Lucia es una escritora en ascenso que debe presentarse a la boda de su ex amor platónico que se casara nada más y nada menos que con su hermana Amanda.
viviendo separada de su familia y los caprichos de su madre es obligada a asistir a la reunión familiar para la organización y reencuentro familiar.
el destino le mando un impresionante ejemplar masculino que no solo enciende su creatividad como escritora, sino que otras partes que creía dormidas.
Naguel un motero alto con fuertes músculos que hace suspirar a muchas mujeres se obsesiona con su momentánea pasajera. su cabello rojo como el fuego no solo despierta en deseo en él, sino que también su instinto protector.
NovelToon tiene autorización de Paola Alejandra Paolini para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
¿Narco, mafioso o que?
Lucia:
Esta mañana cuando desperté y me encontré en una habitación diferente casi muero del susto, por suerte mi conductor asignado estaba al lado mío haciéndome sentir mejor y segura.
Aprovechando la comodidad de la cama busqué mi PC y me metí en mi novela que la tenia medio abandonada desde que llegamos.
No quiero en pensar lo que cuesta esta habitación o como la pagaremos, que sea reconocida por mis historias no quiere decir que mi cuenta bancaria suda billetes. Al contrario, debo ser cuidadosa porque sino mis gastos pueden superar mis ingresos y eso es algo que no quiero.
Pero esta habitación definitivamente supera mis ingresos, mis gastos. Voy a tener que se sincera con mi motero y disculparme. Ir a la casa de mis padres me agobia, pero tampoco puedo andar de aprovechada.
Termino el capítulo que empecé antes de ese masaje majestuoso y busco mis pantuflas para ponerlas en mis pies y buscar la dichosa biblioteca.
En eso estoy cuando algo llama mi atención. Sobre una de las mesas de noche hay un marco de fotos y cuando lo tomo esta Naguel con sus hermanos.
Raro.
Ahora sí, miro la habitación detalladamente y me percato que no es como una habitación común de hotel, parece la habitación de un departamento o una casa.
Salgo de la habitación y me encuentro con una sala de estar con una pantalla tan grande que puedo jurar que parece un cine. Los sillones que veo parecen de alta calidad, así como toda la decoración.
La mesa que veo un poco más adelante es de hierro forjado, el vidrio sobre ella se ve pesado y delicado. Las sillas también de hierro forjado con unos almohadones que dan ganas de acariciarlos me dicen que son super cómodas y si entro a la cocina gimo del placer por lo bella que es.
¿Todo esto me perdí mientras dormía?
No puedo entender como no me di cuenta antes, aunque claramente quedé fascinada con la comodidad de la cama que casi no me moví de ella como para inspeccionar el resto de este lugar que me deja pensando a que se dedica mi conductor asignado.
¿Sera mafioso?
No, claramente los mafiosos no se conducen en motocicletas y andan recolectando hermanas de futuras novias en pueblos cercanos, no los mafiosos hacen cosas de mafiosos, como andar de tiritos por ahí.
Decido llamar a mi hermana.
ꟷ¿Amanda? ꟷpregunto con un tono bajo.
ꟷ¿Lucia? ꟷresponde igual que yoꟷ ¿Qué pasa?
ꟷNada, solo llamaba porque me surgió una dudita ꟷdigo mientras mantengo mi voz baja.
ꟷ¿Y tenemos que hablar así? ꟷcasi grita del otro lado haciendo que aparte el teléfono de mi oído.
ꟷTu no, pero yo si ꟷalcanzo a decirꟷ. No quiero que me escuche.
ꟷ¿Quién? ꟷpregunta recelosaꟷ ¿En qué lio te has metido ahora? ꟷruedo los ojos, había olvidado lo exagerada que puede llegar a ser.
ꟷPues eso me pregunto yo, ¿A que de dedica el vikingo? ꟷpregunto mientras reviso dentro de la heladera.
Sin cadáveres a la vista, suspiro.
ꟷ¿Qué? ¿No te lo ha dicho? ꟷresponde con otra pregunta, genial.
ꟷSi me lo hubiera dicho no estaría hablando contigo, sonsa ꟷmurmuro sacando una bandeja con fruta de la heladera.
Los nervios me dan hambre.
ꟷEntonces Pregúntale tu ꟷresponde y ahogo una risa histérica.
ꟷSi, claro… voy y le pregunto “che a que te dedicas, ¿Eres mafioso, narco o qué?” ꟷironizoꟷ como que no va Amanda.
ꟷ¿Por qué seria mafioso, narco o qué? ꟷdice ella con una clara burla creciente en su vozꟷ ¿Qué cambio que te lleva a preguntar esa pavada?
ꟷPues pasamos de estar en una habitación común del hotel a un lugar que claramente parece ser su departamento ꟷdigo mirando el enorme cuadro que está en la cocina, junto con su familia. Hago una mueca.
ꟷQué raro… ꟷdice, quiero gritar, me está haciendo poner más roja que mi cabello.
ꟷ¡Eso digo yo! ꟷdigo un tono más alto mientras elijo que fruta comerme, tanto misterio me tiene hambrienta, ¿habrá crema batida?
Me vuelvo de nuevo a la heladera y cuando localizo la crema, creo que gimo.
