allí, no estaba claro pero si sabía que quería. Y la quería a ella, quería verla. Quería tenerla cerca aunque sea un momento.

Woody: Entiendo. No tienes de qué preocuparte.- dijo como si aceptara de manera fugaz mi disculpa sin siquiera pensarlo.

Creo haber visto que retrocedió así que me acerqué medio paso más a ella.

Edward: No, no me estás disculpando de verdad.- dije sin apartar la mirada de la suya.

Woody: Edward.- dijo retrocediendo.

Edward...

Por un milisegundo no pude evitar escuchar mi nombre saliendo de su boca en un gemido.

¿Qué coño me pasa?

Estás enfermo...

¿Lo estoy?

Avancé un paso más, pero entonces para ella ya no hubo más espacio hacia dónde retroceder. Su espalda chocó con un par de cajas.

Pude ver el miedo en sus ojos, sus nervios brotandóse a flor de piel.

¿Acaso yo la acababa de poner nerviosa?

Pasé saliva de solo pensarlo.

La punta de mis zapatos chocó contra la de sus zapatos.

La vi tragar grueso y eso me hizo estremecer.

Woody: Edward...- dijo en un susurro en modo advertencia. Sus labios habían temblado un poco.

Mi mano alcanzó una de sus mejillas, mi mano ardió y supe que ella también había sentido casi lo mismo cuando pareció estremecerse un poco. Negué lentamente sin dejar de mirarla a los ojos.

Edward: No, Woody. No digas mi nombre así, con miedo, no me mires cómo si me temieras, no te pongas nerviosa por mi cernía, no dejes de respirar por mí, no tiembles por mi más mínimo toque.- dije en voz baja cómo si cada palabra me estremeciera por dentro. Mi pulgar se deslizó hasta su labio inferior una vez más, sentí cómo mi boca se secó al instante y cómo ella tragaba con dificultad.___ No te debía una disculpa aquella noche, fui a buscarte porque quería verte, necesitaba verte.- dije acariciando su labio inferior lentamente con mi pulgar.___ No me preguntes que quiero de ti porque ni yo mismo sé.- ladeé un poco la cabeza. Mi dedo pulgar deslizándose por su labio inferior me puso en un estado de trance y no supe cuando empecé a hablar.___ Quiero besarte, quiero estrujarte contra mi pecho mientras mis labios succionan los tuyos, quiero descender por tu barbilla y mordisquear tu clavícula, quiero repartir besos húmedos en tu cuello y marcarlo.- pasé saliva por lo que me estaba imaginando en ese momento. Lo que iba a imaginar sería más fuerte y más gráfico.___ Quiero arrancarte la ropa, repartir besos húmedos y fogases por todo tu cuerpo mientras tu jadeas para mí en cada beso que voy dejando en ti, en cada huella que voy dejando en tu piel.- hundí un poco mi pulgar dentro de sus labios.___ No quiero obligarte a nada Woody, quiero que seas tú la que cegada por las caricias y el deseo me pidas que te haga mía. Quiero entregarme a ti, quiero que me desees y me reclames cómo tuyo cada que tengas la oportunidad de hacerlo.- tragué con fuerza. Mi mano se posó detrás de su nuca, mi corazón se volvió loco y se me tensó cada músculo de mi cuerpo cuando ella sintió mi mano cerrarse de manera sutil y posesiva sobre su cuello.___ Este cuello Woody.- dije en una voz densa y profunda.___ Este cuello es perfecto para mi mano.- acerqué mi rostro hacia el suyo. Sus labios se apretaron un poco y rompí el contacto visual cuándo hundí mi nariz detrás del óvulo de su oreja.___ Quiero poner tu mundo de cabeza, quiero que sientas algo por mí, quiero ser tu mundo entero, ser el centro de tu atención, quiero ser tu debilidad y la persona por la cual seas vulnerable. Que te asfixies con mi presencia, que no respires por mi cercanía y que no existas para ningún otro que no sea yo. Que cada vez que te veas al espejo digas que vives y existes por y solo para mí.- dije antes de besar el óvulo de su oreja consiguiendo que ella sobresalte sobre el mismo sitio.___ No quiero que mires por otros ojos que no sean los míos, no quiero que toques con otras manos que no sean las mías, no quiero que sientas por otros que no sea yo, no quiero que beses por otros labios que no sean los míos.- susurro mientras mis labios acarician el óvulo de su oreja. La emoción no me cabe en los pantalones, me aterra que me pase lo mismo que me ocurrió aquella noche, apenas y pude liberarlo, dolía tanto.

