"Los esposos" y su primera noche.

Nacimos en el mismo año, recibimos la misma educación y compartimos muchas cosas en común, bebí del vaso que estaba lleno hasta el borde, y el ardor que recorre mi garganta me recuerda que estoy vivo.

Aun así, no me escogió...

Yo la vi llorar y maldecir cuando mi hermano renunció a su título, cuando escuchaba los rumores de Alastor... Karoline debería ser mía.

No recuerdo mucho de lo que pasó, después de que Karoline fue decapitada ya no tenía interés en nada. Mi esposa era linda, pero no la quería, solo la necesitaba para mantener a mi hermano con correa, pues él la amaba. Como ya no estaba Karoline, me la pasaba bebiendo día y noche, hasta que en una de esas borracheras, Katherine discutió conmigo sobre "su lugar", no recuerdo exactamente que le respondí, pero la perra loca se me abalanzo y ambos caímos del balcón de mi habitación.

Y con las mismas desperté de golpe, para mi sorpresa no me dolía el cuerpo, hasta llegué a pensar que todo fue un mal sueño, pero fue la cara de mis criados lo que desconcertó, pues eran más jóvenes de lo que recordaba. Y para agregar más drama, ellos hablaban de que "la Señorita Karoline había caído de un caballo" y como si nada me avisaban qué Katherine puede ocupar su lugar en el templo.

¿Estaba realmente soñando?

Tuve que cortarme con una daga para descubrir que no, que si estaba vivo y aunque todavía no tengo la respuesta exacta... Tal vez, ¿Volví en el tiempo?

Sea lo que sea que haya pasado, estaba agradecido, pues esta vez no mataría a Karoline. Pensé que todo estaba tal cual a mis recuerdos del "pasado", pues Katerine seguía viniendo y haciendo lo mismo que en los recuerdos que poco a poco venían, pero Karoline no... eso me atormentaba.

¿Y si esto es realmente un castigo?

Me había interesado en ella desde que éramos niños, pues era auténtica y se llevaba bien conmigo. Ella era la única persona que no me trataba como un débil enfermo, me trataba como humano... Y no fue, hasta después de matarla, que asimile lo que sentía por ella. Es verdad que desde niños la veía como mujer, amaba su tacto y la forma en que se dirija a mí. Siempre quise más, pero conocía mi lugar, sabía que solo era amable y que me veía con un hermano menor.

En su momento, me sentía mal cuando se dio a conocer que sería la prometida de Alastor, pues toda la atención de Karoline se centró en aprender a "ser emperatriz" y después Alastor fuera tratado con superioridad por todos, pues fue nombrado heredero legítimo de todo. Desde ahí, todo giro sobre él, siempre era Alastor esto, Alastor aquello... pero gracias a mí, todo eso quedo en el olvido.

¿Me arrepiento de haber apuñalado a mi madre?

No, esa zorra solo espero a que "mi padre" falleciera para confesarme que yo no era hijo legítimo del emperador, sino que era hijo del Duque Sorni.

"El hombre que sí amó"

Qué solo por eso me ayudo a tomar el poder y mandar a mi hermano al Ducado Valentine, porque según ella, "lo odiaba por ser producto de una violación". Mierda, en ese momento, no sabía qué hacer, así que solo la encerré y exilie de todos... Trate de ver el lado bueno de esa situación, pero no había nada.

Así que lo hice fue casarme con Mérida y que Karoline intentara reconstruir su relación con Alastor, me dolía, pero es mi hermana y eso es lo más "sanó" que podía hacer. Sin embargo, de igual manera intento herir a mi esposa.

¿Ella si quería estar a mi lado?

Por eso, apenas obtuve todos mis recuerdos y asimilé que retrocedí en tiempo, me lo prometí, que Karoline sería mía esta vez... pero nada salió como lo esperaba. Cuando le abrí mi corazón, no tuve ni un rechazo directo de ella, pues dio a conocer su compromiso con Alastor.

Me dio algo, eso no pasaba en mi vida anterior... ¿Será que ella también volvió? O es que Katherine ya tiene sus recuerdos y la sonsaco de nuevo... ¿Qué mierda estaba pasando?

En mi antigua vida y en esta, soy quien la ama fielmente, ella no puede amarlo de la noche a la mañana...

Tras el banquete lo decidí, está muy claro que soy el protagonista, he vuelto al pasado. Esta vez no me permitiré fallar, así como ella ha cambiado, yo también lo haré, encontraré a Merida y al mago que la revivió para esta vez matar a mis hermanos y revivir solamente a Karoline, ella va a ser mía esta vez.

Ahora mismo ya deben están yendo al norte, puedo aprovechar ese tiempo para localizar a Merida, pues ella vive en ese lado.

Que Alastor disfrute lo poco que pueda, porque ella es mía y no me importa morir de nuevo con tal de tenerla otra vez.

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Estaba descansando en la posada cuando un escalofrío me recorrió todo el cuerpo y me asuste. Pues poco después del banquete, tuvimos que cabalgar sin para hasta llegar a un poblado que está a las afueras de la ciudad.

