No Me Culpes A Mí

Eduardo.

...

______ ¡Perdóname madre, no fue mi intención herirte al decir todo de esta manera! __ me disculpo con mi madre, me siento culpable al ver sus ojos rojos y su cara de dolor.

______ Tú no tienes por qué disculparte hijo, a ti te hirieron el doble que a mí y no fuiste tú, lo hicieron ellos, hiciste lo correcto al contarme todo, no importa la manera en la que lo hayas hecho, te aseguro si hubiera sido al revés, yo también hubiese hecho lo mismo, jamás callaría algo así ¿No me explico cómo fueron capaces de hacer algo tan...?

Mi madre me abraza en un gesto maternal como cuando era niño, pero ahora es ella quien entierra su cara en mi pecho por la diferencia de estatura, me siento tan bien entre sus brazos, siento que mis fuerzas se renuevan con su calor, con su amor y cariño, me duele que la hayan engañado de una forma tan vil, siempre he visto la adoración con la que ella miraba a mi padre, siempre se le notó el amor por él y en algún momento creí ver lo mismo de parte de él, pero lo que vi hoy me demostró cuan equivocado estuve, él no la amó de la misma forma, con la misma intensidad con la que lo hizo ella, porque, si así hubiera sido no la hubiese engañado como lo hizo; en su propia casa y con alguien tan cercano, me consta que mi madre apreciaba mucho a Cristina, era una hija más para ella.

Aunque tengo demasiada rabia y un nudo gigante atravesado en la garganta, me hago el fuerte y no me voy hasta que no dejo a mi madre calmada recostada en su cama, nana Luisa le preparó un té y ella me prometió que estaría bien.

Al salir de casa de mis padres con muchas de mis cosas, deambulé por la ciudad durante unas cuantas horas en mi coche analizando el vacío que siento en el pecho al sentir que perdí algo que nunca existió, a pesar de no amar a Cristina estaba muy entusiasmado con el hecho de ser padre, esperaba a ese bebé con ansias, ya imaginaba cómo sería su carita, el color de su pelo, el sonido de su llanto al nacer, muchas veces me sentí culpable por no amar no a su madre como supuse debería hacerlo, un sabor salado inunda mi paladar y entonces me percato de que una lágrima resbaló por mi cara y se coló en mi boca, la limpió abruptamente.

 Luego me dirijo hacia mi Penthouse, mi rabia no se debía a la traición de Cristina, se debía a con quién lo hizo, mi dolor se debía a que la persona que jamás esperé que me engañara lo hiciera y de una forma tan descarada, me asquea a la forma en la que quiso hacer que todo se viera normal, quiso hacer que yo callara algo tan horrible y doloroso, que me hiciera el de la vista gorda como si no hubiera pasado nada donde pasó de todo, que decepción tan grande ha causado mi progenitor en mí.

Saco lo esencial del auto e ingreso a la recepción del edificio, no saludo a nadie, ingreso al ascensor que me llevará directamente a la sala de Penthouse, dejo todo tirado en él piso de mármol, no tengo cabeza para acomodar nada ahora, voy al minibar que hay cerca a la cocina y me bebo dos tragos de coñac, uno tras otro como si de agua se tratara, el líquido quena mi garganta y desearía que así mismo quemará lo que siento ahora mismo.

Me quito el saco del traje y la corbata para luego lanzar ambas prendas al sofá más cercano, me dirijo a mi alcoba con la intención de darme una ducha, pero por poco y me asusto con la persona que encuentro sentada en el borde de mi cama avivando mi rabia, quisiera tener la Valentía de matarla con mis propias manos.

_____ Déjame explicarte cómo sucedieron las cosas, por favor, solo dame cinco minutos. __ tiene el descaro de pedir.

Respiro profundamente en busca del autocontrol que se niega a aparecer.

_____ ¡Yo no quería, el me obligó!

_____ Gemías demasiado satisfecha para haberte estado obligando, si el te gustaba más que yo debiste decírmelo, yo fui claro contigo respecto a mis sentimientos, te pedí que terminar la relación y tú me dijiste que me amabas que querías luchar por lo nuestro, fuiste tan... ¡me metiste Cristina, me hiciste creer que íbamos a tener un bebé! ¿Cuál era la necesidad de mentirme, de engañarme de esa manera? Mi madre te adoraba y le clavaste el peor de los puñales.

_____ Lo hice porque te amo, no quería perderte, me había dado cuenta que tus sentimientos habían cambiado y no encontré otra forma de retenerte a mi lado, todo lo hice por amor, yo te amo con mi alma Eduardo, y te juro que tú padre mi obligó, yo no quería.

______ ¿Y por eso le pedías que te diera más duro? Deja de ser tan cínica y mentirosa, quita tu sucio trasero de mi cama y sal de aquí ahora mismo y si quieres engañar a alguien, engañate a ti misma, yo sé muy bien lo que ví y lo que oí.

______ Te juro que yo no quería, yo te quiero, te amo.

______ Eso no te lo cree ni tu madre, tienes cinco segundos para largarte si no quieres que se me olvide que eres una mujer y yo caballero y te saque a patadas de mi casa, es lo mínimo que te mereces.

Cristina seguía insistiendo con lo mismo, quería seguir viéndome la cara de estúpido, así que mi poca paciencia se acabó y la saqué a empujones del penthouse.

_____ Si no quieres que arruine tu carrera como modelo, no te vuelvas a cruzar en mi camino y dile al doctor que te ayudó a mentirme que se prepare porque no sabe lo que le espera.

Cerré la puerta en su cara y me fuí a tragarme todo el licor que encontré en el minibar, sentía demasiada rabia, demasiado rencor, demasiado dolor, pero de algo estaba seguro; pagarían con creces todo lo que hicieron y yo pronto superaré todo ésto.