La Hermana De La Villana

Los días iban pasando, el compromiso de Alida y el príncipe Káiser ya había sido anunciado en todo el reino, también se anunció el nombramiento de príncipe heredero a Káiser y princesa heredera a Alida. Mientras esto ocurría Nadia y Hadiel, ponían en marcha su plan, Lucían había hecho correr el rumor de que el príncipe Káiser mantenía una relación secreta con leydi Cora, muchos se creyeron el rumor pues Cora se la pasaba en el palacio.

 - ¿Ya escucharon el rumor?, muchos dicen que leydi Cora mantiene una relación con el príncipe.- mencionaba Acacia Bernarth.- ¿Eso no le molesta señorita Alida?, pues después de todo el príncipe es su prometido.

 - Claro que no, solo es un rumor y si fuera cierto, pues bien por ellos.- menciono de forma calmada, no le importaba que hiciera su prometido, después de todo no estaba enamorada de él.

 - Solo dirá eso, ¿no le importa que el príncipe tenga un amorío?.- pregunto otra joven que se encontraba en la fiesta de té.

 - No, además ya debo acostumbrarme, ustedes saben bien que es normal tener concubinas.- dijo.- Bueno creo que ya es momento de retirarme, que tengan un hermoso día.- dijo para luego marcharse, pues no quería quedarse a escuchar como de alguna manera trataban de hacerla sentir mal.

Alida, después de salir de la mansión Bernarth, decidió caminar sola por el bosque, pues necesitaba pensar, Alida después de caminar un buen rato se espanta por un quejido de dolor, por curiosidad decidió dirigirse al lugar donde vino aquel ruido, al llegar al lugar pudo observar a un joven malherido, al verlo así decidió ir a ayudarlo.

 - ¿Se encuentra bien?.- pregunto preocupada.

El joven no respondió, al parecer ya se había desmayado por toda la sangre que perdió, al notar esto Alida decidió salir rápidamente del bosque a buscar ayuda.

 - Ustedes, vengan conmigo hay un hombre herido dentro del bosque, y necesita atención inmediata.

 Ordenó a sus guardias y estos obedecieron, y sacaron al hombre del bosque y lo llevaron a la mansión Goldwyn, al llegar el médico ya esperaba al paciente y lo atendió de manera rápida. Nadia que había visto llegar a su hermana con el vestido manchado de sangre se asustó y decidió ir con ella.

 - Alida, ¿qué fue lo que te paso?, hay que llamar al médico.- dijo angustiada.

 - No te preocupes Nadia, no es mi sangre.- Menciono calmando a su hermana.

 - Entonces, ¿de quién es?.

 - De un joven que encontré malherido en el bosque.

Poco después el médico sale de la habitación en donde se encontraba aquel joven, mencionando que se encontraba estable y que pronto despertaría, dicho esto el médico se retiró, Nadia y Alida decidieron ingresar para ver al joven.

 - Vaya sí que es guapo.

 - Nadia, no digas eso, no ves que casi muere.- dijo reprendiendo a su hermana.- Además estás muy chiquita como para hablar de esa manera

 - Oye, solo me llevas dos años.

 - Bueno, debo ir con nuestro padre, pronto iré a vivir a palacio para tomar clases como princesa heredera.- lo dijo desanimada.

 - Yo estoy segura de que no te casaras con el príncipe Káiser, así que no te preocupes, pero si debes tomar las clases, porque estoy segura de que si serás reina.

 - ¿A qué te refieres?.- pregunto confundida, por lo dicho por su hermana.

 - No, nada mejor ve con nuestro padre.

Dicho esto Alida fue a la oficina de su padre, en cambio, Nadia se quedó un momento con el muchacho, cuando también decidió marcharse de la habitación el joven despertó.

 - ¿En dónde me encuentro?.- pregunto a Nadia, mientras se acomodaba y comenzaba a examinar su herida

 - Se encuentra en la mansión Goldwyn, mi hermana fue quien lo encontró en el bosque y lo trajo para que lo atendieran.

 - Agradézcale a su hermana de mi parte, yo ya debo retirarme.- comenzó a levantarse de la cama, pero sentía un gran dolor en el abdomen, cosa que Nadia noto.

 - Oiga, no debe levantarse no ve que se encuentra herido.- se acercó y comenzó a acostarlo en la cama.

 - Sé que estoy herido, pero debo irme.- protesto.

 - Mire que tal, y nos presentamos charlamos un poco, mientras su herida mejora y pueda retirarse.

 - Bien.- dijo resignado.

 - Bueno yo soy Nadia Goldwyn, hija menor de los duques Goldwyn.- se presentó Nadia esperando a que el joven haga lo mismo.

 - Soy Rowan.- Cuando dijo su nombre, Nadia quedó sorprendida.

 - ¿Usted es el segundo hijo del rey?

 - Sí, yo y mis guardias fuimos atacados, fui el único que escapó.- menciono con tristeza.

A Nadia le sorprendió lo dicho por Rowan, él le explicó que está seguro que el ataque era para matarlo, pues escuchó a uno de los asesinos mencionar su nombre. A Nadia esa revelación le sorprendió pues en la novela no se mencionaba tal acto.

 - ¿Y sabe quién fue el que envió el ataque?

 - No, pero lo voy a averiguar.- lo dijo decidido, luego dirigió su vista a Nadia.- ¿Podría ayudarme?

Claro, que necesita.

podría enviar una carta al palacio.

por supuesto.

Después de aquella charla Nadia hizo lo que le pidió Rowan y envío una misiva al palacio mencionando que el príncipe había sido atacado y se encontraba herido, cuando la carta llegó al rey, este se encontraba molesto y preocupado por su hijo quién sería capaz de atentar contra la vida de un príncipe. El rey fue personalmente a la mansión Goldwyn.

Majestad que gusto verlo, me enteré de lo sucedido con su hijo, se encuentra en la habitación de invitados.- dijo el duque, su hija Alida le había comentado la situación.

Duque, agradezco que cuidara de mi hijo a pesar de nuestras diferencias.

Poco después se dirigió a la habitación en donde se encontraba su hijo al verlo, lo abrazo quería demasiado a Rowan, no se perdonaría que algo malo le pasará.

Hijo mío, que bueno que estés bien, averiguaré quien te hizo esto y lo ejecutaré.

Padre estoy bien gracias a leydi Alida, fue ella quien me encontró malherido en el bosque.

Se lo agradezco señorita Alida, estoy feliz de que en un futuro sea mi nuera.

Alida solo se limitó a asentir pues no sabía que decir, cuando Nadia le dijo que aquel joven al que había ayudado era el príncipe Rowan no podía creerlo.