Abigail

Capítulo 15: Abigail

Durante muchos años, existió una organización en la que eran partícipes necesarios científicos, y miembros poderosos de la Élite.

La ya mencionada, se encargó de capturar a seres de apariencia y comportamientos extraños considerados "letales" para la humanidad. Esta organización se llamaba PSA (Protect, Security, Abigail).

A pesar de que estos seres se encontraban dispersos en distintas partes del mundo, la PSA se tomó muy en serio su trabajo, por lo que no les fue difícil encontrarlos.

Luego de capturarlos, los seres fueron recluidos en celdas desprovistos de agua y alimento durante varios días. El objetivo, era comprobar el nivel de resistencia que tienen ante esta primera situación.

Quien lograba sobrevivir a esto, los científicos decidían pasar a la siguiente etapa del proyecto, y esta era la peor, porque las criaturas pasaban a ser

...Conejillos de india...

¿Cuál era el verdadero propósito de esta organización? Según ellos, era alejar a las extrañas criaturas de la humanidad. Pero esto no era cierto. Los miembros de la PSA están enterados sobre las distintas habilidades y capacidades físicas que poseen estos seres, y por eso los capturaban, quien sabe que podría suceder si alguien más descubría esto.Es irónico, ya que en esta historia, las criaturas son perjudicadas por la misma PSA.

Con el tiempo, los seres comenzaron a sufrir deformaciones, y alteraciones en su ADN debido a la mezcla de fármacos rondando por sus organismos.

También hay que sumar a las pésimas condiciones en la que ellos vivían, hicieron que se volvieran totalmente agresivos contra el personal. Por esa razón, tuvieron que recluirlos en un gran hangar alejado de la civilización, este contaba con muchas jaulas y algunos pasadizos secretos.

Afortunadamente, una de las criaturas pudo adaptarse a este ambiente tan hostil, debido a su inteligencia superior, aprendió a ceder a las órdenes de sus captores, y por esto era premiada. Esta criatura obtuvo el nombre Abigail, en honor a la primera hija mujer que tuvo uno de los mejores científicos que trabajaba en el lugar.

Además de ser inteligente, Abigail poseía la apariencia similar al de una mujer, y esto no era nada bueno. Si bien de día, los científicos comparaban la resistencia de la criatura con distintos fármacos a los que el cuerpo de Abigail podía soportar, por las noches, todo cambiaba.

La criatura era encerrada en una celda especial, y era maniatada. No pudo evitar los constantes abus* sex* que sufría a manos de guardacarceles y algún que otro científico.

Abigail los dejo hacer, y al día siguiente no mencionaba absolutamente nada, ya que nadie le creería, solo le quedaba soportar y esperar el momento justo para escapar.

Más tiempo pasó, y Abigail, comenzó a sufrir cambios en comportamiento y contextura física. Ningún de los pocos alimentos que le proporcionaban saciaba su apetito voraz, y pronto la necesidad de comer carne humana la invadió.

Tanta era su necesidad, que los científicos determinaron trasladarla al mismo lugar en el que el resto de las criaturas deformes estaban. Pero antes de hacer el respectivo trasladó, debido a las sospechas de los científicos realizaron un ultrasonido, que terminó por confirmar lo peor. Abigail estaba transitando las primeras etapas de gestación.

Esto provocó un caos entre los miembros de la PSA, todos se culpaba entre sí, porque era de público conocimiento, las constantes visitas nocturnas hacia Abigail. No falta aclarar que los miembros de la Élite se enteraron de esta abominación y pronto armaron un plan para terminar definitivamente con la PSA. Nadie debía saber de este horrible crimen contra la naturaleza.

Mientras Abigail permaneció en el hangar, en su respectiva jaula, es consciente de los cambios en su cuerpo, y más enloqueció al saber lo que podría pasarle a su bebé si nacía entre las rejas. Por eso mismo intentó una y otra vez escapar,pero le era imposible. Todo está hecho de titanio, y ella por alguna razón era sensible ante este material.

Los días pasaron y se transformaron en meses, y Abigail comenzó a desarrollar una pancita de embarazo, su periodo de gestación es mucho más rápido que el de una mujer humana, y es por eso que Abigail entro en labor de parto, después de estar dos meses de encierro.

Los gritos de Abigail atrajeron a los científicos y ellos al abrir su celda se encontraron con la sorpresa de que ella estaba dando a luz.

Después de intensos y agonizantes minutos, Abigail dio a luz a una niña.

