Por Siempre Tuya

*FLASHBACK*

Nueva York es conocida como la ciudad que nunca duerme y bueno no es para menos. Aquí la vida diurna y nocturna es interesante demasiado diría yo, por eso hoy nos encontramos en Midtown East el papá de Hannah es muy buen amigo del dueño de un club nocturno famoso que se encuentra aquí así que nos ayuda un poco a entrar ya que por no tener veintiún años no nos permiten entrar sin ser conocidos así que nos aprovechamos de eso.

Al entrar al club podemos apreciar los diversos colores de la poca luz que ilumina el lugar, hay muchas personas, bailando, conversando, otros están sentados solo disfrutando de la buena música.

Nos ubican en una de las mesas y Hannah pide los tragos, este lugar es famoso por sus deliciosas cenas en el restaurante italiano que se encuentra en la parte superior y también lo es por contar con la presencia de DJ’S de fama mundial. Así que espero que esta experiencia valga la pena, ya que mañana debo ir a la universidad.

Estamos en el medio de la pista hace menos de una hora que llegó Ryan, los tres hemos estado bailando por mas de media hora, nuestro amigo se disculpa para ir al baño y es cuando siento unas manos agarrar mi cintura y veo a un chico con la sonrisa de oreja a oreja. Le sigo el ritmo ambos bailamos algo separados el poco a poco va cortando la distancia no pensé que sería malo bailar con un desconocido, total vinimos a divertirnos solo debo mantenerme cerca de los chicos. Pero ojalá hubiese sabido que desde ese día mi vida cambiaría.

*FIN DEL FLASBACK*

Despierto completamente sudada, mi corazón va a mil kilómetros por hora, ¿Por qué ? ¿Por qué de nuevo esas imágenes de esa noche?.

Solo espero que lo que ocurrió con el señor Thompson no me haga volver al pasado. Yo no estoy echa para estar con un hombre y ningún hombre se merece que este a su lado, y más ahora que he vuelto a verlo. Es como dijo mi amiga el que lo vea de nuevo no puede ser algo bueno y lo menos que deseo en estos momentos es cargar con otro problema, aun no se resuelve lo de papá ni mucho menos quien era esa mujer son tantas cosas juntas y aun no terminamos de atar los cabos sueltos.

Me levanto de mi cama y me meto a la ducha y así quitar un poco la tensión de mi cuerpo, apenas cae el agua cierro los ojos y me llevo los dedos a mis labios y de tan solo pensar en ese beso siento como arde mi cuerpo. ¿Qué estoy pensando? Abro los ojos rápidamente y cierro la llave tomo la toalla y la envuelvo en mi cuerpo.

Al salir del baño, me siento en la cama la cabeza me da vueltas como es que de la noche a la mañana pienso en ese tipo de cosas ¿Cómo es que un beso me afecto tanto?. Ni siquiera con Ryan siento todo lo que sentí con ese beso.

Me levanto de la cama pero pienso pasar el día encerrada viendo alguna pelicula, total hoy es sábado y no tengo que trabajar ni mucho menos ir a la casa de ese loco malhumorado ¿pero porqué me besó?.

Salgo de mi habitación y bajo de dos en dos las escaleras, veo a mamá recogiendo algunas cosas y colocándola en una caja.

-Buenas tardes, hasta que por fin despiertas bella durmiente. – dice muerta de la risa, me alegra verla más animada.

-Y yo que pensaba que eran aún buenos días. – digo también riendo y dándole un abrazo.

-Veo que la fiesta estuvo excelente por la hora en que regresaste.

-Si bueno Hannah no quería que me viniera ya sabes como se pone. – Le digo sentándome en el sofá.

-Si sus padres me han dicho que se ha vuelto un poco más insoportable con el embarazo. – ambas nos reímos por aquello.

Hannah cada vez esta peor si antes no la soportaba casi pues ahora menos, termino de ayudar a mamá a guardar todo y nos vamos al jardín trasero el día está hermoso, así que aprovecho para pasar el día con ella desde que murió papá no hemos estado casi juntas al igual que Cameron que ahora tiene más responsabilidades con el resort que de costumbre.

Le digo para ir al cine y se emociona así que ambas nos arreglamos y nos vamos a un día de madre e hija.

