Capitulo 16

...BAMBI...

Mi cuerpo dolia como los mil demonios y estaba seguro y hasta cojeaba pero me fue imposible comprobarlo porque los hombres de Nikolay me llevaron a rastras a su despacho.

— Señor — Dijo uno de sus hombres empujandome dentro de la habitacion.

Nikolay solo hizo un ademan con su cabeza indicando que salgan y dejándome sola con el rubio.

— Ponte a trabajar — Demando este.

No pensaba discutir, estaba cansada, mi cuerpo dolía al igual que mi cabeza y ademas necesitaba hablar con mi padre, entonces debía terminar con esos códigos.

Sin emitir palabra me acerque al escritorio y me senté en la silla frente a este, de reojo podia ver como Nikolay hacia muecas frente a los papeles que leía. Quien diría que alguien tan psicopata como el podría tener esa cara de niño bueno.

Comencé a armar los códigos que me permitirían comunicarme con mi padre, sabia que me arriesgaba mucho con Nikolay en el despacho pero no tenia mas tiempo era hacerlo ahora o me quedaría para siempre aquí. Estaba en los últimos detalles, así que pronto podría tener noticias de mi familia.

Algo se me removió en mi interior, sentía una mezcla de felicidad y de esperanza algo que ayer el idiota de Alessandro se había ocupado de enterrar con su nula actuación.

La mañana paso lentamente, Nikolay solo se dedico a hacer llamadas y leer unos papeles mientras yo hice parte de mis códigos y luego continue con la decodificación marroquí. Por momentos me levantaba a servirme cafe y podia sentir la mirada del ruso sobre mi, pero justo cuando intentaba atraparlo este simplemente ya no estaba mirando.

Podría usar eso a mi favor.

— Necesito ropa — Hable por fin. Aun así Nikolay no movió ni un solo músculo — Eh rubio, te estoy hablando a ti — Rápidamente me levante y me dirigí donde el, estaba sentado en su sofa con ambas piernas abiertas leyendo unos documentos.

Dios dame fuerzas.

Casi sin analizarlo tome los papeles que estaba leyendo y se los quite. Nikolay rápidamente se paro frente a mi regalándome una mirada de te voy a matar.

— Te estoy hablando Nikolay.

— No me toques los cojones Petrucci, devuélveme esos documentos.

— Cuando me des ropa.

—¿Tu te piensas que estas en un hotel cinco estrellas? Agradece y confórmate con lo que tienes — Dijo tratando de manotear los documentos pero fui mas rápida— Dame los documentos Petrucci.

— ¿O si no que? ¿Me golpearas? Digo eso ya lo hiciste estoy segura que puedo manejarlo. O tal vez me encierres en aquel calabozo, algo que también hiciste pero adivina que, puedo manejarlo.

Nikolay me tomo por el cuello acercándome a el.

— No me gusta tu actitud italiana, no se quien te dio tal confianza pero si quiero puedo matarte aquí mismo, ya no me sirves para nada.

— Hazlo ruso, nadie te detiene.

— Dame los documentos.

— No — Dije acercando mi rostro al suyo.

Nikolay apretó mi cuello y rodeó mi cuerpo tratando de tomar mis manos y así sacándome los documentos.

No podia hacer mucho con un hombre de un metro noventa.

El ruso inmediatamente me soltó, me sentía una idiota pero no me iba a quedar callada e iba a seguir insistiendo.

— Nikolay.

— ¿Que cojones quieres Petrucci?

— Ropa. O al menos préstame una de tus sudaderas — Dije acercándome de nuevo a el — Mi ropa esta húmeda, no se seca bien y todos los días me pasa lo mismo — Dije tocando el cuello de su camisa. El ruso no entendía lo que estaba haciendo ni siquiera yo lo hacia, pero necesitaba probar algo.

— ¿Que haces italiana?

— Nada ¿Por que lo preguntas? — Dije a la vez que acomodaba el cuello de su camisa — Me gusta cuando usas camisas como esta — Comencé a bajar mis manos a los botones de la camisa, pero Nikolay tomo mis manos acercándose a mi rostro.

Genial, la poca valentía que había ganado se esfumo en el momento en que su rostro se pego al mío.

— ¿Que es lo que intentas italiana? — Dijo pegándome a su cuerpo. Válgame Dios.

— Nada, aléjate de mi — Dije empujándolo con mis manos, pero el rubio no se movió ni un solo centímetro. Esto ya no me divertía.

— ¿Enserio intentabas seducirme? — Una carcajada salió de su boca.

— Ya quisieras ruso psicopata.

— Eres muy obvia Bambi — Sus manos bajaron a mi cintura — ¿Que diría Alessandro si te viera en este mismo momento?

— Jódete tu y Alessandro también.

Ya no me divertía esto y menos luego de que menciono a Alessandro.

— Vamos Bambi — Sus labios atraparon mi cuello — ¿Porque no admites que me deseas? Solo un ciego seria incapaz de notar como me sigues con la mirada siempre que puedes.