Los científicos se alegraron al ver a la pequeña, y luego de comprobar el estado de su salud, entregaron a la recién nacida a la flamante madre.

...Génesis...

Mencionó Abigail con alegría,pero el momento tan emotivo fue interrumpido por diversos disparos y explosiones que provenían del exterior de la celda, y en cuestión de segundo, personas encapuchadas entraron al lugar donde Abigaíl junto a su bebé estaban, y pronto los científicos que asistieron en el parto, recibieron disparos por todo sus cuerpos matándolos en el acto. Por instinto, Abigail protegió a su bebé acunándola en su pecho, cuando todo pasó Abigail oyó a alguien decir.

Make sure no one is left alive(Asegúrate que nadie quede vivo)

Abigail de inmediato comprendió lo que dijo ese hombre, y su instinto la hizo querer proteger aún más a su niña.

Uno de los encapuchados se acercó hasta Abigail y quiso arrebatarle a la recién nacida,pero no tuvo en cuenta de que ella actuaria con mucha más rapidez, y termino siendo degollado por la fiera.

Más gritos se oyeron y más hombres encapuchados ingresaron al sitio. A pesar de que Abigaíl intento impedirlo, su niña le fue arrebatada debido a las intensas descargas eléctricas que recibió en su cuerpo. Y desde ese Abigail jamás volvió a ser la misma

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De regreso en la actualidad, los reclusos llegaron finalmente a su destino. Macarena apoyo su rostro en la ventana, y observó la gran edificación en la que pasaría sus días dentro.

Era muy llamativo su tamaño, debía medir entre 10 y 12 metros, no mucho más. Alrededor de este, había lianas de un hermoso color verde musgo. Era lo único que resaltaba en el desértico lugar en el que estaban.

Poco a poco, los reclusos comenzaron a descender del colectivo, y se les ordenó formar en fila con respecto a su género, y de menor a mayor.

De manera que, las mujeres formaron del lado derecho, mientras que los hombres a la izquierda. Mientras ellos esperan la orden de los guardacarceles, observaron que varios autos y de última generación comenzaron a llegar.

De uno de los coches, descendió el intendente, y el director de la prisión Blue. De los demás algún que otro miembro de la Élite,y guardacarceles con fusibles en caso de que un recluso intente pasarse de listo.

-Reclusos, les doy la bienvenida al famoso laberinto. Aquí pasarán sus peores y mejores días intentando mientras intentan buscar la salida. No será nada fácil,pero confío que uno de ustedes lo logrará.

Alberto hizo una pausa y siguió diciendo

-A partir de hoy, todos ustedes, tendrán que utilizar sus instintos de supervivencia, ya que su libertad estará en juego. Pero deben estar tranquilos, por las tardes recibirán una caja que contendrá lo que necesiten. ¿Tienen alguna duda?

-¡No señor!

Gritaron al unísono los reos emocionados. Alberto sonrió y asintió con su cabeza mirando a uno de sus guardacarceles.Es una clara orden para quitarle las esposas a los reclusos.

Después de que su subordinado inició con su pedido, Alberto saludó a sus demás colegas y luego se marchó. Debía verificar junto a su primo, que sus demás invitados estuvieran cómodos.

Poco a poco los reos fueron desposados, y entraron al laberinto con brusquedad.

Cuando la rubia Macarena fue la última en ingresar, ella se giró para ver como la puerta se cerraba lentamente detrás de ella.

Suspiró y pensó para sí misma

Macarena, sé valiente, este no es un lugar para cobardes, y no puedes retractarte. Tu única misión es ganar.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por los gritos de los reos masculinos que celebran este pequeño pero gran paso hacia la libertad. Mientras que ella observaba esto, uno de los reclusos se la quedó mirando por bastante tiempo, y lejos de sentirse incómoda, se alegró.

...Que pequeño es el mundo ¿No lo crees?...

Dijo él mientras se acercaba hacia ella. La rubia sonrió, y opino exactamente lo mismo.

-Vaya, de todos los lugares que creí que te encontraría, no pensé que te hallaría aquí. ¿Qué le ocurrió al hombre amante de la ley?

-Muy graciosa, resultaste ser una muy graciosa estafadora. Pero dime ¿Qué haces aquí?

Contraataco él mientras extendía su mano para poder estrecharla con la de la rubia.

-Bueno, hago lo mismo que tú, Oficial Acosta.

Respondió ella divertida, y extendió su mano para saludar al mismo oficial que la llevo detenida aquella vez. El mundo sí que resulta ser muy pequeño

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