Me alejé de ella. Mi mirada se clavó en la suya una vez más.

La miro por última vez antes de salir de allí y alejarme de ella cuando escucho voces acercándose.

No puedo evitar pensar en qué ella me ha quitado el sueño en estas últimas semanas. En que me tiene al borde de un abismo del cual no hay salida por donde mires

Lo que le dije habrá sonado tan psicópata y enfermo de mi parte, pero yo solo me expresé abiertamente.

Ella se está volviendo mi perdición. No sé qué siento, Mason dijo que puede llamarse obsesión.

De ser así.

Ella sería mi obsesión, me conozco. Me obsesiono con algo y no lo suelto jamás.

Entonces no es amor lo que sientes por ella.

Siento de todo. Y todo se resume a ella. Me da miedo joderme tanto por ella pero eso debí pensarlo antes de actuar y pensar, ahora ya es demasiado tarde.

1
amparo molina rodriguez
mucha repetición estoy saltando haber si se arregla el contenido
Beatriz Montes
Me encanta tu historia esta bien interesante y te ayuda a relajarte y continuar leyendo gracias
carmen arias
ese es es un inmaduro no sabe nada del mundo puro lujo y mujeres y dinero para gastar
María Luz Fernández Arias
de verdad autora como puede hacerle esto a ella ese hombre es un enfermo
María Luz Fernández Arias
hay no este tipo en todas las novelas es un estúpido
María Luz Fernández Arias
hay modelos hermosos escogiste uno feo
María Luz Fernández Arias
ese modelo es viejo y feo
María Yolanda Quiñilen Cabrera
da vuelta en lo mismo ...hay que leer el primer capítulo y el último de las novelas de esta escritora.
María Yolanda Quiñilen Cabrera
sería estúpido que le siguieras ando importancia a ese profesor acosador
Marta S. Del
muy buena actriz
María Yolanda Quiñilen Cabrera
si se está colocando monótona
Carmen Moreno
Muy bonita tu novela al comienzo un poco estresante por la actitud de ambos. y el amor enfermizo de Edward pero cuando se da cuenta que perdería a su esposa, decidió buscar ayuda psicológica. y dio resultados fué un esposo amoroso, comprensible, y responsable supo que en la vida no hay nada mejor que la familia,el amor que los une, que lástima que la abuela murió
Carmen Moreno
yo creo que ella es más enferma que él, sabiendo como es se atrevió a regresar. Yo me quedó trabajo y crío a mi hijo sola
Carmen Moreno
Ufff Edwuar es más rudo que algunos mafiosos de novelas que e leido🤭
Carmen Moreno
susto de seguro es el sádico violador del profesor, que la está acosando
Carmen Moreno
Esos y que amigos, no te convienen Edward alejalos. Piensa y has las cosas bien madura y déjate actuar como niño
Carmen Moreno
la novela es buena,pero veo la historia demasiado infantil, no los adolescentes actúan de la manera que lo he acen los protagonistas
Suli Rincon H.
/Smile/
Carmen Moreno
excelente capitulo lleno de amor, por fin demostraron el amor que ambos se tienen, y Edward por primera vez hizo el amor, porque las otras veces solo era sexo.
Carmen Moreno
Como quiere que la visite si lo trata con desprecio y a las patadas, mal agradecida
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play