Diana es una chica muda, que es obligada por su tío a casarse con un hombre muy poderoso, qué le va ayudar a salvar su empresas de la ruina... Al poco tiempo de casados Edwin termina por enamorarse de Diana, aunque la chica no puede hablar, se da cuenta de que es diferente al resto de las otra mujeres, Diana es dulce, amorosa, y respetuosa con los ancianos. Sin embargo, descubre que le queda muy poco tiempo de vida y prefiere alejarla por su bien.
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Es tu esposa
Antonio se molestó mucho más con la actitud de Flor. Sin embargo, era la mujer a quien más amaba, por lo tanto, jamás iba a decir algo que la hiriera.
_ Está bien, como siempre tú ganas... _ Antonio apretó los dientes, para poder decirle eso a su esposa.
__ ¿Me lo puedes volver a repetir?... No escuché bien las palabras que has susurrado entre dientes. _ Flor no se iba a detener hasta que su esposo le pidiera una disculpa sincera.
__ Olvida lo que acabo de decir, lo siento, cariño. No volveré hablarte de esta manera ... _ Antonio se vio obligado a disculparse con Flor, de lo contrario, esa habitación se iba a convertir en un campo de batalla.
Él mejor que nadie sabía lo terca y testaruda que era su esposa. Para evitar problemas, Antonio cedía a pedirle disculpas a su esposa.
_ Ahora sí, estoy escuchando muy bien.
__ Creo que me falló por un momento este aparato, y no escuchaba las palabras dulces que me decías.
___ ¡Ahora sí, ya lo he solucionado... _ Contestó Flor en una voz muy dulce, y dibujando una leve sonrisa entre sus labios.
Flor caminó hasta donde estaba Antonio, tomó la mano de su esposo y lo llevó a sentarse a la cama. Con unas ligeras palmadillas en las manos de Antonio, Flor comenzó hablar.
___ Es una niña hermosa, y muy inteligente... No tengo duda que Edwin ha escogido a la mejor mujer como esposa...
A Antonio no le interesaba mucho la vida de Diana, solo esperaba que ella estuviera a la altura de su nieto, y le pudiera ayudar en todo lo relacionado con el manejo de las empresas...
Al igual que Flor lo había hecho en su tiempo con él, y también Fátima, la madre de Edwin, lo hizo con su hijo.
Lo menos que Antonio deseaba es que Diana fuera la típica chica que no hace nada, y que solo quiere robarle el dinero a Edwin.
___ Es hermosa, tiene un rostro bastante bello, pero... _ Antes de que Antonio terminara de hablar, sus labios fueron sellados por la mano de su esposa.
___ Pero, nada. Para mí es la chica más hermosa que Edwin pudo escoger en toda su vida... Por todo lo demás yo me puede hacer cargo... _ Dijo Flor con mucha seriedad.
___ Quiero conocerla mucho más, y no hay mejor manera que llevarla a la vieja mansión...
___ ¿En la vieja mansión?... _ Antonio estaba sorprendido con las palabras de su esposa.
___ ¡Sí!...
___ Edwin está por salir de viaje, su madre me lo contó. En lo que Edwin regresa del extranjero y compra una Villa para ellos, me puedo llevar a Diana a vivir a nuestro hogar...
___ Este departamento es muy pequeño para unos recién casados... _ Flor se sintió muy emocionada, de poder ayudar a su nueva nieta.
Al notar que no podía hacer nada para lograr que Flor cambiara de opinión, Antonio se dio por vencido, iba a dejar de insistir, por lo cual fuera Diana la que desilusionara a su esposa.
___ Las cosas como siempre se van a hacer como tú quieras. _ Antonio acarició la mejilla de Flor, le dio un tierno beso en la frente.
Afuera de la habitación, Edwin no paraba de hablar por teléfono. Desde que salió de la habitación había ignorado a la chica en todo momento.
Diana era como una decoración más dentro de ese lujoso departamento, solo podía ver a Edwin caminar de un lado para otro, mientras hablaba por teléfono.
Diana se quedó sentada en el sillón más escondido, colocó sus manos encima de la mesa delante de ella, agachó su cabeza, colocando sobre sus manos.
