Volver A Vivir

El día de la fiesta, Hanna desde temprano estaba siendo preparada por Rosa.

Hanna: es necesario empezar tan temprano

Rosa: por supuesto señorita… es invitada oficial del ducado, además recuerde que es amiga de la reina Freya…

Hanna: wow el vestido es precioso…

Rosa: es cierto… se ve maravillosa…

Hanna: ¿Qué hay en esa cajita?

Rosa: pensé que usted lo había encargado, venía con el vestido

Hanna abrió la caja y era un broche para el cabello en forma de flor con diferentes piedras preciosas

Hanna: wow es bellísimo

Rosa: asi es señorita…

Hanna: esto debe costar una fortuna

Rosa: arreglaremos el peinado para que luzca esta hermosa joya

Hanna estaba lista comiendo algunos pastelitos que Rosa había logrado rescatar antes de que los pusieran en las mesas…

Rosa: señorita, el duque la está esperando para bajar al salón.

Hanna: bien, ya voy… el duque hasta en el día de la fiesta me da instrucciones… ya verá… le voy a decir unas cuentas cosas… ah… ya está aquí en la puerta… jajaja buenas noches duque… que bien se ve… jajaja esa capa le queda espectacular… miré los dos usamos capa plateada… somos como…

Duque: bajemos, la fiesta va a empezar

Hanna: no me ha dicho que me veo hermosa

Hanna se detuvo en la mitad del pasillo, fingiendo tristeza.

Duque (respiro profundo): te ves bien… ahora bajemos

Hanna: espere… solo bien… quizás debería cambiarme, este vestido es para que me vea espectacular

Duque: Hanna…

Hanna: bien, bajemos

Cuando llegaron al lado de las escaleras principales, Hanna sonrío ampliamente, mientras decenas de personas los miraban expectantes.

Hanna (susurro): ¿Por qué estamos mas nerviosos ahora que cuando estamos en alguna misión?

El Duque asintió sonriendo en complicidad, para luego extender su brazo para que ella enlazara el suyo y bajaron lentamente las escaleras bajo la mirada atenta de todos los invitados.

Hanna (susurro): wow me voy a acostumbrar a esta atención jajaja

El duque la miro serio, pero ella solo sonrió… de inmediato muchas personas se acercaron a saludar. Hanna intentó sacar su brazo, pero Jasper afirmo a un mas su agarre.

Duque (susurro): castigo

Hanna mientras sonreía respondió.

Hanna (susurro): moriré de hambre

Mas de una hora tomaron los saludos, ambos solo saludaban y sonreían de manera casi mecánica.

Hanna (susurro): ya me duelen las mejillas de tanto sonreir.

Tres socios del duque comenzaron a hablar de negocios y al recibir unos documentos, él uso ambas manos, por lo que Hanna aprovechó de soltarse de su brazo y camino directamente hacia los postres…

El duque la siguió con la mirada y la fiesta continuo con normalidad…

Hanna: Rosita por fin te encuentro…

Rosa: señorita hice lo que me pidió y averigue donde hacen esos pequeños pastelitos.

Hanna: gracias Rosita, eres la mejor…

- Asi que usted es… la mujer que vive con el duque…

- ni siquiera es tan bonita

- usa el mismo color que el duque, que bajo

Hanna y Rosa voltearon y se encontraron con tres señoritas finamente vestidas que hablaban y se tapaban el rostro con abanicos del mismo diseño de sus grandes vestidos

Hanna: ¿y ustedes son?

- somos las hijas de los condes de esta región

- seguramente has escuchado hablar de nosotras

- ella es la señorita Aida, futura esposa del duque Scott

Hanna: ¿en serio? nunca la vi antes en la mansión y llevo meses viviendo aquí.

- una señorita no viviría sola con un duque

- ella es una dama

- nos conocemos desde pequeños con Jasper, nuestras familias son amigas y…

El duque escuchaba atento la conversación entre las mujeres, mientras fingía hablar con sus caballeros.

Hanna: pero que se conozcan no significa que lo hayas conquistado o que te vayas a casar con él.

El duque sin darse cuenta esbozó una pequeña sonrisa.

Hanna: ahora yo te puedo ayudar…

[si el jefe se enamora quizás y le mejore el genio]

La expresión del duque cambio de inmediato.

- ¿Cómo podrías tu ayudar a la señorita Aida?

- eso sería imposible

- ¿Por qué me ayudarías? tu eres una competencia

Hanna: jajaja es mas probable que el duque me mate de un regaño o con algun castigo a que yo sea una duquesa jajaja

- eso es obvio, él solo piensa en la señorita Aida

- Asi es, la señorita Aida es mucho mas bonita y delicada que tú.

- esperen… quiero escuchar que tiene que decir

Hanna: mmmm ¿le traes un regalo al duque en esa bolsa?

- si… un hermoso juego de gemelos o colleras como le llama el sastre.

Hanna: no le va a gustar… es poco útil, nunca usa nada que no le sea útil

- son hermosas, grandes y finas…

Hanna: si sabes que el duque hasta duerme con su espada al lado, es imposible que pueda usar su espada usando eso…

- pero…

Hanna: quizás deberías probar otra cosa…

- no la escuche señorita Aida

Hanna: como quieras, créeles a tus amigas que nunca han hablado con el duque o a mi que trabajo con él hace meses.

- ¿Qué le debería regalar entonces?

Hanna: nada…

- ¿Qué?

Hanna: el duque lo tiene todo, puede comprarse lo que él quiera, sin embargo, nunca lo he visto gastar dinero en cosas asi…

- entonces… ¿Cómo me puedo acercar a él?

Hanna: con detalles… por ejemplo, invítalo a tomar el té y córtale los bordes al pan… es un poco mañoso y no se come el borde del pan… siempre se los saca y frunce el ceño cuando lo hace, por eso es mejor darle el pan listo…

El duque de repente recordó que, desde hace un tiempo, su pan siempre estaba perfecto… que ya no tenía esos bordes que le disgustaban…

Hanna: …prepara cosas saladas, sin nada de azúcar… aprende a montar a caballo, siempre se ve contento cuando cabalga a toda velocidad… lee libros, estudia, le gusta hablar de temas de historia y cosas así… y sobre todo… hazle caso en todo… se obediente… cuando uno no le hace caso, frunce aun mas el ceño y la vena de la frente parece que palpita de furia…

El duque instintivamente se tocó la frente…

La conversación de las mujeres continuo, pero, el duque fue llamado por algunos condes para beber una copa, por lo que dejo de escuchar… sin embargo, las palabras de Hanna aun quedaban en su mente…

[no sabía que ella me conocía tan bien]