Grave Peligro

Capítulo 17: Grave peligro

Después de cenar y charlar un poco sobre sus vidas antes de terminar en prisión, el grupo de Macarena decidió ir a dormir,pero la rubia permaneció un tiempo más cerca de la fogata porque ella aún no tenía sueño.

Se acostó en el suelo a observar el cielo y las pocas estrellas que había.

Ella deseaba saber de sobre abuela, y su estado de salud, tal vez tener una oportunidad de volver hablar con ella, aunque sentía vergüenza por como termino en prisión, la rubia deseaba poder oír la voz de su abuela.

Poco a poco la rubia fue cerrando sus ojos debido al cansancio, cayendo en un sueño profundo.

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Desde el otro lado de la ciudad,los espectadores están atentos a lo que a continuación sucedería, solo faltaba que el intendente apretara un botón, y la primera diversión de la noche comenzaría.

-Damas y caballeros, espero que el espectáculo de esta noche sea de su agrado.

Sentenció Alberto sentado desde su lugar mientras toma un ligero trago de vino tinto de preferencia Malbec, Luigi Bosca.

Luego del primer trago, Alberto apretó el botón del control remoto que tenía cerca de él, y una luz de color verde se encendió en un tablero.

-¿Sr. intendente a que PSA liberará primero?

-Considere liberar Al 006,pero el PSA 069 es el más adecuado por ser la primera noche.

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Mientras los reos descansaban en sus respectivas tiendas de acampar, un poco alejada de todos los demás, pero estando en compañia de pocos compañeros,la reclusa Belorizonte esta sentada en el suelo con la mirada perdida hacia una dirección, ella no está ubicada en tiempo y espacio debido a que su cuerpo sufre los primeros efectos del fármaco.

La reclusa siente que este a pesar de saber que es un medicamento que ha consumido en varias oportunidades, este es mucho mas fuerte,pero eso era mejor que nada, la abstinencia le estaba pasando factura en estos días.

Lo que ella no sabía,es que en los próximos días iba a necesitar de mucho más de este fármaco,por que iba a volverse muy adicta en cuestión de horas.

Belorizonte comenzó a reír debido a lo que sus ojos están captando en este momento, y es que en su alucinacion,ella observa el cielo lleno de colores y unicornios sobrevolando,pero algo que la hizo estallar en carcajadas es ver a su maldita madre vestida ridículamente como un payaso, intentando hacer malabares.

Pero la realidad es otra,una muy distinta,y totalmente sangrienta y es que algunos de reclusos que estaban durmiendo cerca de Belorizonte, están siendo brutalmente asesinados por una extraña criatura.

Mientras ella ríe hasta el cansancio por los efectos del farmaco,los gritos de dolor y pedidos de ayuda,alertan a los demás reclusos que corren para auxiliar a quienes piden ayuda.

Pronto se llevan la sorpresa de ver a la extraña criatura devorando las entrañas de sus víctimas.

-¿¡Que demonios!?

Grito uno de ellos, la criatura al oírlos, soltó el cuerpo de su víctima de inmediato, y miró al grupo de reclusos, aunque ya había saciado su hambre, quien sabe cuando podría volver a comer, por eso mismo se abalanzó sobre uno de los hombres, y utilizo sus alargados dedos para atravesar el pecho de uno de los reos, matandolo en el acto.

-¡Corran!

Grito alguien, y rápido escaparon de la escena. La criatura comenzó a devorar a su víctima sin inmutarse de la presencia de Belorizonte que ahora está acostada en el suelo alucinando.

Segundos después, la criatura corrió para alcanzar a sus siguientes víctimas, esa era la orden que debía seguir.

Los reclusos asustados trataban de encontrar a sus demás compañeros,pero los pasillos del laberinto son interminables, y en completa oscuridad y sin el equipo necesario, ellos no podían llegar hasta sus demás compañeros.

Erróneamente, uno de ellos creyó haber encontrado la salida porque al final de uno de los pasillos había una puerta, y el al abrirla, se llevó la sorpresa de encontrarse con una criatura extremadamente alta y sin rostro. Pero lo llamativo es su sonrisa siniestra.

Este ser tomó al hombre entre sus brazos y devoro su cabeza en cuestión de segundos, su estilo de caza es parecido al de una mantis religiosa.

-¡Nooooo!

Plaf plaf plaf

Ruidos de disparos retumbaron por el lugar, aunque el último hombre del grupo está disparando contra esa criatura,pero esta ni se inmutó por los impactos en su cuerpo, por lo que tomó entre sus brazos al hombre y utilizó el mismo método anterior para matarlo.

