Cuando abrí los ojos estaba en un mundo diferente.
¿Como regreso a casa?.
Mas bien, ¿que mundo es este?.
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Lo intente
Llegamos a una cafetería dentro de la plaza comercial que esta a dos calles del departamento.
"Bien, iré al grano".
"¿Por qué no has vuelto a casa?".
Me preguntó en lo que hacía el pedido.
"¿Cómo por qué tengo que regresar ahí?".
Le pregunté secamente.
"Es obvio, porque eres mi hija".
Me dijo sin emoción.
"¿Y?".
Le pregunté.
"Haa".
"Lys, por favor deja de hacer esto complicado".
Suspiré.
"No te entiendo".
Comenté.
"Dime, ¿sigue viviendo Lina y esa tía contigo?".
Pregunté con curiosidad.
"Sabes que Lina ahora va a la universidad, además ella está preocupada por tu futuro".
"A pesar de lo que hiciste el día de la graduación ella te perdonara".
"..."
Lo miré con incredulidad.
"¿Qué te dieron?".
En mi mundo se usaba la magia negra para controlar a las personas, pero aquí.
¿Agua de calzón?.
Algo así leí.
¿Hongos alucinógenos o está fumado?.
Realmente no entiendo como es que no tiene sentido común.
Él me miro sin entender.
"¿Crees que lo que ese video mostró no es real?".
Lo miré realmente confundida.
"Eso... Sé que estas molestas y grabaste a Lina enojada, pero no es para que hayas actuado de esa manera".
"Lys, regresa a casa y por favor vuelve al buen camino".
Negué.
"Y pensar que investigaste mi dirección, pero no investigaste que hago de mi vida".
"Realmente decepcionante".
Lo intente Achlys, lo intente.
El señor se tenso por un momento.
"Tengo una pregunta".
Le dije.
"¿Que hay del testamento de mi madre?".
Le pregunté dejando de lado su mirada sorprendida.
"¿Qué?".
Jadeo, no esperaba esa pregunta.
"Bueno, quiero y tengo el derecho de saber si mi madre me dejo algo, ¿no?".
"Eso..."
Balbuceo y luego de un momento se recompuso.
"Como tu tutor tengo derecho de tomar las decisiones sobre eso".
Dijo.
"Eso fue antes de que cumpliera la mayoría de edad, ahora soy adulta y quiero saber sobre mis cosas".
Respondí.
Él frunció el ceño.
"Estás desviando el tema, regresa a casa para que hablemos de esto".
"Aquí no es momento ni hora".
Dijo y con eso él se paró y se fue de la cafetería.
¿Qué rayos fue eso?.
Evito el tema, luego como si algo le molestara se levantó y se fue.
¿Acaso realmente es el padre de Achlys?.
Ahora creo que lo estaba dudando.
'Hey'.
Este tipo ni siquiera pago su cuenta.
Al final tendré que ir a ver lo del abogado para tener respuestas.
Luego de eso regrese a casa una vez más y note que el auto del señor ya no estaba.
Con eso segui con mi rutina.
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Llego el lunes.
Un día feriado.
Me puse a hacer los pedidos atrasados y tambien hacer inventarios.
Me entretuve hasta las 3 de la tarde.
Tome las cajas de pedido para llevarlas a la paquetería y luego me dirigí a la cita con el abogado.
Estaba sentada esperando mi turno cuando de repente mire a Sebastian entrar al bufete.
"..."
Los dos nos quedamos mirando por un momento sorprendidos por el repentino encuentro.
"¿Achlys?".
Pregunto sorprendido.
"...Hola".
Dije al verlo.
"¿Qué haces aquí?".
Pregunto asombrado.
No todos los días encuentras a un miembro del grupo en un bufete de abogados.
"Tengo cita".
Respondí.
"¿Con Ronaldo?".
Pregunto aun mas aturdido.
"¿Que?".
Mire la hoja del abogado que me habían asignado y no se llama asi.
"No".
Miro la hoja de reojo.
"Es con su padre".
"Espera, creo que no recuerdas a Ronaldo, ¿Verdad?".
Pregunto ahora dándose cuenta de algo.
Negué.
Ni idea de quien me hablaba, aunque si había visto el nombre en el chat.
"¿Te acuerdas cuando nos vimos por primera vez?".
"Si".
Respondí.
"Bueno, el que estaba a un lado de Rodrigo es Ronaldo, esta estudiando derecho y luego le ayuda a su padre en este bufete como asistente legal".
Me sorprendi.
El mundo es tan pequeño...
Parece que no puedo librarme de la organización...
"Bueno, venía a verlo".
"Deja le envío un mensaje".
Sebastian señalo una puerta cerrada y saco su celular.
"Siento que casi no nos haces caso en el chat".
Sebastián murmuró quejándose.
Se sentó aun lado mio y empezo a escribir en su telefono.
"Bueno, entre la escuela y el trabajo".
"Estoy ocupada y creo que cada vez tengo mas cosas que hacer".
Respondi.
"Tampoco estoy acostumbrada a usar el celular".
Aunque ahora siento que lo uso cada vez más.
"¿Solo para lo necesario?".
Pregunto y asenti.
"Creo que eres demasiado independiente".
Sebastian murmuro y cuando vimos una puerta de oficina se abrió.
"¿Qué pasa?".
Ronaldo apareció y se quedo de pie en la puerta de la oficina.
"¿Qué hace ella aquí?".
Preguntó sorprendido.
Sebastián suspiro.
"Bueno, Achlys tiene cita con tu padre al parecer".
"Y yo vengo a darte esto".
Señalo un paquete en sus manos.
"¿Cita legal?".
Ronaldo pregunto.
Asentí con la cabeza.
Ronaldo traía puesto un traje de calidad, su cabello un rubio oscuro y sus ojos de color verdes.
Su aire da confianza.
"Esto es solo una casualidad, creo que lo mejor sera ir a buscar a otro abogado si te sientes incomodo".
Comente.
"No es necesario".
El respondió.
Me levante decidida a salir de aqui.
"No, Achlys, el padre de Ronaldo es uno de los mejores abogados que hay".
Sebastian tambien me detuvo.
Por eso había hecho la cita, sonaba bien cuando leí las referencias.
"Achlys Scarlett, pase por favor".
Luego la secretaria me llamo.
Asentí.
"Nos vemos".
Dije y empecé a caminar hacia la oficina.
"..."
"Suerte".
Sebastián me dijo y me dio un leve empujon hacia la entrada de la oficina.
"Lo necesitaré".
Camine dentro de la oficina.
Ronaldo asintió con la cabeza.
Cuando entre el abogado estaba frente a la oficina.
Entonces noté que realmente el señor es igual que su hijo.
La diferencia de edad parecía casi inexistente.
Ronaldo es una mini copia de su padre, Rafael Ortiz pero en versión madura.