Llegamos al centro comercial buscamos que película podemos ver y nos decidimos por una de comedia.

Hicimos una buena elección estuvimos en toda la película riéndonos mucho, yo solo tenía ojos para ella ya que tenía mucho tiempo sin verla así. Es como me dijo Hannah “Solo déjala vivir su luto” y creo que si es lo justo para ella. Son casi las dos de la tarde así que vamos a nuestro restaurante favorito pedimos la comida y ambas conversamos animadamente hasta que mi teléfono suena, lo busco en mi bolso y veo el nombre en la pantalla y se me dibuja una sonrisa.

-Pensé que ya no me querías. – digo apenas tomo la llamada.

-La que parece no quererme eres tú. ¿Dónde estás?. – pregunta.

-Almorzando con mamá, ¿Ya almorzaste?. – le pregunto a ver si viene con nosotras.

-¿Con mamá?. Me alegro de que haya salido de casa, y respondiendo a tu pregunta sí, ya comí.

-Si estoy con mamá, fuimos al cine a ver una película.

-Eso es buena señal, oye anoche estuve esperándote hasta tarde, pero me quedé dormido pero aún así no apareciste . – dice bufando.

-Me parece que a alguien la edad le está pasando factura. – me burlo de mi hermano, pero se que en parte todo eso se debe a que trabaja mucho.

-Claro que no. He estado tan ocupado que ni se como estoy despierto en estos momentos.

-Deberías descansar un poco, quizás pueda ayudarte. – le digo para que así se atreva a tomar un descanso.

-No te preocupes, además te llamaba porque quería que me acompañes a una cena benéfica. – dice con tono cansado.

-Si claro, ¿Cuándo es?.

-Está noche. – dice y casi me ahogo con la saliva.

-¿Qué? ¿Está noche?. – digo casi que gritando.- Cameron pero no tengo nada.

-Colócate lo que sea Rachel, ustedes siempre dicen no tener nada, pero sabemos bien que tienes mucha ropa. – me dice y siento unas ganas inmensas de golpearlo.

-Eres un idiota ¿lo sabias? Siempre me dices las cosas a última hora, y podré tener según tu mucha ropa pero no iré con cualquier cosa.- le digo gritando y varias personas se me quedan mirando.

-Rachel con lo que sea te verás bien, iré temprano a casa quiero que estés lista a las 7:00 ni más ni menos. Adiós. – y cuelga, Dios que hermano tan mal educado.

Amo y adoro a Cameron pero aveces es peor que un grano en el culo. Terminamos de comer, pago todo y nos vamos directo a buscar un vestido no tengo mucho tiempo ya que solo a mi hermano se le ocurre decirme unas horas antes.

Una hora después tengo el vestido así que lo pago y nos vamos a casa. Al llegar me voy directo a mi cuarto a darme una ducha para así comenzar a arreglarme y estar a tiempo, ya que Cameron es igual a mamá “muy puntual” y a según ellos yo me tardo una eternidad arreglando así que prefiero hacer todo ahorita.

Salgo del baño y seco mi cabello para luego hacerme un lindo recogido de lado dejando algunos mechones sueltos, opto por un maquillaje no tan cargado pero que resalte mucho y busco el vestido que compre. Me decidí por un vestido negro con escote corazón pegado al cuerpo y con una pequeña abertura en la pierna izquierda apenas entre a la tienda me llamó mucho la atención. Veo la hora 6:30 pm ya falta poco me coloco perfume y tomo mi pequeña cartera de mano, allí meto mi teléfono y mi documento de identificación.

Bajo las escaleras y al final de ella veo a mi hermano con un elegante traje color azul marino que se amolda muy bien a su cuerpo, tengo un hermano muy guapo de eso no hay duda. El me da su mejor sonrisa y se que lo hace porque estuve lista justo antes de las siete me toma la mano y me da un abrazo y me susurra lo hermosa que me veo, le digo que también esta muy guapo y ambos salimos de casa rumbo a la cena.

