Jason:
Abrí mis ojos sintiendo un poco de dolor en mi pierna… Trataba de escuchar lo más que podía para saber si Isabella ya se había despertado. Todo parecía estar en completo silencio. Raro de esa niña, o bien andaba aun dormida después del desvelo que le causé.
Solté un gran respiro levantándome de la cama, me puse la playera, tampoco es que pensara que debo andar casi sin ropa provocándola. En mi mente se vino esa imagen de ella sin bragas. Tragué saliva negando con la cabeza. Sería tan imposible, el miedo que me tenía se notaba a simple vista.
Miré por el pasillo, no estaba al menos en la cocina, Sali de mi habitación entrando al baño, bajé mi mirada viendo mi miembro algo despierto. Negué con la cabeza.
Jason: Quieto muchacho.
Me acerqué al espejo, me miré pasando mi mano por mi barba, seguía insistiendo que al menos hoy si tendría que afeitarme. Abrí la llave humedeciéndome el rostro. Tomé la toalla secándome. Salí del baño…. Llevé mi mano a mi pierna, resintiendo un pequeño dolor pero mucho menos que otras veces.
Jason: Isabella…. Isabella…
Me detuve en la sala de la cabaña mirando que ella no estaba. Solté un gran respiro. Rodé los ojos sabiendo que ella se había marchado. Levanté un ceja mirando hacia la mesita de estar en la entrada donde estaba su bolsa…
Jason: ¿Dónde esta?
Caminé llegando a la cocina, a lo mejor había salido a la parte de atrás de la cabaña, aseché un poco mirado que no estaba. Decidí esperar un momento, tomé mis medicamentos… Me di la media vuelta mirando una nota junto con el desayuno ya hecho.
Me quedé sin poder moverme, en mi mente solo estaba los recuerdos cuando me atendían de esta manera sorprendiéndome cada mañana, lo injusto que había sido cuando decidió…. Negué con la cabeza. Me senté tomando la nota, la abrí viendo un tremendo garabato en la parte de arriba rodé los ojos. Empecé a leerla.
“Disculpa que me haya marchado sin avisarte, bueno no es que me vaya para siempre, claro si me permites quedarme mientras pueda llegar a la cabaña de mis amigos entonces te lo agradecería mucho. De todas maneras espero regresar antes que te despiertes. Puedo preparar un delicioso almuerzo… No tardo. PD. Isabella”
Me quedé detenidamente mirando la nota. Ella había dicho que necesitaba llegar a la cabaña de sus padres y ahora escribe de sus amigos… Pasé de eso mientras miraba el desayuno que había dejado. Se veía todo muy rico. Me apresuré a desayunar… Levanté mi mirada viendo que la nieve de nuevo empezaba a caer… Me levanté terminando todo por completo, realmente estuvo muy delicioso. Lavé mis trastes… Tomé una de las toallas secando mis manos. Miré por el camino viendo que un hombre se acercaba. Me apresuré para llegar a la puerta.
TOC!!! TOC!!!
Saqué mi arma apuntando hacia la puerta, abrí soltando un gran respiro.
Chico: Señor.
ME saludo con honor… Lo miré fijamente. Levanté mi mirada viendo si se asomaba Isabella, puse mi atención de nuevo al chico.
Jason: ¿Ahora que sucede?
Chico: Es que… veo que ya tiene de nuevo mucha nieve en su entrada. Se la puedo quitar.
Jason: Si, y corta un poco más de troncos.
El chico sonrió, se apresuró tomando sus cosas para hacer la limpieza de la entrada, así como le había pedido que cortara los troncos.
Salí un poco dando indicaciones de como hacerlo esta vez.
Jason: Le quitas la nieve al auto.
Chico: Si señor.