A Edwin no le importo en lo más mínimo la tristeza de Diana, él solo se casó con ella para darle gusto a su familia, ahora que Sara ha regresado se encontraba demasiado confundido y furioso.
__ ¡Cancela el viaje, no voy a poder llegar a tiempo!... ___ Edwin estaba demasiado molesto mientras hablaba.
___ Señor, es muy importante este viaje, de eso depende que se cierre la negociación con el viejo Carlos... ___ Teo trató de convencer a Edwin de no cancelar el viaje.
___ ¿Qué no has entendido? ¡Cancela todo!... Necesito estar en esta ciudad... ___ Edwin no dejaba de pensar en Sara.
___ El señor Lu, no va a estar de acuerdo con cancelar esta junta... Si no se hace la negociación, sus empresas pueden ganarse un fuerte enemigo... __ Teo intentó de todas las maneras posibles convencer a Edwin.
Carlos Lu, era un hombre extremadamente vengativo, no le agradaba que le hicieran perder su tiempo, y mucho menos que alguien le cancelará de un momento a otro, una cita de negocios...
Desde que murió su hijo, y trató de encontrar a su nieta perdida. Carlos Lu, se había vuelto un hombre muy exigente; y odiaba a las personas que lo trataban de hacer perder su tiempo.
Luego de pensarlo por unos segundos, a Edwin no le quedó de otra que viajar, o estaría en graves problemas.
___ Confirma el vuelo.
Edwin terminó la llamada, guardó su móvil, y si decir nada caminó hasta su habitación. Llamó a la puerta, para sacar su maleta.
___ Necesito tomar la maleta... _ Edwin dijo para que sus abuelos salieran de la habitación.
En poco tiempo la puerta se abrió, Flor fue la primera en salir, miró a su nieto de arriba abajo sin decir ni una sola palabra...
Sin embargo, al buscar a Diana con la mirada y verla sentada en el sillón más alejado, Flor se enojó con su nieto, era claro, que él no estaba enamorado de su esposa.
___ Edwin, ¿por qué no has comprado ni un solo vestido para tu esposa?... ¿Acaso piensas tenerla desnuda?.
___ Lo sé, iba a mandar a Teo a comprarlos.__ Contestó Edwin sin ni siquiera voltear a ver a Diana.
___ ¡¿Has escuchado?!... _ Flor le preguntó a su esposo.
___ Edwin, es un hombre muy ocupado, él no tiene por qué hacer eso. _ Antonio se puso de parte de Edwin.
__ Su primera ocupación, debe ser su esposa. ¡Todo lo demás puede esperar!...
___ Diana es su esposa, y su obligación como esposo es darle todo a su esposa... No importa si está ocupado o no...
Flor pasó a un lado de Edwin, molesta por la poca importancia qué Edwin estaba dándole a Diana.
La chica era tan linda, no era justo para ella recibir tanta frialdad por parte de Edwin, apenas se casó.
El chico, únicamente, pudo dar un profundo suspiro. Su abuela podía ser una mujer muy dulce y amable, pero, en ocasiones, solo Antonio la podía soportar.
___ No sé, ¿Cómo has podido aguantar tantos años a la abuela?... _ Le preguntó Edwin.
___ Cuando te enamores de una mujer con tanta intensidad, como yo lo he hecho con tu abuela, vas a saber que no importa el carácter, lo que en verdad importa es su corazón y la manera en que ella te ama a ti...
Antonio le dio una palmada en el hombro a Edwin, luego terminó de desocupar la habitación.
Rápidamente, Edwin entró a su habitación, tomó la maleta que ya estaba lista, y se apresuró a salir de nuevo.
Al salir, miró a Diana, la chica trataba de esconder su tristeza con una sonrisa. Edwin dejó la maleta cerca de la puerta, y fue a donde estaba su esposa hablando con los abuelos, a través de señas.
Al llegar a ella, la tomó de la cintura, besó sus labios con ternura... Al terminar, se dio la vuelta sin decirle ni una sola palabra a Diana, no obstante, el beso de Edwin fue de lo más lindo para Diana.
_ Tranquila, mi amargado nieto, solo va a tardar un par de días fuera del país, luego va a regresar para hacerte inmensamente feliz. _ Flor abrazó Diana.