Kyoko Lee es la hija mayor de los emperadores de Zuànshí, gracias a los logros de su madre, Kyoko aun siendo mujer, es la heredera al trono, pero ella misma, también ha ganado méritos demostrando ser una valiente guerrera y una princesa justa con su gente. Esta comprometida con el príncipe Eiji de Hisui, pero cuando Eiji, rompe su promesa y se hace de concubinas, Kyoko decide romper el compromiso, y quien estará a su lado, es el general Ming, al punto de que pasan la noche juntos durante una borrachera, pero poco a poco se irán sintiendo atraídos el uno al otro y ambos lucharán para proteger su país del ejército del sultán de Alyaqut.
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capítulo 8- celos
Todo ya estaba listo, los carruajes con el equipaje y víveres y los mejores guardias, cuando la reina madre llegó al lugar donde iban a partir, mostro desagrado al ver que el carruaje no era el más lujoso, así que busco al general.
- piensas que alguien como yo, viajara en esta cosa, ve y has que preparen mi mejor carruaje.
- hágalo general, pero ella no irá con nosotros, suban todos que nos vamos, no tenemos tiempo para esperar.
- niña impertinente, soy de la realeza, no pienso ir en una cosa así.
- bien, vaya en su lujoso carruaje, dígale a todos los bandidos que es de la realeza. Pero, nosotros no haremos nada para ayudarla, si los bandidos la asaltan, dejaremos que le roben todo y la maten.
Eso último lo resalto mostrando una sonrisa, Kyoko sabe perfectamente como tratar con la reina madre.
- tú! Un día me matarás de un coraje.
- se matará usted sola abuela, no debería enojarse. Ahora suba o la dejamos.
- pero yo...
Al ver que Kyoko se sube a su caballo y todos empieza a marcharse, rápidamente sube al carruaje que le asignaron, no piensa dejar ir sola a esa niña, pues piensa arreglar todo y que el matrimonio sea un hecho, de ser posible, que se cansen lo más pronto posible, Kyoko ya 16, la edad suficiente para ser una esposa y empezar a tener hijos.
Kyoko iba adelante a caballo, mientras que el general va por detrás del grupo, así que Jia Fei aprovecha para ir cerca de él.
- ¿cuantos días llevará el viaje, general?
- tardará casi una semana, Hisui esta lejos. Espero no sea mucho para una chica como tú.
- por supuesto que no, para ello he entrenado, quiero ser tan fuerte como la emperatriz.
- todas quieren eso y se me hace algo digno, incluso la princesa busca ser como su madre.
- ella tiene la ventaja de haber entrenado desde pequeña.
- todo depende de su capacidad de aprendizaje, escuche que la emperatriz lucho en la guerra incluso al poco tiempo de iniciar su entrenamiento.
- ¿en serio? Que impresionante. Pero yo espero que nunca haya una guerra, no quisiera que usted de exponga a algo tan peligroso.
- es mi deber.
El chico le sonríe y por supuesto, Jia Fei esta encantada, las otras chicas, pueden notar claramente sus intenciones, si solo vendría a coquetear, no debieron dejarla asistir. La primera noche los alcanzo, así que montaron un campamento y acordaron quienes vigilarán en el primer turno, la reina madre, estaba descontenta, porque su tienda, era pequeña y su cama incomoda, de saber que la princesa era poco organizada, debió hacer que sus sirvientes empacaran una mejor tienda y cama; se quejó con Kyoko y como siempre esta solo la hizo objeto de sus burlas, frente a todos, aunque nadie se ríe y todos pretenden ignorar, sabe que es humillante ser tratada así; Kyoko junto con tres chicas más, tomaron el primer turno, así que después de comer, todos se retiraron a dormir, Kyoko se sentó arriba de uno de los carruajes para observar mejor, afortunadamente la luna estaba de su parte y daba buena luz, lo que le permite observar mejor a distancia, en caso de tener un ataque de bandidos, ella lleva consigo una espada y también flechas y arco, en lo que era muy buena.
Ya se estaba aburriendo cuando vio al general salir de la tienda, pero aun no era cambió de turno.
- general Ming ¿no puede dormir?
El chico al verla, sube con ella, las otras chicas que están de turno, se miran entre si, si se lo ponen a pensar, ellos son cercanos, quizás Jian Fei nisiquiera tiene oportunidad, pero aun queda que la princesa esta comprometida.
- no, el que me toco de compañero, se mueve mucho.
- puede usar mi tienda mientras, descanse, mañana nos espera un largo viaje.
- no se preocupe, tengo buena resistencia.
- como siempre, el gran general Ming, es un hombre fuerte y audaz.
Ambos siguen platicando, Jian Fei que era su primera vez en un viaje largo, no podía dormir y cuando salió de su tienda pudo verlos hablando arriba del carruaje, ambos hablan con total confianza, lo que causa que la chica siente celos de Kyoko.