Luca tomó su móvil para hacer una llamada, no apartábamos la mirada de él.
Llamada:
- Hola buenas noches. Disculpa que te moleste a esta hora.
- Señor Luca, para nada es molestia. ¿en que lo puedo ayudar?
- ¿Aun tienes tu taller mecánico?
- Si señor.
- ¿Tu establecimiento de renta de autos?
- También.
- Puedes atenderme en este momento. En verdad es de suma urgencia. Pagaré lo que sea necesario.
- Bueno… solo que ahora anda cerrado.
- ME URGE OSVALDO. PARA AYER SI ES NECESARIO.
- Si, si de acuerdo.
- En una hora te veo en tu negocio.
- Si señor.
La llamada la terminó, solté un gran respiro.
Crista: Tengo tu llave. Tendremos que ir por ropa.
Luca: Será mejor nena que vayas sola. Si Anton ya dio aviso, también su departamento puede estar vigilado y no podemos arriesgarnos, nadie. Llamaré a mi primo antes que Isabella vaya a la cabaña. No vaya ser que ande de vacaciones con su esposa allí.
Luca y Crista empezaron a dar vueltas caminando de un lado y del otro. Ellos se sonreían con tanto amor. Cerré mis ojos mirando hacia el techo.
Crista: Cariño ven vamos a una de las habitaciones para que puedas descansar mientras organizamos todo.
Me levanté del sillón, la seguí en todo momento, ella abrió la puerta de la habitación que siempre me dejaba para cuando las platicas y el vino era nuestro compañero, mientras que Luca en su habitación nosotras pasábamos siempre los mejores momentos.
Crista: Toma una ducha.
Asentí con la cabeza, ella empezó a darme unas toallas y un poco de ropa que era de ella mientras traía la mía. Ella pasó su mano por mi mejilla.
Isabella: Gracias por todo.
Crista: Cariño, te aprecio demasiado y sé que tu vida cambiará dando un giro de 180°, saldremos de todo esto. Luca conoce a muchas personas muy poderosas. No permitirá que por nada del mundo te hagan daño. Tampoco yo. Eres como mi hermanita pequeña.
Mis lagrimas cayeron sin poder contenerlas… era demasiado lo que ellos hacían. La miré cuando salió de la habitación cerrando la puerta.
Entré al baño. En verdad que necesitaba bastante una ducha. No es lo mismo como en mi departamento pero al menos esto es lo que hay. Puse seguro a la puerta del baño. Empecé a desvestirme… Mientras lo hacía me miraba en el espejo, viendo las heridas que me había hecho con el accidente.
Abrí la llave de la regadera, metí mi mano probando el agua. Salía tibia, sonreí metiéndome debajo del agua. Cerré mis ojos con fuerza, donde mis lagrimas se empezaban a combinar con el agua. ¿Cómo podía salir de todo esto? Nada de lo que pensaba era como realmente quería mi vida. Como en un instante todo cambiaría para empeorar.
En mi mente estaba mi ex… si tan solo él estuviera conmigo en este momento al menos sabría que hacer o como ayudarme. Negué con la cabeza, era totalmente imposible. Todo estaba ahora en mi contra y lo peor del caso es que esos hombres en un abrir y cerrar de ojos podrían encontrarme.
Cerré la llave. Me había dado una buena ducha. Mi cuerpo me dolía un poco pero al menos tendría que aguantar un poco. Al menos que estuviera fuera del país.
Me cubrí con una de las toallas enrollándola por todo mi cuerpo. Tomé la otra quitando el exceso de humedad de mi cabello.
Canadá no está muy cerca que digamos, tendría que pasar unos días conduciendo. Lo bueno es que siempre que salía algún lugar sabía que el tiempo se pararía de lo más rápido aunque fueran días de arduo cansancio.
Empecé a vestirme, escuchaba ya voces. Crista ya debió volver de mi departamento. Me apresuré cuando escuché que la puerta se abrió.
Crista: Cariño te traje una maleta con ropa, tomé lo primero que vi.
Isabella: si, esta bien.
Abrí la puerta saliendo con la toalla, pasé mi miranda asegurándome que no estuviera su esposo. Ella me sonrió.
Crista: Luca salió por un poco de efectivo. No puedes usar nada que te ligue.
Asentí con la cabeza. Ella me entregó un poco de ropa que llevaba en una bolsa para no estropear la de la maleta.
Isabella: ¿Como nos mantendremos en contacto?
Crista: Si acaso por el público o en su defecto de la cabaña del primo de Luca. Recuerdo que en la cabaña había inalámbrico.
Me vestí completamente, escuché pasos cuando tocaron la puerta. Luca abrió mirándonos.
Luca: Conseguí algo de dinero. No pude retirar más.
Isabella: Con eso es suficiente.
Luca: Puedes tomar en algún motel… Recuerda Isabella nada de tarjetas.
Crista: Es más no las llevarás. Me las quedo para guardarlas.
