Ivis vivía con du madre, se tenían una a la otra y vivían de la venta de fritos; cuando Ivis cumplió los 18 comenzó a buscar trabajo para ayudar a su madre y pagar sus estudios, pero nada le salía como quería.
Por otro lado había otro joven de 20 años casi en la misma situación, con la diferencia que ella tenía casa propia, el también por medio de su abuela, pero por alguna razón la pierden.
Descubre que pasa desde el inicio hasta el final.
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PRIMER DIA DE TRABAJO
Abel se dio cuenta que a su abuela lo sucedido la inquietaba, y se acercó a ella y le dijo.
ABEL: No hay que desesperarse ante un mal día o una mala noticia todo pasará abuela, por algo suceden las cosas.
NIRIDA: Si es verdad hijo, cuando nos sucede algo malo muchas veces pensamos que nunca más volveremos a estar contentos y, si recibimos una buena noticia pensamos que todo seguirá siendo color de rosa.
ABEL: No hay que seseperarnos, confiemos en Dios abuela, cuando nos suceda algo bueno celebraremos cada instante mientras dure; si hay que trabajar, se hace bien dando lo mejor, si perdemos algo analisamos porque y como se a perdido, que ha llevado a esa perdida y no volver a caer en el mismo error, ¡abuela! vivamos el presente que es lo único que tenemos.
NIRIDA: Verdad, no tengo que preocuparme por lo que ya pasó, hay que aprender de los errores porque ¿quién puede ser perfecto en un mundo inperfecto?.
ABEL: la imperfección tiene muchas ventajas siempre que la entendamos como un camino, ya que nos permite tener humildad, intentar ser mejores que ayer, ser comprensivos con los demás, pero no todo el mundo piensa así.
NIRIDA: Así es hijo mio, gracias por estar siempre atento a mi, le pido a Dios que te envié una excelente mujer, te lo mereces.
Ese día Nirida y Abel se acostaron, pero el estaba un poco preocupado porque no sabia que hacer o a donde ir con su abuela, le pedía a Dios que lo guiara para tomar u a buena decisión al salir de la casa con su abuela, tenía un ahorro y con eso pensaba buscar una habitación donde vivir con su abuela.
El viernes Ivis se levantó a ayudar a su madre, después que la ayudó dejándola todo organizando se alistó y se fue a su primer día de trabajo, iba emocionada Agradeciendo a Dios por la oportunidad que le había que la habían brindado; a las 6:10 llegó a la puerta del edificio, ahí se encontró con el señor que la había ayudado a conseguir el trabajo, ella lo saludó emocionada, sentía un gran agradecimiento con el por la oportunidad que le habían brindado gracias a él.
El hombre también la saludó amablemente y feliz por verla, era una joven que estaba luchando por seguir adelante para conseguir sus objetivos, ella subió al ascensor cuando llegó tocó el timbre y su jefa Marian le abrió saludandola amablemente; Ivis ingreso y vio a Maya sentada leyendo un libro, la saludó y la mujer le dijo.
MAYA: Buenos días hija, que puntualidad la tuya.
IVIS: Hay que ser responsable.
MARIAM: Así es, la puntualidad es importante por que asi se demuestra respeto, responsabilidad y organización de la persona, más por la reputación profesional y personal.
IVIS: Si señora.
MARIAM: Bueno, yo me voy mi mamá te dirá de las comidas y lo que necesite, chao, Chao mamita.
MAYA: Chao hija, ves con Dios mi amor.
La señora Maya le sonrió a Ivis y le dijo lo que iba a desayunar, y también que hiciera para ella lo que quería, mientras esperaba el desayuno continuó leyendo su libro. Ivis feliz hizo el desayuno y se sentó a desayunar con la señora Maya, mientras desayunaban también charlaban para conocerse mejor.
Por otro lado, estaba Abel en su trabajo, él estaba limpiando apartamento del edificio con un compañero, mientras recogía la basura dijo.
ABEL: Hey, ¡no sabes de casualidad donde arriendan habitación!
— La verdad no... ¿Es para ti?
ABEL: Si, con mi abuela, es que... bueno, te lo resumo, mi tío engaño a mi abuela y la hizo firmar unos documentos para un préstamo, el no pago ni una cuota y el banco se quedó con ella, tenemos un mes para desocupar.
— Uf... que fuerte, ¿y como está tu abuela con eso?
ABEL: Aparentemente tranquila, ya hablamos de eso, son cosas materiales, tú sabes que el que obra mal…
— Mal le va, pero a veces demora.
ABEL: Si, pero lo importante es la salud de mi abuela.
— Yo te voy a averiguar algo.
ABEL: Te lo agradecería mucho.
Ellos continuaron en su limpieza, pero el compañero mientras organizaba todo el sucio pensaba en como había familia tan mala en la vida.
Por otro lado, Ivis ayudó a la señora Maya a levantarse para ir a bañarse, mientras la señora se bañaba, Ivis organizaba la habitación, a los pocos minutos escuchó el llamado de la señora para que la ayudara a salir, después de hacerlo Maya se vistió y las dos volvieron a la sala. La señora nuevamente comenzó a leer su libro, Ivis sentada a su lado comenzó a sentir sueño, estaba despierta desde las tres de la mañana, para no dormirse miró la cristalería, cuadros y muchas cosas más llenas de polvo, miró a la señora y dijo.
IVIS: Disculpe señora Maya, ¿sabe donde puedo encontrar una toalla para limpiar?
MAYA: ¿Limpiar qué?
IVIS: La cristalería y todo lo que está con polvo.
MAYA: No... deja eso así, mi hija te dijo que ella hace aseo los domingos.
IVIS: Pero quiero hacer algo, no quiero estar siempre sentada, déjeme limpiar, puedo hacer el aseo.
MAYA: ¿Eres inquieta verdad?
Lo que la señora no sabía era que Ivis quería luchar con el sueño, no quería dormirse en su primer día de trabajo, la señora le sonrió y ella también lo hizo, después Maya le dijo que buscará en la zona de lavado, ella fue y allí encontró todo, habían productos para limpiar la cristalería, para limpiar madera, productos para el piso.
Ella comenzó a limpiar todo con cuidado, eran las ocho de la mañana, después de una hora ya había limpiado todo, la señora de vez en cuando levantaba la vista sonreída para verla, cuando terminó busco la escoba y barrio todo, excepto la habitación de Mariam, allí no quiso entrar, después trapeo todo dejando el penhaus muy oloroso.
Cuando terminó a las diez y cuarenta con el aseo general se puso a hacer el almuerzo.