Entré a la cabaña, la nieve ya estaba empezando a caer un poco mas, decidí a tomar la ducha, pero esta vez necesitaba relajarme un poco más. Abrí la regadera metiéndome bajo la regadera. Cerré los ojos reposando las manos en la pared… Cerré los ojos sintiendo un fuerte dolor en mi corazón…
Recordando hace 1 año:
Había llegado a casa después de una misión de enfrentamiento, solo quería llegar a casa… 6 meses al frente era demasiado para saber que nada como estar con la persona que dedicaba mi vida entera.
Mi corazón estaba envuelto…
Jason: Cordelia…
Sonreí al saber que debería estar ocupada, por las cuentas que había recibido de pura ropa departamental me hacía saber que estaba dedicada en gastar dinero en pura ropa de ella y por supuesto haber escogido como siempre cosas para mi.
Subí las escaleras, podía escuchar sus pasos apresurados que estaban de un lado y del otro. Tomé la perilla de la habitación donde ella abrió mucho antes que yo. Tenía una sonrisa tan encantadora, iluminaba mi vida en este momento, ella me rodeó con sus brazos uniendo nuestros labios, moría por hacerle el amor. No la quería soltar por nada del mundo.
Que mejor recibiendo cuando la miré que tenía la bata recién puesta de la ducha que se había tomado. La alcé con fuerza donde ella rodeó sus piernas en mi cintura. Me perdía en sus besos, mis manos tocaban parte de su cuerpo..
Nos apartamos del beso que me hacía desearla más, tomábamos aliento.
Cordelia: Creí que llegarías el próximo mes.
Jason: Si, pero ganamos estaba batalla, como siempre. Tengo el derecho de regresar a casa.
Caminé hacia la cama perdiéndome en su mirada, su sonrisa tímida y provocativa… Pasé mis dedos por su mejilla, ella estaba ansiosa, lo podía notar.
Levanté mi mirada hacia el sillón junto a la ventana, me quedé quieto mirando por completo hacia el sillón.
Me aparté de ella, me sostuvo de la cintura evitando que me levantara.
Cordelia: ¿Qué sucede mi amor?
La miré perdiendo todo tipo de efecto que ella me podía hacer sentir, la miré aun no comprendiendo lo que estaba viendo.
Jason: SUELTAME.
Me incorporé caminando hacia el sillón… La miré sin apartar la mirada de ella, ahora la notaba demasiado nerviosa, se puso de rodillas sobre la cama. No me apartaba la mirada.
Cordelia: ¿Qué sucede?
Tomé el cojín del sillón levantando una camisa de hombre… La miré donde ella se llevó sus manos hacia sus labios cubriéndose del asombro. Negó con la cabeza una y otra vez. Ella se levantó rápidamente de la cama, llegó hacia mi corriendo. Levanté mi mano para que no se le ocurriera para nada tocarme.
Jason: ¿Qué has hecho Cordelia?
Sus lagrimas empezaron a caer por sus mejillas…
Cordelia: Deja te explico.
Jason: ¿Qué me vas a explicar? ESTO NO ES MÍO.
Cordelia: No.. No…
Jason: MALDITA SEA CORDELIA…
Arrojé la camisa hacia el piso cayendo frente a los pies de ella, se inclinó levantándola. ¿Cómo pudo ser capas? ¿Cómo? Me senté en el sillón reposando mis codos en mis piernas sujetado mi cabello. Negué con la cabeza…
Jason: Durante todo este tiempo que estuve lejos de casa, solo quería llegar, hacerte ela mor. Sentirme amado, respetado…
Levanté mi mirada hacia ella. Ella se apresuró llegando hacia mi.
Cordelia: No es lo que parece.
Me levanté de mala manera, no la quería cerca de mi.
Jason: JAMAS PENSÉ QUE TE ATREVAS A TANTO. ME ENFRENTÉ A TU FAMILIA PARA QUE PUDIERAS ESTAR CONMIGO. PUSE EN RIESGA MI CARRERA, MI CARGO DE ALTO MANDO Y TODOO… TODO POR UNA…. MUJER COMO TU QUE NO VALES LA PENA.