— Eres un idiota, eso no es cierto — Dije tratando de despegarlo de mi, pero este abrazo mi cuerpo pegándome aun mas a el.

Mi respiracion me delataba, estaba agitada como si hubiera corrido una maraton. Senti la sonrisa de Nikolay en mi cuello, sabia que usaria eso en mi contra.

Sus manos bajaron por mi espalda llegando a la parte delantera de mi pantalón. Introdujo dos dedos en este tocándome por encima de mis bragas. Un pequeño suspiro se escapo de mis labios haciendo que este aumentara el movimiento de sus dedos. Casi por inercia mis piernas se cerraron pero Nikolay las volvió a abrir esta vez sacando mis jeans y bragas. Estaba semi desnuda por no decir desnuda frente a el. El ruso continuo tocándome con dos de sus dedos, podia ver como sus labios estaban semiabiertos mientras miraba cada una de mis expresiones.

— Nikolay para — Dije sintiéndome desfallecer por su simple tacto.

Pero eso no basto porque uno de sus dedos se introdujo en mi interior haciéndome gemir. Este salía y entraba, salía y entraba, y mi cuerpo solo se centraba en eso.

Quería despertar de aquello, recordar que estaba secuestrada, que el odiaba a mi familia, que era mi peor enemigo. Pero se sentía malditamente bien y no quería que termine.

Pero no es algo que le iba a demostrar, iba a luchar con mi cuerpo de ser necesario.

— Admite que me deseas Bambi — Dijo a la vez que introducía otro de sus dedos en mi interior y aumentaba las embestidas.

Mis ojos se cerraron con fuerza y mis piernas comenzaron a temblar. Una de mis manos se apoyo en el escritorio mientras la otra la apoye en la espalda del ruso quien me sostenía.

Los movimientos eran fáciles, eso generaba en mi cuerpo. Mi cuerpo respondía a el, a sus movimientos, a su tacto, a su presencia.

Me estaba golpeando mentalmente por darle esta imagen a Nikolay. No era capaz de aguantar, su sola presencia me dejaba sin aire. Y ahora esto, no se que clase de juego era, pero yo lo había comenzado y ahora estaba pagando por eso.

Tenia que aguantar y no darle lo que el quería. Mis piernas volvieron a cerrarse pero eso no fue un impedimento para el quien continuo con sus embestidas.

— Mírame Bambi — Sentí el calor de su aliento golpeando mi rostro — Ruégame.

Sus ojos celestes penetraban mi mirada. Se veía malditamente bien. Odiaba sentirme así por el.

Las embestidas aumentaron y mis gemidos inundaron la habitación. No me importaba si alguien me oía. Un hormigueo se sintió en mis piernas seguido de un pinchazo en mi zona intima, sabia que estaba por correrme. Oh dios este hombre iba a terminar conmigo. Tire mi cabeza hacia atrás dejando todo venir pero de un momento a otro sus dedos salieron de mi interior, dejandome totalmente incompleta.

Mis ojos se abrieron de par en par y vieron a Nikolay limpiando su mano con un pañuelo.

— ¿Que haces?

— ¿A que te refieres? —Dijo con esa maldita sonrisa que ahora mismo tenia ganas de golpear.

— Eres un idiota.

Tome mi ropa y volví a vestirme, si lo que quería era humillarme lo había logrado.

Estúpido Nikolay y estúpida yo por haberme prestado a esto. Pensé que iba a sobrellevar la situación pero me supero en todo y como si fuera poco quede como una necesitada frente a el.

— Le dire a alguien que te lleve ropa.

Lo fulmine y me hice un moño sintiendo como su mirada penetraba en mi, acto seguido me toma del brazo y me arrastra fuera de su despacho llevándome a quien sabe donde.

— Ya sueltame animal. Me lastimas — Dije viendo como apretaba una de las heridas que el mismo habia causado el dia anterior.

— Para de quejarte Petrucci.

Nikolay comenzo a subir las escaleras mientras me arrastraba consigo. Llegamos a un piso lleno de puertas. Casi de manera automatica Nikolay ingreso en una de las habitaciones, dejandome ver lo grande que era. Estaba segura que era su habitacion, seguia demasiado su estetica de hombre relajado.

— Toma un baño — Lo mire sin entender pero este me empujo hasta una puerta — Toma un baño — Abrió esta puerta — Te dejare ropa que seguro te quede. Ahi tienes todo lo necesario para higienizarte. Luego me encargare de comprar lo faltante.

— ¿Y que debo darte a cambio?

— Aun no lo pensé — Me guiño un ojo.

Nikolay salió de la habitación dejándome completamente sola y con mil cosas en las que pensar.

Nikolay Mogilevich

Bambi Petrucci

[...]

Buenas genteee como estan? Espero les guste el capitulo. Dejen un mg y un comentario asi me motiva a seguir <3

descargar

¿Te gustó esta historia? Descarga la APP para mantener tu historial de lectura
descargar

Beneficios

Nuevos usuarios que descargaron la APP, pueden leer hasta 10 capítulos gratis

Recibir
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play