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La primera noche en la cárcel nadie duerme, rubia, la frase que recordó Macarena cuando escuchó los gritos de sus compañeros. Si bien se levantó del suelo para intentar saber de qué dirección provenían el pedido de ayuda, decidió que no era su asunto intervenir. Además, el sonido de armas disparando, significaba una sola cosa, un ajuste de cuentas.

La fogata se había apagado hace unas cuántas horas, por lo que el cuerpo de Macarena se había enfriado mucho, y como aún era de noche, la rubia decidió meterse dentro de la carpa y dormir un poco más.

Ella entró con sumo cuidado para no despertar a nadie, cerró la carpa desde adentro, y se acostó al lado de Dante. Apenas sintió la calidez que el cuerpo del exoficial le brindaba, Macarena sonrió, terminó apoyando su cabeza en la espalda del hombre, y se durmió plácidamente.

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La noche fue un completo éxito para los espectadores, algunos habían perdido mucho dinero por haber apostado en los reclusos fallecidos. Aun así fue muy divertido y Alberto despidió a los miembros de la Élite prometiendo que la noche siguiente será mucho mejor.

Con esta promesa en su mente, el intendente se retiró del lugar para poder descansar en su casa y quizás ahí podría pensar en la criatura que sería ideal para que juegue con los reos esta noche.

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El sol comenzó a salir lentamente, y la suave brisa de la mañana golpeó suavemente el rostro de la reclusa Belorizonte que poco a poco volvía en sí.

La mujer como pudo se levantó del suelo, su cuerpo le dolía a montones y la cabeza parecía estallarle. Lentamente, caminó hasta donde había visto por última vez al grupo de reclusos, y al ver las carpas, se sentó en un rincón a esperar a que todos despertarán.

Buenos días, reclusos, el desayuno será servido en unos minutos, por favor formen una fila y esperen su turno. No esperaremos a nadie, repito, no esperaremos a nadie.

Belorizonte miró la luz de la bengala asomarse por el cielo, y rápido se puso de pie para correr en esa dirección. Tenía hambre, mucha hambre. Y el miedo de no poder ingerir algún alimento durante el día, la invadió. Mientras ella toma cierta ventaja con sus compañeros,los reclusos comienzan a salir de sus respectivas carpas, y algunos hasta estiraron sus cuerpos.

-Oye, rubia, despierta. El desayuno se servirá pronto, si no vamos, nos lo perderemos.

Exclamó Pia divertida mientras sacudía levemente a la adormilada Macarena.

-No abuela, no quiero ir a la escuela.

Susurró la rubia entredormida formando un lindo puchero. Pía mordió su labio inferior para no estallar en carcajadas

-Bonita, debes despertar. ¿O quieres un besito mío de buenos días antes de comenzar tu día?

Macarena abrió sus ojos poco a poco al oír a Pía hablándole, se dio cuenta que la distancia entre ellas era muy poca, las puntas de sus narices se rozaban. La rubia no siente incomodidad por este acercamiento, sabe que la morena es puro bla, bla, y que no intentará absolutamente nada sin su consentimiento. Pero esto se lo cobraría, y que mejor que gastarle una pequeña broma para comenzar la mañana.

-Pía, deberías lavarte los dientes, tu aliento por las mañanas realmente apesta.

Macarena se tapó la nariz, y Pía de inmediato se apartó y llevó una de sus manos a la boca sorprendida, esta reacción hizo reír a la rubia, y segundos después, Macarena salió de la carpa todavía riendo.

-Uff, ustedes chicas, sí que duermen.

Exclamó Estefanía guardando las cosas que habían utilizado la noche anterior. Dante aprovechó que sus dos compañeras ya estaban afuera, y sacó las bolsas de dormir para luego guardarlas dentro de su respectivo bolso.

-Termino de acomodar algunas cosas y ya podremos irnos.

Exclamó Dante cuando termino de desarmar la carpa, Macarena sonrió y asintió con su cabeza. Tomó una bolsa de dormir y se la extendió a la adormilada Pía.Luego de organizarse mejor, Estefanía con una bella sonrisa dijo

-Bien, ahora sí, estamos listas para seguirte Dante.

Dante sonrió y tomó la carpa entre sus brazos, para comenzar a seguir al resto de reclusos. Macarena se colocó a su lado, y ambos entablaron una conversación. También se sumó Estefanía que se sentía feliz porque por primera vez en su vida, está incluida en un grupo.

En cambio, Pía, sigue adormilada, y va a paso de tortuga detrás de sus compañeros, aunque va lento no los pierde de vista.

Mientras ella tararea una canción de su infancia, la morena siente que alguien pasa detrás de ella, y por eso se voltea un par de veces, al principio creyó que se trataba de uno de sus compañeros gastándole una broma,pero después de varias veces de voltear y no ver a nadie, una sensación extraña se instaló en su corazón, la morena presiente que hay un grave peligro rondando por este lugar

Y no se equivocaba...

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