La Princesa Guerrera Incomparable

—¿quién eres?—preguntó el hombre.

—¡mi nombre es Isabella! ¿Cómo has sido herido? ¿Vives lejos? ¿Necesitas qué te ayude a encontrar a tu familia?—preguntó Isabella hasta que se detuvo sintiendo incredulidad—¿por qué lo estoy ayudando? Aunque llegue ayudar a alguien nunca le dirá nada de mí ni preguntaría sobre su vida ¿que me está pasando? ¡Por alguna razón siento que se volvió una persona importante! Debo dejar estos pensamientos el príncipe Malik tal vez me esté esperando en la mansión incluso mis padres—pensó dejando al lado esas emociones para levantarse.

—¿te irás?—preguntó con nervios sosteniendo la muñeca de Isabella.

Isabella al ver que sostuvo su muñeca no sintió repulsión incluso cuando el príncipe Malik sostuvo su mano no lo odió se sentía cómoda—¿qué deseas ahora?—preguntó con frialdad.

—¿puedo ir contigo?—preguntó mirando con tristeza a Isabella.

Al ver su expresión Isabella se sintió tan mal como si estuviera haciendo algo malo—¡está bien puede venir conmigo!—habló sin pensarlo.

El hombre sonrió levantándose, ambos caminaron son decir nada.

—¡me llamo Isaac!—habló mirando a Isabella con atención.

—¡Isaac! ¿tienes familia?—preguntó mirándolo.

—¡no lo sé!

—¿dónde vives?

—¡no lo sé!

—¿Recuerdas al menos sobre tu familia?—preguntó con sorpresa.

—¡no! Mi memoria se ha ido.

—¡que extraño! Bueno ya que te he dejado seguirme no dejaré que nadie te lastime—habló con una sonrisa sosteniendo su mano.

Isaac al ver la mano unida a la suya sintió como su corazón se aceleraba en su mente solo podía estar la hermosa carita de Isabella sonriendo—¡está bien! Yo también cuidaré de ti Isabella—murmuró levantando las comisuras de sus labios, su sonrisa es tan espléndida.

Al llegar a la mansión Isabella vio a sus padres.

—¡son mis padres! Te los presentaré—habló corriendo pero se detuvo al ver que su padre estaba atacando al herido príncipe malik—¡no!—pensó usando su poder sobrenatural.

La espada del padre de Isabella estaba por atravesar el cuello del príncipe Malik pero una energía blanca se mostró revelando el cuerpo de Isabella.

—¡detente!—gritó la madre de Isabella.

Isabella miró con determinación a su padre, su espada que estaba por atravesar el cuello de Isabella se detuvo antes de que la punta tocara su cuello.

—¡está viva! Mi hija estás viva—gritó el padre de Isabella soltando la espada.

El padre de Isabella la abrazo con fuerza temiendo que fuera solo una ilusión.

La madre de Isabella lloro mirando a su hija viva.

—¿qué les sucede?—preguntó alejándose de su padre.

—¡pensé que su alteza te había matado! No encontramos tu ubicación pasaron dos días—dijo su padre tocando las mejillas de Isabella.

—¡dos días! Es demasiado, el tiempo en ese lugar es demasiado lento pero afuera no lo es—pensó mirando con Incredulidad a su padre hasta que vio una figura detrás de su madre—¿quién es ella?—lo preguntó mirando a la joven.

La madre de Isabella al escuchar sus palabras acercó a la joven con una sonrisa—¡está es Alisson! Antes de que desaparecieras tu padre y yo vimos a esta chica ayudando a gente sin hogar al principio no teníamos mucho interés pero después pensamos que si la traíamos a casa sería alguien con quien puedas divertirte ya sabes que no estamos en la capital imperial así que una amiga estaría bien incluso podía volverse tu hermana—habló con una sonrisa.

Alisson avanzo con una sonrisa mirando a Isabella, estuvo su brazo—¡seremos hermanas! Al fin podré tener una familia, me había quedado aquí hace dos días tus padres te han estado buscando todo el tiempo—habló.

—¡en serio! No esperaba tener una hermana espero llevarnos bien—lo dijo Isabella alejándose de su agarré—¡cree que soy primeriza! Puedo notar que está chica es un loto, finge ser buena pero es todo lo contrario en mi vida moderna siempre encontré de este tipo ¡mientras no haga nada en mi contra no la mataré!—pensó sonriendo a Alisson.

Los padres de Isabella que estaban felices por ver notaron al hombre que lleva su ropa cortada.

—¿quién es el?—preguntó su padre mirando a Isabella.

Isabella al escuchar sus palabras volteó atrás mirando a Isaac—¡el! ¡Lo encontré!—lo dijo con indiferencia.

—¡tu! Está trayendo desconocidos a casa—dijo su madre con una expresión sería.

Isabella sostuvo la manos de su madre con una sonrisa—¡mamá! No te preocupes, no hará daño la verdad es que por alguna razón sentí que debería salvarlo, si hace algo yo me encargaré.

—¡está bien! Mamá te dejará que lo lleves a la mansión, le daremos una habitación de invitados.

—oye mamá ¿cómo supieron que no estaba en casa?

—"cuando no tenías almas siempre estábamos preocupados por ti así que usamos magia de rastreo para mantener tu seguridad"—murmuró tocando su cabecita.

—¡era eso! Entiendo, vamos adentro.

Sus padres asintieron entrando.

Isaac se detuvo al ver que Isabella no lo acompañaba—¿no vendrás conmigo?—murmuró.

Isabella al ver su mano sobre su palma sonrió apretándola—¡iré contigo después! Las sirvientas te llevarán a cambiarte.

—¡entiendo!

Isabella que estaba por entrar se detuvo al ver que el príncipe malik se quedó parado sin decir nada solo mirando a Isabella—¿no vas a entrar? ¡Dejame ver tu herida!—habló tratando de tocar su pecho.

Cuando Isabella esta por tocar su pechó, el príncipe malik quito su mano sin piedad.

—¡aléjate!—dijo con frialdad.

—¿qué te sucede?—preguntó siguiendo sus pasos.

El príncipe Malik se detuvo apretando los puños para luego mirar con frialdad a Isabella—¿quién es el? ¿Porque lo trajiste?—preguntó

—lo encontré herido, no podía dejarlo algo en mí dijo que no debía hacerlo, además no es el primero a persona que salvó salve a otro hombre quien es más guapo que Isaac—lo dijo con indiferencia.

Estas palabras provocaron que el rostro de el príncipe malik se volviera oscuro como la tinta.

—¡espera!—habló Isabella al verlo irse.

El príncipe Malik se detuvo mirando nuevamente a Isabella—¡deberías haber traído al otro hombre! ", así podrías coleccionar hombres"—lo dijo con ira.

—¿que le sucede? No he dicho nada malo, este príncipe malvado—pensó Isabella mirando su figura irse.