ꟷPues yo lo digo al hecho de que teniendo un Pen House te haya llevado a una habitación común, debe ser que ahora confía más en ti ꟷdivaga mi hermanita.
ꟷ¿Pen qué? ꟷpregunto, esto es un departamento.
ꟷ¿Escribes novelas y no sabes lo que es un Pen House? ꟷya la veo rodar los ojos, pero yo le gano haciéndolo más rápido y soltando un bufido de cansancio.
ꟷSoy novelista no un agente de inmobiliaria ꟷme defiendo.
ꟷPues te ilumino, novelista…. Pen House es el departamento del último piso del edificio con más lujo y siempre pertenece a un socio o dueño de dicho hotel ꟷdice y me estancó en la parte de que se supone que estamos en un último piso.
ꟷPero esto parece un departamento, claro que bien lujoso… ꟷacaso oí que dijo dueño o socio, hay santa mierda.
ꟷFíjate en la venta para corroborar que estas en lo alto querida ꟷdice y corta la llamada.
Todavía con mi celular cerca de mi oído me acerco a la ventana que tengo cerca y ahogo una exclamación cuando veo que es cierto, estamos alto, muy, muy alto.
Santa mierda.
¿Socio o dueño?
Y mi madre tratándolo de mendigo.
Mendigo mis calzones, ja.
ꟷ¿Todo bien? ꟷsu voz ronca llega desde el otro lado de la cocina y yo aun con mi teléfono en la oreja salto y grito del susto, se me cae el celular al piso y me pego a la ventana.
ꟷ¡Carajo, pero que susto! ¡Casi me cago y no de risa! ꟷ él se ríe de mi ocurrencia y se acerca a mí, yo como que me siento incomoda tratado de ponerlo en el papel de mafioso, narco o lo que seaꟷ Te puedo preguntar algo.
ꟷLo que sea, princesa ꟷhay mierda, me llamo princesa ¿Qué le digo? ¿Papi? Uff ahora estoy mojada.
ꟷ¿A que dedicas específicamente? ꟷpregunto, sintiendo como sus manos roan mis brazos y su mirada se clava en la mía, mi corazón se aloca en mi pecho y creo que tengo un enjambre de mariposas en mi estómago, tan lindo, grande, caliente…
ꟷSoy actor porno ꟷmi cara se cae en un Que…
ꟷ¿Perdón? ꟷparpadeo y él se ríe de mi cara.
ꟷTengo algunos negocios que manejo con mi gerente, soy el típico jefe que solo se presenta en el momento indicado ꟷdice sin apartar la mirada, acariciando mi brazo.
ꟷ¿No serás mafioso? ¿Verdad? ꟷpregunto sonando algo histérica.
ꟷ¿Qué? No ꟷse ríeꟷ ¿A qué viene eso?
ꟷPues… claramente este es tu Pen no sé qué y según mi hermana el Pen no sé qué pertenece a los dueños del hotel o algún socio ꟷdigo conteniendo la respiración, su roce mi distraeꟷ. Eres eso, ¿un socio?
ꟷNo… soy el dueño ꟷdice manteniendo el tactoꟷ tengo otros hoteles, casinos y demás inversiones como el campo de golf, pero eso lo maneja mi madre.
ꟷA… y yo que te hacia mecánico de motos ꟷdigo como quien quiere la cosa.
ꟷBueno eso también, prácticamente me dedico a las motos mientras que digamos que como Jovi y porque las motos no pagan las facturas, tengo los hoteles y los casinos ꟷenumera y asiento sintiéndome intimidada.
ꟷMmm… entonces nada de mafia ꟷafirmo.
ꟷNada de mafias ꟷcorrobora.
ꟷ¿Ni narcos? ꟷsolo confirmo.
ꟷNi mucho menos lo que sea, ¿Por qué tanto drama? ꟷpregunta ladeando la cabeza viéndose tan tierno que solo le doy un beso.
ꟷComo que caí en la cuenta de que esto era mucho lujo como para una habitación de hotel y me sentí perdida ꟷadmito.
ꟷEspero que esto no cambie tu forma de verme ꟷpide.
ꟷNo, pero me deja tranquila el hecho que prácticamente le taparías el culo a mi madre, pero mejor la dejemos que siga creyendo que eres un mendigo, uno muy sexy ꟷdigo guiñándole un ojo
ꟷ¿Ok? ꟷafirma divertido.
ꟷAclarado el asunto, la ansiedad me abrió el apetito ꟷmurmuro señalando la mesa con la fruta y la crema.
ꟷMmm… eso me da ideas, princesa ꟷdice tomando mi mano llevándome hasta donde está la comida.
ꟷ¿Qué ideas? ¿Papi? ꟷpregunto con cierto interés erótico que el responde con un gruñido, levantándome, colocándome sobre la mesa y abriendo mis piernas para tomar el pote de crema y mirarme con un alto nivel de lujuria.
ꟷUnas ideas muy perversas y melosas ꟷadvierte, mientras que deja caer un poco de crema sobre mi vientre y baja juntándola con la boca.
Un gemido sale de mi boca y me dejo arrasar por su lengua, mientras mis manos estrujan su cabello.
Felicidades autora!
me encantó
muy entretenida