Deseo Ser Y Hacerte Feliz

Samuel veía su linda cometa enredada en la rama de un árbol de roble, para un adulto no sería difícil alcanzarla, pero para un niño de cinco años si lo era, Samuel hacía de cuánta pirueta para alcanzar su cometa, pero nada le resultaba, hasta que una idea cruzó por su mente.

___ "me subiré al árbol y alcanzaré mi cometa, luego me iré a casa"

Cómo había un par de ramas bajas Samuel comenzó a trepar el árbol, estaba a punto de alcanzar la cometa cuando de repente oye el trote de un caballo que se acerca a él, eso lo asusta y pierde el control cayendo al suelo.

"Auch, Auch" _ se quejó Samuel más asustado que adolorido.

Kevin había estado paseando por los alrededores de la villa tratando de distraerse, se perdió en los maravillosos paisajes que encontró y siguió andando en su caballo sin rumbo hasta que se dio cuenta que había traspasado las fronteras de su villa, por un momento quiso regresar, pero la opresión de su pecho se intensificó haciendo que continuara andando hasta que logra visualizar al niño sobre un árbol, su corazón se disparó y en vez de pausar el trote del caballo lo que hizo fue echar a andar más rápido haciendo así que el pequeño niño se asustara y cayera al piso.

Kevin se bajó de su caballo a toda prisa a auxiliar al niño que lloraba en el suelo.

_____ niño ¿qué hacías sobre ese árbol? ¿Te lastimaste mucho? ¿Estás solo? _ Kevin de lo nervioso que estaba invadió al pequeño con varias preguntas mientras se arrodillaba frente a él y lo miraba.

Samuel al no estar acostumbrado a ver otras personas que fueran su madre o el mal humorado de su padre, sintió miedo al tener a un extraño tan cerca de él, quiso levantarse y huir, pero le dolía la rodilla izquierda, se la había raspado.

_____ no tengas miedo niño, solo quiero ayudarte. _ expresó Kevin al ver el miedo reflejado en los ojos del pequeño. ____ mira mi nombre es Kevin Ballesteros, vivo en una villa que está en las colinas, solo estaba dando un paseo en mi caballo, y mientras pasaba por aquí te Vi en el árbol y solo quería ayudarte a bajar, pero veo que lo que hice fue asustarte y por eso te caíste. _ explicaba Kevin despacio. ____ ¿me disculpas por favor? _ le pidió al niño con mirada apacible.

Samuel notó la sinceridad en las palabras del hombre y dejo de llorar y asintió con la cabeza, queriendo decir que disculpaba a Kevin.

____ yo solo quería alcanzar la cometa que me hizo mi mami, se quedó enredada en la rama del árbol. _ respondió el niño con voz dulce y asustada y señalando el lugar en donde se encontraba la cometa.

Kevin sacó de su bolsillo un paquete pequeño de toallitas húmedas y limpió la rodilla del niño, luego le amarró un pañuelo blanco.

____ listo. _ dijo cuando terminó. ____ ahora permíteme alcanzar tu cometa que por cierto está muy bonita.

____ si, es muy bonita, me la hizo mi mamá, y muchas gracias por ayudarme. _ dijo el niño agradecido.

____ y ¿dónde está tu mamá?

____ ella está en casa, le duele mucho su cabeza y por eso no me acompañó a jugar, pero ella me dijo que no me alejará de la casa y yo la desobedecí. _ exclamó Samuel apenado.

Kevin ve el rostro del niño y le causa mucha ternura y algo estremece su pecho cuando ve los dulces ojos de ese niño, son los mismos ojos de aquel niño de sus sueños

____ ¿cómo te llamas? _ le pregunta Kevin con una indestructible sensación especial.

____ me llamo Samuel López. _ responde el niño orgulloso.

____ bueno Samuel si me lo permites, te llevaré a tu casa, no es bueno que un niño ande solo por ahí y menos lastimado. _ dijo Kevin con precisión y Samuel asintió.

Samuel le explicó un poco a Kevin por dónde debía coger para llegar a su casa y el hombre lo subió al caballo mientras el iba caminando con las riendas del animal en sus manos, cada paso que Kevin daba era una sensación diferente, tenía un presentimiento en su pecho y por momentos sentía que su corazón bajaba hasta su estómago.

Emily se acordó de pronto de su hijo y se levantó de inmediato, se había quedado dormida, rápidamente fue al baño y se lavó la cara, se arregló un poco el cabello, se colocó un par de chanclas cómodas y salió en busca de su pequeño, al llegar al patio mira en varias direcciones y no ve a su hijo por ningún lado, se llena de nervios y comienza a llamarlo.

_____ ¡Samuel! ¡Samuel! ¡¿Samuel hijo dónde estás?! _ Emily se estaba preocupando.

_____ ¡mamá, mamita! _ gritó Samuel desde arriba del caballo, su madre salió a su encuentro y se asustó al ver el pañuelo amarrado en su rodilla izquierda.

_____ ¿mi amor qué te pasó? _ pregunto la mujer estirando sus brazos hacia su pequeño.

Kevin al ver a Emily sintió la necesidad de abrazarla, pero se contuvo, lo último que quería era asustarla o faltarle al respeto, pero al cruzar su mirada con la de ella pudo confirmar que aquella hermosa mujer de ojos azules era la mujer de sus sueños.