ORGULLO DE MUJER

Las investigaciones van bien, al parecer si podremos demostrar la inocencia de Felipe, ese joven me da pena cada que lo visito, es muy noble, y lo que me da más rabia es que el verdadero culpable está libre, estoy preparando los documentos para poder iniciar una investigación en su contra y así poder hacer justicia. Estoy tan concentrada en lo que estoy haciendo que no escuché que están tocando a la puerta, la misma que abre Lore

-Se puede?

-Si adelante

-Estaba tocando, pero no respondías

-No te preocupes, en que puedo servirte

-Lo que pasa es que en recepción hay una caja de chocolates que te enviaron, yo no estaba y la recibió el guardia.

-Quien los envía?

-El mismo, ya se lo que me pediste, pero vinieron a mi hora de comida.

-Esta bien, por esta ocasión lo dejaré pasar, pero porfavor infórmale a todos los que puedan recibir la correspondencia que no acepten nada, de ese remitente

-Si, lo haré, te traigo el obsequio

-Claro que no!, cómo se te ocurre?, mejor compartelos con los compañeros.

-ok

Me da mucho coraje que ahora se comporte como si yo le interesara, cuando me olvidó por tanto tiempo. Escucho que vuelven a tocar a la puerta, les permito el paso y es Alex

-Hola, estás muy ocupada?

-No, sólo estoy redactando un oficio para solicitar una investigación en contra del que estamos seguros es el verdadero ladrón, una vez lo comprobemos lo llevaremos a juicio, pero para eso necesito una orden de cateo, la cuál voy a solicitar al juez el día de mañana.

-Van muy rápido en las investigaciones, ojalá todo salga bien.

-Eso espero yo también y bien en qué puedo servirte?

-Tenemos una celebración pendiente y la estoy organizando para mañana, ya que es viernes y no tenemos que preocuparnos por levantarnos temprano, iremos a un bar que está de moda, el ambiente es bueno y ponen muy buena música, que te parece, te apuntas?

-Claro que sí, sobre todo por la música, pero te advierto, hace tanto tiempo que no salgo que les puedo parecer aburrida o incluso quedarme dormida a media pista de baile

-Jajaja, y crees que te dejaré que nos arruines la noche.

Ya es hora irnos a descansar, dejo todo preparado para mañana y salgo de la oficina, veo a Lore y Gaby disfrutando de los chocolates que me envió Luis.

-No los quieres probar, están buenísimos

Me dice Gaby, a quien apenas y le entiendo lo que dice ya que tiene la boca llena de chocolates y no veo que tenga intención de dejar de comerlos

-No, gracias de ese no quiero nada

-Pero no se va a enterar si los comiste o no, dice Lore

quién está igual que Gaby

-Aun así, sé que de pensar que los envío él, me van a saber amargos, Bueno chicas las dejo que disfruten.

-Adiós

Me responden al unísono.

Voy entrando a los juzgados y gritan mi nombre, reconozco esa voz, no volteo, simplemente lo ignoro y sigo mi camino, entro a la sala donde ya me están esperando, ya tenía mi cita agendada, explicó la situación y los motivos de mi solicitud, en realidad no me ha tomado tanto tiempo, me piden que regrese en dos días, que van a revisar los pormenores y si procede me expedirán la orden que estoy solicitando.

Salgo del lugar, trato de no pensar en que me puedo encontrar con Luis, pero para mí mala suerte lo hago, lo que me hace suponer que se quedó afuera esperando a que saliera.

-Por favor, no me ignores

Yo sigo mi camino como si no hubiera nadie caminando al lado mío.

Me toma del brazo, lo que me hace enfadar inmediatamente

-Sueltame!, como te atreves a tocarme

-De verdad, desde que nos divorciamos te he buscado, fuí dónde tus amigos pero ellos nunca quisieron decirme dónde encontrarte, sabía que no estabas con tu mamá o tú hermano porque les llame un par de veces y nunca me comentaron nada, me di cuenta que aún no les habías dicho que estábamos divorciados.

Yo voy caminando, no me detengo para nada, hasta que estoy por subir a mi auto.

-No me interesa lo que hayas hecho o no para localizarme, ni con quién hayas hablado, entiende de una vez no tenemos nada de que hablar, ya para mí no tiene importancia lo que puedas decir, y ya deja de enviar tus absurdos obsequios, esos mejor enviárselos a la que ahora es tu esposa y la madre de tu hijo

Se queda pasmado, ya no dice absolutamente nada, subo a mi auto y salgo de ahí, respiro agitada, el verlo y escuchar decir sus tonterías me llena de ira

"Ahora que quiere, ya nos divorciamos, va a ser padre con la mujer que él eligió para que le diera un hijo, que quiere de mi!", voy gritando estás palabras en mi pensamiento, tomo tan fuerte como puedo el volante, suelto un gruñido, ese hombre me exaspera.