De la noche a la mañana pasé de ser un asesino a un joven de la época antigua que desde su niñez ha sido maltratado.
Ahora soy Keyler hijo de un archiduque, mejor dicho, para él soy un bastardo, lo único que me alienta es que estoy en una novela donde se encuentra mi villana favorita.
- Bien hermosura, cambiaré tu destino junto con el mío.
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SALVAR LA VIDA DE ALGUIEN.
Rubén no preguntó porque Keyler había llamado de esa manera a su padre pero si se ponía en su lugar, el también estaría enojado por ser encerrado desde pequeño y tener tratos parecidos como a un esclavo.
El carruaje se puso en marcha y Keyler trataba de recordar que más pasaba en la historia, los padres de Esther después de ver como su hija murió no descansaron para hacer pagar al Duque Julián y atacar varias veces la vida de Thalia pero al final fueron descubiertos y ellos también tuvieron un destino cruel.
- Esto va a ser muy complicado.
- A qué se refiere amo?
- Salvar la vida de alguien.
- Conoce a alguien que este en peligro?
- Pronto morirá si no hago nada.
- y qué piensa hacer?
- Salvar a esa persona.
~ MANSIÓN DEL ARCHIDUQE ~
- Ese mocoso no puede saber nada, seguro lo inventó.
- Cómo va a inventar algo que es cierto? Debí matarlo cuando murió su madre.
- Tu tuviste la culpa, te encaprichaste tanto con esa mujer todo para que ella diera a luz al hijo de tu hermano.
- Mi hermano me la quitó pero eso ya no importa, ambos están muertos y ahora su hijo es un problema.
- Ese bastardo no tendrá los mismos derechos que mi hijo Joaquín!!
- No le daré nada, no se que le ha pasado pero debemos hacer algo.
- No te preocupes cariño mandaré a matarlo, tengo a expertos que pueden hacer ese trabajo.
- Haz eso, aunque ese mocoso me dijo que si enviaba a matarlo estaría cometiendo suicidio.
- No le hagas caso, mañana mismo enviaré a algunos hombres a que lo maten.
La esposa del archiduque ya tenía planeado matar a Keyler en su cumpleaños pero ahora está adelantando la muerte de él, lo que no sabe es que alguien más pagará las consecuencias si ella hacía eso.
- Padre su hijo es un maldito, hace horas estaba coqueteando con Esther!!! ._ Dijo Joaquín entrando a la oficina de su padre.
- No le hará caso.
- Cómo salió de ese hueco en el que estaba?
- Me has hecho acordar.
El archiduque mandó a guardias a que llevaran al hombre que se estaba encargando de maltratar a Keyler todos los días pero para su sorpresa se enteró que ese hombre estaba muerto.
- Cómo sucedió? Quien lo mató?
- Archiduque, cuando nosotros llegamos encontramos ese cuerpo con varias apuñaladas y un palo de madera con sangre.
- Quién lo hizo?
- Interrogamos a todos los que estaban cerca de ahí y una sirvienta dijo que fue su mismo hijo.
- Keyler!??._ Preguntó sorprendido Tomás.
- Si, fue el.
- Padre no creo que haya sido ese bastardo, el es muy débil, alguien debió ayudarle.
- Lo mismo pienso, ve y mata a esa sirvienta, les habrá mentido.
Los guardias hicieron caso a las órdenes de Joaquín y fueron a matar a la sirvienta que había hablado.
~ EN LA NOCHE ~
- Dónde está mi nueva habitación?
- Se arreglará mañana.
- Lo quiero ahora, ya le di suficiente tiempo.
- Tengo cosas más importante que hacer que estar pendiente de una habitación tuya.
- No me haga perder la paciencia archiduque.
- No le hables de esa manera a mi padre, respetalo!._ Dijo Joaquín molesto.
Solo hace un momento estaban padre e hijo en la oficina del archiduque ya que la archiduqueza hace media hora se había ido a contratar a los asesinos, después de un rato llegó Keyler y entró sin tocar la puerta.
- Respetar a esa escoria? No me hagas reír.
- Padre acabe con él, no ve que detesto su presencia?
- Keyler vete de mi oficina!!
- No hasta que usted y yo hablemos porque tengo otra petición, así que bote a su hijo de aquí de una vez.
- Estas loco? Mi padre no me echará de su oficina!
- Lo estoy esperando.
Keyler miró al archiduque con una mirada seria y se veía de que no estaba jugando, Tomás tuvo que pedirle a su hijo que se retire de su oficina para ver que era lo que quería ahora Keyler, algo que enojó más a Joaquín.
- eché a mi propio hijo de su futura oficina, así que dime lo que tengas que decir y lárgate.