Una Vuelta Es Mucho.

Después de la boda, las chicas decidieron salir a celebrar la noche en un club exclusivo de la ciudad. Mientras entraban, se encontraron con Paola, la hermana de Sergio.

Sofía, Selena y Taylor se pusieron tensas al ver a Paola, recordando el pasado de Elena con Sergio. "Elena, ¿estás segura de que quieres hablar con ella?", preguntó Sofía.

Elena las calmó con una sonrisa. "Chicas, no tienen nada que ver. Paola no tiene culpa de lo que hizo Sergio".

Taylor y Selena se miraron entre sí, aún dudando. "Está bien", dijo Taylor, "pero si algo sale mal, nosotras estamos aquí para ti".

Elena se acercó a Paola, que parecía nerviosa. "Hola, Paola. ¿Qué tal estás?"

Paola sonrió débilmente. "Hola, Elena. Me alegra verte".

Sofía, Selena y Taylor se unieron al grupo, aún con cierta reserva. Pero Elena les hizo señas de que todo estaba bien.

"Paola, quiero que sepas que no te culpo por lo que hizo Sergio", dijo Elena. "Eres su hermana, no su cómplice".

Paola se relajó un poco. "Gracias, Elena. Significa mucho para mí".

Las chicas comenzaron a hablar y reír juntas, olvidando las tensiones iniciales. Paola resultó ser una persona amable y divertida, y las amigas de Elena comenzaron a verla de una manera diferente.

"Lo siento por antes", dijo Taylor, sonriendo. "No sabíamos que eras tan cool".

Paola se rió. "No hay problema. Entiendo por qué teníais dudas".

La noche continuó con risas y música, y las chicas se dieron cuenta de que a veces es importante darle una oportunidad a la gente antes de juzgarla.

Después de la separación de Elena y Sergio, este último volvió con Carola, la mujer por la que había dejado a Elena. La relación entre Sergio y Elena había sido intensa, pero su amor por Carola había sido más fuerte.

Sergio y Carola habían mantenido una relación secreta mientras él estaba con Elena, y finalmente, decidió dejar a Elena para estar con Carola.

Después de la separación, Sergio y Carola decidieron casarse en una ceremonia lujosa rodeados de familiares y amigos. Fue un día perfecto, lleno de amor y felicidad.

Después del matrimonio, Carola quedó embarazada de su primer hijo, un niño al que llamaron Sergio Jr., en honor a su padre. Dos años más tarde, nació su segunda hija, Carlota.

Sergio se convirtió en un padre dedicado y amoroso, y Carola en una madre cariñosa y atenta. Juntos, formaron una familia feliz y unida.

Elena, por otro lado, había tardado tiempo en superar la dolorosa separación, especialmente sabiendo que Sergio la había dejado por otra mujer. Sin embargo, con el tiempo, había logrado cerrar ese capítulo de su vida y estaba enfocada en su futuro.

La noticia del matrimonio y los hijos de Sergio llegó a Elena a través de amigos comunes, y aunque aún sentía un poco de dolor, sabía que había superado esa etapa de su vida. Estaba feliz y satisfecha con su vida en privacidad, rodeada de sus amigas y familiares.

Mientras las chicas y Elena estaban de compras en París, se encontraron con Alexandra Saint Mleux, la hermosa y elegante novia de Charles Lecrec, el famoso piloto de Fórmula 1.

Alexandra, con su sonrisa radiante y su estilo parisino, se acercó a ellas y se presentó. "Bonjour, mesdames. Me llamo Alexandra. ¿Qué las trae a París?"

Las chicas se sintieron inmediatamente atraídas por su encanto y simpatía. "Hola, Alexandra. Nosotras somos Sofía, Taylor, Selena y Elena", respondió Sofía.

Alexandra se interesó por sus vidas y pasatiempos, y pronto descubrieron que tenían mucho en común. "Me encantaría invitarlas a una carrera de Fórmula 1", dijo Alexandra. "Charles estará compitiendo y sería un placer tenerlas allí".

Aunque las chicas se sintieron emocionadas, solo Elena aceptó la invitación. "Me encantaría ir", dijo Elena. "Siempre he sido fanática de la Fórmula 1".

Sofía, Taylor y Selena declinaron la invitación, prefiriendo disfrutar de su tiempo en París de otras maneras. "Gracias, Alexandra, pero tenemos otros planes", dijo Sofía.

Alexandra sonrió. "Entiendo. Pero Elena, te enviaré los detalles de la carrera. Estaré encantada de tenerte allí".

Elena se sintió emocionada ante la perspectiva de ver a Charles Lecrec en acción y conocer mejor a Alexandra. "Gracias, Alexandra. Estoy ansiosa por la carrera".

Y así, Elena se preparó para una emocionante aventura en el mundo de la Fórmula 1, mientras sus amigas continuaban disfrutando de su viaje a París.

Elena se sintió emocionada al aceptar la invitación de Alexandra a la carrera de Fórmula 1. Ya conocía a Sergio, su ex novio, y a Lewis Hamilton, George Russell y otros miembros del equipo Mercedes, con quienes había entablado una buena amistad.

En el paddock, Elena se reunió con sus amigos de Mercedes y se sintió como en casa. Lewis la abrazó calurosamente. "¡Elena! ¡Qué alegría verte de nuevo!"

George Russell se unió a la conversación. "Elena, ¿cómo estás? ¿Disfrutando de la carrera?"

Elena sonrió. "Sí, estoy genial. Gracias por preguntar".

Sergio, que estaba cerca, se acercó a ellos. "Hola, Elena", dijo con una sonrisa.

Elena lo saludó con una sonrisa forzada. "Hola, Sergio".

Aunque había superado la ruptura, Elena aún sentía un residuo de miedo y vulnerabilidad cuando estaba cerca de Sergio. Intentaba mantener la calma, pero su cuerpo traicionaba sus emociones.

Lewis, notando la tensión, intervino. "Bueno, Sergio, ¿cómo va la familia?"

Sergio sonrió. "Muy bien, gracias. Los niños están creciendo rápido".

Elena se sintió aliviada cuando Sergio se fue con su familia. Aunque había superado la ruptura, aún necesitaba tiempo para procesar sus emociones.

Alexandra, notando la reacción de Elena, se acercó a ella. "¿Estás bien?" preguntó con preocupación.

Elena asintió. "Sí, estoy bien. Solo necesito un momento".

Alexandra la abrazó. "Estoy aquí para ti, amiga".

Mientras tanto, Toto Wolff, el jefe del equipo Mercedes, se acercó a ellos. "Elena, ¿qué tal estás? ¿Disfrutando de la carrera?"

Elena sonrió. "Sí, Toto. Gracias por preguntar".

Toto sonrió. "Me alegra verte de nuevo. Eres parte de la familia Mercedes".

Elena se sintió agradecida por la calidez y el apoyo de sus amigos en el equipo Mercedes. Sabía que podía contar con ellos, independientemente de lo que pasara con Sergio.