Llegamos al lugar y puedo ver diferentes personas, ninguno se me hace conocido una chica nos ofrece unas bebidas así que la tomamos y caminamos por todo el salón voy colgada del brazo de Cameron, no se porque pero me siento un poco incomoda quizás sea porque nadie se me hace conocido. Nos acercamos a una mesa donde el me presenta así que luego de eso nos sentamos y ellos con mucha amabilidad me incluyen en la conversación. Miro todo al mi alrededor y puedo notar que son personas de mucho dinero, por lo que me dijo Cameron todo lo recaudado será donado a una casa hogar que alberga aproximadamente 30 niños huérfanos todo fue organizado por Jenn Mumford quien es una diseñadora de interiores muy reconocída aunque la verdad no tengo ni idea de quien es.

Minutos después un hombre habla por micrófono anunciando que ya está por comenzar la subasta pero mis ojos casi se salen al ver con quien habla el señor y es nada más y nada menos que Christian Thompson.

El parece notar que alguien lo mira ya que sus ojos me encuentran fácilmente y asiente como señal de saludo por lo que lo imito. Es extraño verlo aquí aunque bueno últimamente me lo encuentro hasta en la sombra, le hace un gesto al hombre que habla con él y es cuando siento que mi corazón se va a salir porque justamente se dirige a nuestra mesa.

-Buenas noches señorita Anderson no pensé verla acá.- Y apenas dice eso mi hermano automáticamente frunce el ceño.

-Señor Thompson lo mismo digo.

-Mi madre organizó la cena– dice a manera de que entienda el porqué esta aquí.

-Me parece muy noble de su parte. – digo haciéndole saber que entendí y le doy una sonrisa y es cuando caigo en cuenta de que siento mi cara algo caliente, quizás por la vergüenza de recordar lo que sucedió anoche.

Iba a decir algo cuando un hombre se le acerca y le dice algo al oído, el coloca una cara de molestia y asiente.

-Disculpa debo atender un asunto, espero disfrutes. – dice y se va casi corriendo.

Dejo salir de a poco el aire que tenía retenido, le doy una leve mirada a mi hermano que me mira confundido no se que le pasa esta algo extraño ¿Será porque Christian me saludo? De verdad que tengo un hermano posesivo minutos después le digo que iré al baño.

Al salir del cubículo, me lavo las manos cuando estoy secándolas oigo como se abre la puerta del baño dejándome ver al señor entrar con cara de preocupado.

-Oiga creo que se ha equivocado de baño. – le digo y el niega.

-Rachel debes venir conmigo ahora mismo.- y me pongo nerviosa apenas dice eso, primero porque me llamó por mi nombre y segundo ¿Por qué debo ir con el?.

-¿Qué porqué, qué pasa?. – digo tartamudeando un poco.

-Lo sabrás apenas salgamos de aquí, pero por los momentos ven debemos salir rápido. – toma mi mano y salimos del baño.

El ve con cautela cada punto del lugar por donde pasamos, siento mis piernas como gelatina y quiero saber que esta pasando.

Esto me está dando miedo, llegamos al estacionamiento y hace señas para que me suba al auto, yo trato de pensar con claridad pero estoy tan confundida que no se que hacer. El me ofrece su mano y la acepto y me ayuda a subir una vez dentro del auto, le dice algo a un hombre de traje negro este se comunica con otro y luego cierra la puerta dejándome más confundida de lo que ya estaba.

Cuando el auto arranca me atrevo a preguntar.

-¿A dónde me lleva? ¿Por…. Porque me dijo que teníamos que salir?. – preguntó totalmente nerviosa.

-Rachel hable con tu hermano el también salió de la cena, mi equipo de seguridad se dio cuenta de algo irregular y uno de ellos logró escuchar a unos hombres que los buscaban a ustedes para… - y se calla.

- ¿Ellos que?. – pregunto pero realmente no se si quiera escuchar la respuesta.

-Ellos los buscaban y los querían vivos o muertos. – me llevo la mano a la boca, puedo ver como sus manos están echas puño.

-¿Muertos?. – pregunto y el asiente, dios mío que es todo esto.

¿Serán los mismos asesinos de papá ? ¿Qué quieren de nosotros?.

Me llevo las manos a la cara y trato de pensar en otra cosa, pero no lo logro. ¿Por qué están detrás de nosotros? Y es cuando caigo en cuenta de que mamá está sola en casa.

-Mamá, debo ir por ella. - me desespero y no logro entender nada.

- Tu madre esta bien, tranquila. - me dice pero no creo lograr estar bien