Un Demonio

...Narra Lisa...

Los días comenzaron a pasar, en un abrir y cerrar de ojos, pasaron 2 meses más. Aunque, no niego que estos dos meses han sido lindos a lado de Cristian, me siento algo triste.

Todavía cada palabra de Cristian resuena dentro de mi cabeza.

...¿ Existirá la posibilidad de que muera al nacer mi hijo?...

Sí muero, solo pido una cosa, y es qué él sea inmensamente feliz a lado de su padre.

Creo que Cristian será muy bueno con mi hijo, buscará una madre adecuada para él, qué lo ame tanto como yo lo haría.

Por instinto acaricio mi vientre, lo abrazo un poco con mucho amor y ternura.

..."Buenos días, mi amor. ¡Qué enorme estás! Serás un bebé fuerte y hermoso como tus padres. Mami ya escogió tu nombre, te llamaremos Víctor, ¿No, es un hombre hermoso?"...

Siento como se mueve dentro de mí, creo que le ha gustado mucho el nombre de Víctor.

Después de un rato, me levanté de la cama muy despacio. Volteó un poco la vista hacia la ventana.

Notó las cortinas cerradas, y la noche anterior las dejé abiertas. El aroma del perfume de Cristian todavía sigue al interior de la habitación.

Una ligera sonrisa aparece entre mis labios. Sé que anoche estuvo aquí y se quedó a mi lado. Aunque no lo sentí porque me quedé profundamente dormida, me emocina saber que dormir a mi lado.

Recojo la bata a lado derecho de la cama, me la pongo cubriendo mi cuerpo. Tomó asiento, para ponerme las pantuflas y luego ir a lavarme la cara al baño.

Mi embarazo cada día avanza más. Cada día me vuelvo más torpe para hacer algunas cosas básicas. Aunque con los días, me iré acostumbrando. Aún me hacen falta 3 meses más.

Mientras caminó hacia el baño, escuché que llaman a la puerta. Me imaginó que debe ser Tobías o la tal Marcia.

Esa mujer no sé porque pero me dan escalofríos cada vez que la tengo cerca. Es muy extraña, no conversa conmigo como lo haría cualquier otra empleada.

Es fría, cortante, sus ojos, son inexpresivos, es como un témpano de hielo.

_____ Pueden pasar. ___ Ordené en voz alta.

La puerta se abre y entra Tobías con un ramo de Rosas negras. La sonrisa se hace aún más grande.

____ Te dejaron este hermoso ramo de rosas fuera de la puerta. Quien te las cortó no tuvo la dedicación de entrar y dártelas.. ____ Comenta, acercándose a mí.

Me da un beso en la mejilla y va a dejar el ramo de rosas a un jarrón. Les pone un poco de agua, asegurándose de que estén frescas.

Regreso a la cama, toma asiento al costado derecho. Observo a Tobías ser tan cuidadoso con las rosas, al parecer son las rosas que más le han gustado.

____ ¿Qué haces aquí tan temprano? ____ Le pregunté con mucha curiosidad, es raro que Tobías se levante tan pronto.

____ Vine a despedirme de ti, me iré de viaje por unos días.

_____ Ayer por la noche me llamó mi novio, quiere que lo acompañe al extranjero por una semana, sabes lo que eso significa para mí. Viajar ha sido mi más grande sueño desde que me salí de mi casa, ahora que tengo la posibilidad quisiera hacerlo.

____ Te prometo que solo será una semana... ____ Me dice, levantando su mano derecha.

____ Tobías, estaré bien. Me quedaré aquí y terminaré de estudiar. Solo serán unos días, Cristian también viene a verme de vez en cuando. Nada me va a pasar. ____ Le asegure.

Tobías pone sus manos sobre mi cabeza y me da un beso con mucho cariño.

____ Lisa, no sabes cuanto te amo, eres la hermana que nunca tuve. Dejarte sola en este momento me hace sentir tan miserable. ____ Sus lágrimas caer sobre mi cabello.

Los dos nos ponemos sentimentales, yo también comienzo a llorar. Mis lágrimas caen por mis mejillas sin control.

Era lindo escuchar a Tobías decir esas palabras. Aunque nunca fui tan chillona como ahora.

Estas hormonas me tienen cansada, de la nada lloro, río y me enojo. Soy una bipolar, eso en ocasiones me hace odiarme a mi misma.

Después de un rato hablando, Tobías se fue. Me vestí con un vestido estampado de girasoles, até mi caballo en una cola de cabello, con un listón amarillo, escogí unos zapatos de piso del mismo color, me veía como una flor hermosa y llamativa.

Bajé a desayunar y luego iría al jardín. Al no poder salir de esta lujosa mansión, me la paso caminando de un lado para otro. Aunque eso me aburre mucho, ya me he acostumbrado.

Al bajar al vestíbulo, estoy por dirigirme al comedor cuando escuchó unas voces afuera. Desvió mi camino y me asomo por la ventana.

Marcia discute con una hermosa mujer de cabello morado. En verdad, nunca había visto a una mujer tan hermosa como ella. Parece sacada de un cuento de hadas.

Su tono de piel es blanco, un color pálido, sus labios rosas, y el color de sus ojos es violeta. Trae puesto un vestido morado claro, tiene unas grandes uñas, qué la verdad, no sé como puede manejar las cosas con esas uñas tan enormes.

_____ Váyase de aquí o llamaré al señor. ____ Escuchó a Marcia decir esas palabras.

La mujer levanta su mano con toda la intención de golpear a Marcia. Eso me hace enojar, quiero saber quien es esta mujer.

Me doy la vuelta, al abrir la puerta principal, mis ojos se clavan en ella. Al igual que los de ella se clavan en mí.