No me sentí mal durante el recorrido, de hecho, me gustaba la sensación de tener el aire golpeando mi cara. Si bien, Alastor estaba preocupado de que me esté sobre esforzando, no le permití parar a descansar, y fue hasta que a lo lejos vimos el tejado de la posada, que me sentí triste, a diferencia de Alastor que relajo su rostro.

Cuando entramos las personas del pueblo saludaron a Alastor como amigos, me observaron con cuidado hasta que Alastor les dijo que soy su esposa, las personas que en principio se mostraron sin educación se pusieron fríos y se comportaron. Yo me reí en mis adentros, pero me preocupé así que les dije que no era necesario ser tan reacios.

Cuando pedimos las habitaciones, la señora que atendía nos preguntó qué porque queríamos habitaciones separadas si nos acabamos de casar. Yo le comenté que aún era menor de edad, frente a Alastor ella asintió, y nos dio habitaciones muy separadas, pero cuando me enseñó la mía ella me dijo con toda la confianza del mundo que ella también se casó así, pero estaba tan enamorada que no importo.

Me reí, la verdad pienso igual, pero si Alastor quiere demostrarme respeto de esa manera, lo aceptaré. Pues la verdad es que estoy lo suficientemente nerviosa que juro que si me da la mano me podría dar un infarto. Suspiré, así que me bañé y me acosté en la cama.

Como me sentía rara estando sola en un lugar desconocido, decidí ir con él.

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Mi esposa está lejos de mí, exactamente a cinco habitaciones... miré la hora, "10:49". Sí que me estoy tardando por su culpa, salir del baño, cada que recuerdo el beso, mi cuerpo se pone tensó.

¿Tanto dominio tiene sobre mí?

—Uf... será mejor me apuré.

Me puse un pantalón para dormir y saqué los libros contables, pues debo agregar lo que el emperador me pagó. Respecto al dinero para mi esposa, aún no sé cuánto, debo hablarlo con ella y tomar en cuenta su demanda.

*Tocan la puerta*\, "¿Alastor?"

¿Karoline? ¿Está bien?

Me levanté para abrir la puerta, ella llevaba puesta una bata gruesa de color gris. Supongo que ese es su color preferido, anoté en mi cabeza.

—¿Puedo pasar?

Asentí. —¿No puedes dormir?

Ella tenía el cabello suelto, es la primera vez que la veo relajada, sin maquillaje... supongo que se percató de que la analizaba, pues ella se volteó ligueramente, "No me gusta estar sola en lugares desconocidos" soltó.

—AAA, pensé que era más grave, entonces duerme aquí.

—Bueno.

¡Bueno!

Pensé que se iba a negar, ahora tengo un nudo en la garganta. Debo controlarme, si me pongo nervio también me pondré tenso, ¡No puedo ponerme tensó!

Ella se acostó en la cama y se cubrió hasta la mitad del pecho con las sábanas.

Me sonrió, —¿Qué estabas haciendo?

—Pensando en ti. Solté sin tomar cuenta el peso de mis palabras.

Ella frunció el ceño tratando de descifrar el mensaje.

Me corregí, apenas me di cuenta de que lo solté bruscamente. —No soy un pervertido. Aclaré, —Estaba pensando en cuando dinero destinarte.

—Oh... ya veo, había olvidado eso. ¿Ya tienes una cifra?

—Estaba pensando en discutirlo contigo.

—Mmm, la verdad nunca me preocupe por mis gastos, pero ayudaba a mi padre, así que tengo una idea aproximada.

—No es por tus gastos personales, eso corre por mi cuenta. Me refiero a los de la casa.

—Entonces debemos hablarlo con el mayordomo, él tiene mucha más experiencia en eso que yo.

Qué inútil soy, es verdad... —Tienes razón, ¿Puedo preguntar algo?

Ella asintió.

—Cuando estemos en casa... ¿Te dará miedo?

—No. Dijo mientras se sentaba y tocaba la parte de la cama que está a su lado.

Me levanté para ir con ella. —¿Por qué? Es un lugar que no conoces. Solté mientras la veía y me acomodaba.

—Porque es la casa de mi esposo, aparte estoy segura de que el mayordomo me enseñara todo lo que debo hacer.

—¿Por qué siempre escoges a otro hombre para enseñarte? Ya te dije que tengo tiempo.

Ella se rio, —Hace un momento me pediste ayuda con el financiamiento de tu casa. Ella recalcó "tu casa".

Me sonrojé, —En mi defensa, me ponen nervioso todos los asuntos relacionados contigo.

Ella suspiró y poso sus manos en mis cachetes. Sus ojos dorados y los míos se encontraron, vi un poco de sonrojo en ella al soltar: "Me advertiste que no lo mencionara, pero quiero aclararlo".

¡!

—Me gustas desde hace mucho tiempo.

¡Yo le gustó!

Ella continuo, —A sí que deja de sobrepasar y vallamos a dormir.

Asentí y obedecí, no voy a negar que estuve con una erección desde el momento en que pronunció "vayamos a dormir", pero estaba tan feliz por gustarle que no me importó el dolor que mi pene emitía, al contrario, la abracé y nos dormimos al mismo tiempo.

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