Esta es la historia de un hombre que vive una hermosa y huracanada realidad, pero hay momentos en que tiene sueños muy vividos y al despertar no puede distinguir que es real y no, ¿Qué pasa si tu vida de ensueños es eso, solo un sueño vivido?, ¿existe tu realidad?, sueños que te hacen pensar y preguntarte ¿Dónde realmente estoy?
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Parte 11 - la respuesta hallada
Tadeo no la pasaba nada bien, noches de desvelo se reflejaban en su ser, todos los que lo rodeaban podían notarlo, aunque se esmeraba por disimilar, los empleados de la empresa están preocupados, comenzaban los rumores desde el desconocimiento, se implementaban debates entre ellos sobre si estaba enfermo, sobre si la compañía estaba en peligro, cosas como también sobre una posible depresión por su soledad amorosa, estipulaban que podría ser homosexual y eso le pesaba, porque jamás lo veían con mujeres o conocieron una novia, temas tan banales se esparcían por los pasillos, que haciendo ecos llegaban a los oídos de nuestro hombre y sacaba una sonrisa, lejos de aclarar cuestiones sobre su vida privada, solo se limitó a solicitar a su comité que informe a todo el personal que se tomaría unas semanas de descanso, que las acciones y temas relacionadas con la empresa están en orden y perfectas.
Volvió a su hermosa mansión, se vistió con ropas cómodas, se sirvió un vaso de brandy, ambiento la sala con música de su agrado y prendió su computadora. Luego de horas de búsquedas en distintas plataformas, encontró la información ansiada, se topó con la Doctora Aliss, experta en distintos trastornos del sueño, se capacito en Estados Unidos, realizo prácticas en Reino Unido, también hizo capacitaciones en La Sociedad Europea de Investigaciones sobre el Sueño, realmente se encontraba dedicada al área, ese compromiso medico buscaba Tadeo, busco su correo electrónico para comunicarse con ella y plantear su caso, una vez que envió el email, con paciencia y satisfacción espero la respuesta, mientras respiro profundo recostó su espalda sobre el sofá y disfrutaba su vaso de brandy con la música de fondo acompañado de una luz tenue.
Se relajó tanto que sin darse cuenta se queda dormido, de golpe despierta y se encuentra en un lugar recurrente en sus sueños, donde todos están vestidos de blanco y él también, donde está sentado en una silla de ruedas de costado a un ventanal pero no puede moverse, no puede hablar, intenta con todas sus fuerzas pero sin éxito, algo tibio siente salir de su boca que empieza a tocar su mentón, se acerca una mujer para pasar un trapo con cuidado, era su propia saliva, más lo angustiaba y desesperaba, mientras la agitación empieza una maquinita comienza a sonar en él, no logra comprender nada, como en los sueños anteriores, la misma mujer se acerca y ve una pequeña pantalla que está sobre sus piernas apoyada y le dice: "sus onda cerebrales están alborotadas nuevamente, ¿Qué estarás pensando para que estén así?, te llevaré a tu sala, así no entras en colapso", la incertidumbre era agobiante, sentía que su pecho se cerraba, que sus pulmones se estaban marchitando, y la incapacidad de hablar o moverse era traumático, observa que junto a un hombre muy grande lo levantan y acuestan en una cama pequeña, incomoda y mal oliente, pues olía a fluidos como orín y otras fragancias indeseables, lo acomodan y colocan un suero en un catéter que posee en una de sus manos, empieza a sentir pesados sus ojos y pensamientos hasta que se pone todo negro y despierta en su sala exaltado, empapado en sudor y mira su mano, donde puede ver una marca como cicatriz, la misma donde en su sueño tiene puesto el catéter, no lograba recordar si siempre tuvo esa marca allí o si es una cicatriz de cuando estuvo en coma, todo era tan confuso y desgastante, muchas preguntas y ninguna respuesta.
Observa su correo electrónico y no poseía ningún correo nuevo, actualiza la página y nuevamente nada, se levanta y decide ir a darse un baño, era algo necesario, sentía que los olores que sintió en su sueño están impregnados en él, era nauseabundo.