CAPITULO 7. Conociendo mi pasado

Permanecemos en un incómodo silencio por unos segundos, ¡me siento tan rara! Hace unas horas sentía mucho miedo, ahora estoy en esta casa rodeada de personas extrañas; de alguna manera me siento a salvo. Tengo tantas preguntas que hacerle a este hombre, pero mejor voy a esperar a que él me diga a lo que me trajo. Estoy ansiosa de saberlo todo, pero a la vez siento miedo, no me gustan las sorpresas.

Hombre extraño: - aclarándose la garganta- Bárbara Villanueva, ese es el nombre que te dieron, ¿Es correcto?

Barbie: Si señor, así me llamo.

Hombre extraño: Como te dije anteriormente en la tarjeta que leíste, tenemos mucho de qué hablar. Comienzo por presentarme; mi nombre es Oliver Hamilton. Te pido una disculpa por la forma en la que te mande a traer, esta no es precisamente la forma en la que me hubiera gustado que nos conociéramos; pero estabas en peligro y tuve que actuar.

Barbie: - asiente y lo mira fijamente, algo en esos ojos verde esmeralda le inspiran confianza-

Oliver: Para que puedas entenderme, déjame que te cuente una historia...

Flashback

Muchos años atrás, me enamoré de una hermosa mujer, era el amor de mi vida. Era el hombre más feliz del mundo al lado de esa mujer que no dude un segundo en casarme con ella.

Pasó el tiempo y tuvimos una hija preciosa, las cosas no podían estar mejor para mí, era feliz y pensaba que ella también lo era. Ni bien la niña cumplió los treinta días de nacida me abandono por otro hombre con más dinero y estatus social, yo en aquel entonces recién estaba por comenzar a amasar mi fortuna.

No reunía los fondos suficientes que ella deseaba así que se fue dejándome a mi suerte con mi pequeña hija a cuestas. Fueron años difíciles pero logré salir adelante, trabajaba medio tiempo en las empresas de mi difunto padre.

Padre quien no se dignó a ayudarme hasta que me vio hundido hasta el fondo, tuve que tragarme mi orgullo y aceptar sus migajas para poder darle un mejor futuro a mi pequeña hija.

Mi padre falleció y me fueron heredados una línea de hoteles internacionales entre otras propiedades. Mi niña estaba por cumplir los 15 años de edad y se enamoró de quien no debía.

Un estudiante de medicina medio pelo de muy dudosa reputación. Yo amaba tanto a mi hija que no quería que nadie la lastime como me lastimaron a mí, era muy joven e inexperta, que trate por todos los medios de evitar ese romance.

Pero todos mis intentos fueron en vano, se escapó de la casa la noche de su fiesta de quince años, se marchó con ese bueno para nada quien le lavo el cerebro para poder tenerla a su lado.

La busqué por cielo y tierra hasta que la encontré, habían pasado algunos años. Llegué a ella y no tuve el corazón de sacarla de su realidad, al parecer estaba feliz con ese infeliz.

Se había casado, estaba estudiando y acababa de ser madre; de una hermosa niña (mi nieta). Desde ese día contrate gente para que las cuide y las mantengan a salvo ante cualquier peligro. Seguí sus pasos muy de cerca, tenía gente de su entorno que me informaban de todo.

Fin de Flashback

Barbie: Usted es...

Oliver: Soy tu abuelo, soy el padre de Virginia (tu madre) - se emociona- Perdóname por no haberte traído antes, estaba fuera del país y regrese hace poco, mis hombres me informaron de la situación y no dude en mandar a buscarte.

Barbie: - Por un impulso que siente en el momento, se levanta y lo abraza-

Oliver: - llora de felicidad y corresponde el abrazo de su nieta-

Barbie: -Vuelve a su asiento y se seca las lágrimas que también brotaban de sus ojos, eran muchas emociones para un día-

Oliver: - le entrega una carpeta en sus manos- Aquí está acta de nacimiento de tu madre, puedes ver que las fechas y el apellido coinciden. Mande llamar a mi médico de confianza para que te examine, sé por todo lo que has pasado y quiero estar seguro de que estés bien de salud. No has comido ni bebido bien en años.

Barbie: En verdad se lo agradezco.

Oliver: Eso no es nada, y para tu tranquilidad, mandaremos hacer una prueba de ADN, así no tienes dudas de que soy tu abuelo.

Barbie: Está bien, es lo correcto.

En ese momento tocan el timbre, una de las empleadas va a atender, al rato vuelve en compañía del médico del que Oliver hablaba, conversan un rato y luego van a una de las habitaciones de la planta baja para más privacidad.

Allí el médico le realiza un chequeo general a Barbie, la revisa de pies a cabeza, le toma unas muestras de sangre y le formula algunas vitaminas que debía tomar cuanto antes. Barbie le agradece su gentileza y se retira a su cuarto. Oliver que esperaba afuera, ingresa y el médico le toma otra muestra de sangre y se quedan conversando largo rato.