Sonreí asintiendo con la cabeza. solté un gran respiro cuando Luca tomó mi maleta bajándola de la cama. Miró a Crista. Todo indicaba que este momento había llegado. Teníamos que hacerlo con sumo cuidado y no exponernos ante nada.
Luca: Es momento. Andando.
Asentí con la cabeza, mi corazón estaba tan acelerado que se iba a salir por el miedo que también tenía para salir del apartamento de ellos. Crista tomó su bolso, su móvil y el censor de su auto. Luca abrió la puerta. Una punzada tan fuerte logré sentir en mi corazón, me llevé mi mano hacia mi pecha donde Crista me sostuvo de la mano. Miré la hora eran las 2:25 am. Ellos deberían estar completamente cansados.
Luca le cedió el paso a Crista, luego a mi. Ambas miramos por todos lados viendo que nadie viniera o que rondara por el pasillo de su departamento. Cerró Luca poniendo la llave. Nos señaló por las escaleras de emergencia. Nos apresuramos a ir, Crista empujó con fuerza la puerta donde solo se puede abrir de adentro hacia afuera. Empezamos a bajar las escaleras… sentí que hasta mis piernas me temblaban a cada paso que daba.
Miré a Luca cuando su móvil sonó. Él se detuvo mientras nosotras nos miramos deteniéndonos igual.
Llamada:
- ¿Qué tal primo?
- Hola Luca, viendo la hora y las llamadas que me hiciste debí tomar la llamada, pero andaba ocupado con una hermosa damita.
- Lo sé. Tu esposa siempre tan dispuesta.
- ¿Qué sucede? ¿Todo bien?
- Si… amm. ¿Estas ocupando tu cabaña de Canadá?
- No, hace mucho que no voy.
- Me gustaría tomarla por un tiempo. Crista y yo necesitamos una luna de miel algo extensa.
- Ya veo. Quieren hacer la tarea para ver si por fin llega la cigüeña, claro Luca. Me alegro que tú y Crista se tomen su tiempo de pareja.
- Te lo agradezco. En verdad me encanta contar contigo.
- No te preocupes. Lo bueno es que tienes las llaves y queda la cabaña a su completa disposición.
- Gracias Primo. Por cierto ¿Siguen con la amitad con el General o Coronel?
- Si. El General dirás. Además que ya es Jefe Naval de operaciones. Es un hombre muy poderoso. ¿Sucede algo?
- Por ahora no. Solo necesito tu cabaña. Cuando estemos establecidos te busco. ¿Te parece?
- ¿Todo bien Luca?
- Si… Nos vemos.
Me quedé al escuchar que Luca tenía conocidos de un alto rango en el ejercito y de la marina. Negué con la cabeza.
Isabella: Luca no es necesario.
Luca: Aun así. Anton esta metido en la fiscalía. ¿Estas seguro que el estado no lo apoya? Lo dejamos así y no muevo mis cartas. TU DECIDES.
Miré a Crista que ella solo sonrió. Continuamos bajando las escaleras. Luca se adelantó ya que habíamos llegado al último piso del edificio. Abrió la puerta saliendo de primero. Inspeccionó todo el área haciendo señal para salir.
Nos apresuramos a llegar a su auto donde estaba aparcado cerca. Quitó la alarma Crista me abrió la puerta de la parte de atrás. Entré mirándola. Miraba la cajuela que estaba con la puerta abierta. Escuchaba como Luca acomodaba mi maleta. Oprimió el botón bajándose por si sola. Me entregó una frazada.
Luca: Pontela encima. No debemos levantar la mínima sospecha.
Asentí con la cabeza, extendía por completo la frazada. Me cubrí completamente mi cuerpo. Ellos dos se subieron al auto. Ambos cerraron la puerta. No podía ya ver nada más que escuchar. Luca encendió el auto empezando avanzar, oprimió el botón que todos teníamos en el auto levantándose la puerta de la cochera.
Avanzó un poco escuchándose como cerraba la puerta por si sola. Solo podía respirar siguiendo secuencias espaciosas, necesitaba tranquilizarme y estar al menos en una paz que de urgencia la necesitaba.
Luca aceleró. En mi mente solo estaba Anton… si él tuvo que ver en todo esto. Entonces Anton estaba metido en algo demasiado fuerte… No había de otra. Anton es tan culpable como los demás lo son.
Les espero en mi instagram: lucymomhistorias
Su apoyo es muy importante, dejen su me gusta 👍, sus regalitos 🎁, comenten mucho 📝. No se les olvide seguirnos en el perfil de Novel Toon: Lucy Mom, así les llegará las notificaciones de los nuevos capítulos.
Isabella
Crista
Luca
***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***
Updated 170 Episodes
Comments
Anonymous Carmen diaz
Bien por tener ese tipo de amistades te podrán ayudar Isabella sino tu serás culpada y asesinada
2025-01-16
0
Beatriz
Me encanta su novela. Hay intriga,suspenso ,ganas de desatar el nudo y llegar al final. Felicitaciones
2023-09-21
3
Dora Stella Rodriguez Nieto
muy fea la ropa que usa Luca
2023-08-25
1