La sostuve de los brazos levantándola con fuerza. Su mirada estaba llena de terror, intentaba levantar sus manos para evitar que la golpeara.
Jason: NO SUPISTE VALORAR NADA DE LO QUE TE OFRECÍ… No sabes como me arrepiento.
Cordelia: TÚ TE TIENES LA CULPA.
La solté dando pasos hacia atrás… La miré sin compasión alguna. Negué con la cabeza. Se atrevía ha culparme a mi…
Cordelia: NUNCA ESTABAS EN CASA. SIEMPRE ESTABAS DEDICADO A LA NAVAL, A LA MARINA, AL EJERCITO. TAMBIEN TENGO NECESIDADES DE MUJER.
Jason: ESO NO TE DA DERECHO DE METER A OTRO HOMBRE EN MI CASA… ¿Quién ES? ¿QUIEEEEN?
Ella pegó tremendo brinco cuando levanté la voy golpeando la pared con tanta fuerza.
Cordelia: NO TE DIRE..
Me apresuré tomando su brazo, ella empezaba a empujarme con fuerza…
Cordelia: Jason, me lastimas…
Jason: NO MAS QUE TU… TE VAS A LARGAR DE MI CASA…
Cordelia: NO TENGO A DONDE IR…
Jason: TIENES A TU AMANTE NO… 5 AÑOS DE MATRIMONIO NO TE IMPORTARON… TAMPOCO A MI.
Empezamos a bajar los escalones poco a poco, ella forcejeaba para no irse, se tropezaba con sus mismos pies.
Cordelia: JASOOOON POR FAVOR NO HAGAS ESTOOOO… TE LO RUEGOOO.
Llegamos hacia la puerta principal donde mis maletas estaban en la puerta… Ella se giró quedando frente a mi…
Escuché pasos que venían de las escaleras…
Cordelia: Jason por favor… te lo ruego, dame una oportunidad de escucharme.
Jason: Ya escuché demasiado. TODO LO QUE SALE DE TU BOCA SOLO SON MENTIRAS. TE HARÉ LLEGAR LOS PAPELES DEL DIVORCIO… NO QUIERO UNA MALDITA…
George: : BASTA JASON….
Entre abrí mis labios girando lentamente al escuchar la voz del hombre con que el que sin duda era con quien me estaba engañando. Mi mirada se enfocó hacia el hombre que tenía en mi casa, con una toalla en la cadera… También estaba recién dado la ducha.
George: Debes escucharnos Jason.
Jason: ¿Cómo PUDISTE? ¿Cómo pudieron hacerme esto? Ustedes dos… Tú mi esposa que me dedique en cuerpo y alma a ti y tú… el que se dice ser MI MEJOR AMIGO…
Solté a Cordelia que estaba muerta de miedo al ver a George que venía hacia mi, lo miré soltándole un golpe a puño cerrado en la quijada, él se fue directo hacia el piso, no quería que me dirija la palabra… Me puse a su altura tomándolo del cabello.
Jason: DE UNA VEZ TE ADVIERTO… QUE NO VOLVERAS A PISAR NINGUN GRADO DE LA MARINA… GRACIAS A MI TIENES ESE CARGO. CARGO QUE DESDE HOY ESTAS FUERA…
Lo solté pasando mi mirada hacia Cordelia que no lo pensó ni dos veces al ver que venía corriendo para ayudar a su nueva pareja me aparté de ella dando paso.
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Jason
Cordelia
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Comments
Anonymous Carmen diaz
Recién bañada y llegaste un mes antes será que estaba con alguien yo en más y no te esperaba Cordelia
2025-01-17
0
Anonymous Carmen diaz
Par de basura debió dejarlo y no engañarlo
2025-01-17
0
Adela Rojas Gimenez
hay cosas que no entiendo de nosotros los humanos, si ya no quiere a su marido que se vaya a vivir con su amante, le pida el divorcio y no de lugar a que la pille en su casa con su amante,
2023-08-04
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