Médico: Bueno mi querido Oliver, te puedes quedar tranquilo que tu nieta está en excelentes condiciones de salud. No se evidencian signos de violación, está un poco baja de peso pero con las vitaminas que le formule va a estar muy bien.

Oliver: No sabes cuanto te agradezco que te hayas tomado la molestia de venir, muchas gracias.

Médico: Es un placer, ante cualquier eventualidad, no dudes en contactarme.

Ambos se dirigen a la salida siguiendo con su cálida conversación, se despiden y Oliver se dirige a su despacho, tiene algunos asuntos de trabajo que hacer. Al terminar de revisar documentos y atender algunas llamadas se dirige hasta el jardín, manda a una de las empleadas a mandar a llamar a su nieta.

Barbie estaba feliz, estaba segura de que los resultados serían positivos, ese hombre tiene los mismos ojos de su madre y no le cabía la menor duda, después de sentir su abrazo pudo confirmar que era cierto lo que le decía.

Se levanta de la cama y acude al llamado de su abuelo, se sientan en un kiosco rodeado de enredaderas y flores de todo tipo.

Oliver: ¿Cómo te sientes?

Barbie: Un poco rara la verdad, desde que tengo memoria me la pase sufriendo, ahora todo esto, usted, me parece un sueño.

Oliver: Te entiendo, son muchas emociones y enterarte de pronto que tienes un abuelo me imagino que debe ser horrible -ríe-

Barbie: - ríe y le da un golpe juguetona- Nada de eso, la idea de tener un abue me parece genial.

Oliver: Abue, me agrada. Si quieres puedes llamarme así. ¿Qué te parece?

Barbie: ¡Me encanta la idea Abue! - ambos sonríen-

Oliver: Quería saber tu opinión sobre algunas ideas que estuve madurando hace un rato. Se acercan tus quinceaños. Las clases ya comenzaron, y estaba pensando buscar un buen colegio para que sigas estudiando, tendrás un auto con chófer para que te lleve y te busque al colegio, además de guardaespaldas que te cuidarán a distancia prudencial; no los tendrás encima todo el día, ¿que te parece?

Barbie: Estoy de acuerdo con lo de la escuela, me gustaría mucho terminar mis estudios. ¿Los guardaespaldas son necesarios o se puede negociar?

Oliver: Tu vida a partir de ahora ya no será la misma, y me moriría si algo malo llegase a pasarte. Eres lo único que me queda de tu madre.

Barbie: Abue, ¿por que no hablas con mi madre?

Oliver: No creo que quiera hablar conmigo, ¡debe odiarme! -lo dice con una notable tristeza-

Barbie: Lo poco que recuerdo de ella, es que era una persona razonable, quizás podríamos avisarle que estoy aquí contigo, ¡si tú estás de acuerdo, claro! Y aprovechan para hacer las paces.

Oliver: Estaba buscando la forma de decirle que estás aquí conmigo pero no se me ocurre ninguna, tengo miedo de que se enoje más y te aparte de mi lado.

Barbie: ¡Hagamos un trato! Independientemente de los resultados del ADN, nadie va a apartarme de tu lado abue, tú me salvaste la vida. Te debo mucho. Así que no te preocupes que no voy a volver con mi madre si es lo que te preocupa. La extraño mucho, al igual que a papá, pero me abandonaron y eso todavía me duele. No me siento preparada para volver.

Oliver: Hija, tus padres no te abandonaron, tu padre cometió el error de confiar en su madre, y Virginia no confío en mí, por eso las cosas pasaron de esa manera. Todo se va a arreglar, por lo pronto si no te molesta, quisiera que converses con una psicóloga, así le cuentas todo lo que llevas dentro y puedas sanar todas esas heridas que llevas dentro de tu ser. Para que puedas crecer feliz. Todo lo que te sucedió debió ser muy duro.

Barbie: Está bien abue, si dices que es lo mejor, entonces eso haré. Y no te equivocas, fue horrible todo lo que viví en esa casa. Jamás pensé que mi abuela se podría en mi contra, no me creyó nunca nada de lo que le decía.

Oliver: Gracias Barbie, ya verás que es lo mejor. Tu abuela siempre odio a tu madre, y no me sorprende que después ese odio te alcanzo a ti. Es una mujer vacía que vive de apariencias, no sabe lo que es el amor y jamás lo sabrá.

Pasaron la tarde conversando y haciendo planes para el futuro, Oliver tenía planeado enviar a Barbie al mejor colegio secundario de la ciudad, enseñarle algún pasatiempo, idiomas, formarla para que algún día ella ocupe su lugar en las empresas

Kiosco de la casa de Oliver

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