Cuando la Enemiga Se Convierte en la Novia Sustituta

Sharmila se enderezó y miró a su alrededor, dándose cuenta de que no estaba en el patio de su casa. Miró a Zayden y preguntó.

"¿Dónde estamos?"

"En el estacionamiento de Pratama Group", respondió Zayden secamente, luego abrió la puerta del auto y bajó.

Sharmila miró la espalda del hombre que se alejaba con el ceño fruncido. "¿Pratama Group? ¿Para qué venir a este lugar a estas horas?", murmuró.

"Señorita", gritó el conductor que le abrió la puerta.

Sharmila asintió y le dio las gracias, luego bajó, persiguiendo los pasos de Zayden con irritación. "¿Por qué está así?", murmuró de nuevo.

Sharmila vio que Zayden parecía estar enojado. Pero estaba confundida porque no sabía qué había enfadado al hombre. En su interior se preguntaba si acababa de cometer un error.

En el camino, Sharmila admiró la empresa dirigida por Zayden. Tan grande y lujosa, mostrando un poder indiscutible.

*

"¿Por qué vinimos aquí a estas horas?", preguntó Sharmila cuando ya estaban en el despacho de Zayden.

Los ojos de la mujer recorrieron toda la habitación. El despacho, bastante amplio con un lujoso diseño interior, mostraba la capacidad de un Zayden Arya Pratama, parecía arrogante, frío y lleno de poder.

Zayden se reclinó en su gran silla. Sus manos cruzadas miraban fijamente a Sharmila.

"Porque siento que hay algo que quieres preguntar."

Tomando una respiración profunda, manteniendo la paciencia, Sharmila se sentó inmediatamente en la silla que estaba justo enfrente de Zayden, separada por una gran mesa. En su interior, la mujer quería maldecir, Zayden ni siquiera se molestó en pedirle que se sentara.

"Ahora, ¡dilo! ¿Qué quieres preguntar?", preguntó Zayden.

Sharmila miró al hombre con su rostro inexpresivo. Su frente se arrugó, ¿podía el hombre leer su mente?

"Antes, delante del abuelo y David, dijiste que Pratama Group colaboraría con Natakusuma en el desarrollo del proyecto en la ciudad B. ¿Por qué dijiste eso? ¿No querías antes controlar el proyecto tú solo?"

Zayden sonrió levemente, todavía con las manos cruzadas y los ojos mirando directamente a Sharmila.

"¿Por qué crees que hice eso?"

"No lo sé, no puedo leer tu mente, y tampoco me gusta jugar a las adivinanzas", respondió Sharmila fríamente.

"Disculpe, señor. Le traigo té para los dos." La llegada de un empleado que estaba en el turno de noche hizo que Zayden, que acababa de querer responder a las palabras de Sharmila, volviera a cerrar la boca.

Sharmila asintió y le dio las gracias, a diferencia de Zayden, que mantuvo una expresión inexpresiva.

"Entonces, ¿cuál es tu razón?", volvió a preguntar Sharmila después de que el empleado se fuera.

"No esperaba que la señora Pratama fuera una perezosa", dijo Zayden mientras reía entre dientes. "Ni siquiera quiere adivinar una cosa tan pequeña", continuó.

Sharmila solo se encogió de hombros. Una mano agarró la taza de té y la sorbió lentamente, con los ojos fijos en el hombre que estaba sentado arrogantemente frente a ella. No se vio afectada en absoluto. Teniendo en cuenta que eran enemigos, tal vez tenía que acostumbrarse a escuchar palabras duras de Zayden.

Zayden suspiró y corrigió su postura. Sus ojos miraron fijamente el rostro de la mujer frente a él. "Si te dijera que realmente te amo, ¿me creerías?"

Sharmila puso los ojos en blanco con pereza. "No cambies de tema, ¡mi pregunta!"

Zayden contuvo el dolor en su pecho. Ya lo había adivinado, aunque hablara, Sharmila tampoco lo creería. Pero el hombre mantuvo una sonrisa en su rostro.

"¿Por qué crees que es imposible? Podría ser, te amo, siempre porque odias a David, yo también odio a ese hombre. ¿Crees que esa razón no tiene sentido?"

Shamila suspiró con cansancio, sus dos manos cruzadas frente a su pecho, en la misma posición que Zayden. "Tu sentido del humor también es bastante alto."

¿Qué podía hacer Zayden sino ser más paciente? "Bien, bien. Sé que a la señora Pratama no le gusta bromear. Déjame decirte el punto principal."

Sharmila solo guardó silencio y observó, esperando lo que el hombre iba a decir.

"Pratama Group se está quedando sin fondos y no puede desarrollar un proyecto tan grande. Tú y tu tío lo saben, pero tal vez la gente de fuera y los inversores ni siquiera lo saben."

Sarmila guardó silencio, lo que dijo Zayden era cierto. Y en realidad, en su matrimonio, no era Zayden quien realmente se aprovechaba del proyecto de la ciudad B. Pero Sarmila también estaba utilizando a Zayden para financiar el proyecto.

"Seguro que no quieres que los demás lo sepan, ¿verdad?", adivinó Zayden. "Mientras que tampoco quieres que el proyecto en el que te has esforzado desde el principio se le dé repentinamente a David."

Una vez más, Sharmila guardó silencio. Zayden era realmente como un psíquico que podía penetrar en su cerebro.

"Ahora trabajamos juntos. Pero puede que David de repente busque problemas, sobre todo porque sabe que nuestro matrimonio es solo una farsa. En algún momento lo revelará utilizando eso como arma para derribarte. Y tendrás problemas ante el consejo de administración y los accionistas."

Sharmila reflexionó. En realidad, esto es lo que temía. David no es una persona fácil de tratar, el padre de Vivian es una persona muy astuta y le gusta justificar todos los medios. Así que, el único camino que puede tomar es protegerse con Zayden.

"Entonces, ¿qué quieres ahora? Sé que defenderme no es algo gratis, por supuesto."

Zayden suspiró con frustración. La mujer frente a él siempre piensa mal de él. Pero qué podía hacer, su corazón ya estaba completamente atrapado. La mano de Zayden se movió para abrir el cajón de su escritorio, sacando una carpeta negra que había hecho deliberadamente después de que se casaran.

Zayden abrió la carpeta, la revisó brevemente y luego la colocó sobre la mesa frente a Sharmila. "¡Mira este contrato! Si tienes dudas, puedes consultar primero con tu abogado."

Sharmila frunció el ceño, pero también cogió la carpeta, miró brevemente a Zayden antes de abrirla lentamente.

"¿Contrato de matrimonio?", preguntó sin entender. Volvió a mirar a Zayden para pedir una respuesta. "Solo estamos fingiendo estar casados, ¿para qué necesitamos un contrato?"

Sharmila rió entre dientes leyendo cada punto del contrato. Incluso hay un punto sobre la transferencia de bienes si uno de ellos engaña. ¿Zayden se está tomando demasiado en serio su papel?

Zayden sorbió su té que probablemente ya estaba frío, luego suspiró con frustración. "Los negocios son los negocios, y no quiero que me perjudiquen", dijo.

"Hahhh, lo sé. El señor Zayden siempre tiene que calcular las ganancias y las pérdidas."

"Por supuesto, si no fuera así, ¿cómo podría ser tan rico ahora?", dijo Zayden con arrogancia. Sus labios sonrieron burlonamente, sus ojos parecían despreciar, sin que Sharmila supiera que en su corazón decía...

"No importa cómo pienses de mí, lo importante es que tengo que atarte para que te quedes a mi lado."