Seline, Mi Diosa Luna

hija, te he mentido toda tu vida, tu padre desconoce de tu existencia, yo fuy quien se interpuso en el camino de él y de su pareja, yo fui la otra.

- no mientas mamá, nunca lo has hecho

- en el gavetero hay un cajón secreto, ahí encontraras mi diario y un colgante, guardalo, no permitas que ellos te encuentren

- ¿ellos quienes mamá?

- señora, por favor no me la deje sola, no quiero que busque a su padre, cuídela por mí

Diciendo esas últimas palabras miro a Evelyn y expiró, Luna abrazo a su amiga y ambas lloraron, Lidia las abrazo a ambas por un largo tiempo

- ¿huelen eso?. Pregunto Luna olfateando

- salgamos de aquí, algo no está bien. Dijo Lidia

- no me iré sin mi madre, vayan ustedes

- Evelyn, tenemos que salir, no te dejaremos aquí

- no puedo, ¿a donde iré?, solo tenía a mi madre, quiero morir con ella

- nos tienes a nosotras, puedes quedarte en nuestra manada. Dijo Lidia

- soy elfa, no pertenezco a una manada

- mi niña, nosotras también somos elfas. Dijo Lidia

- Evelyn, te quiero como a una hermana, por favor, quédate con nosotras. Pidió Luna

La casa empezó a incendiarse y el humo estaba empezando a afectarles, las salidas estaban bloqueadas, era como si alguien quisiera que no salieran vivas

- lo siento Evelyn, pero te llevaré a la fuerza si es preciso

-el gavetero, necesito el diario. Dijo Evelyn quedando inconsciente

- vamos hija, ayúdame

Lidia la había dejado inconsciente, no podía poner la vida de ella ni de su hija en peligro, Luna buscó en el gavetero y pudo dar con el cajón, ella tomó el diario y todo lo que estaba en él.

- apresúrate hija. Dijo Lidia haciendo un agujero en el techo.

Las tres lograron salir a tiempo, los vecinos intentaron apagar el fuego, pero les fue imposible, la casa era de madera y todo se estaba consumiendo

-¿cómo esta Ivy?. Preguntaron los vecinos

- tuvimos que sacarla a la fuerza, quería morir con su madre

- ¿qué dice?, ¿la señora Maite se encontraba adentro?, ¿por qué no la salvó?

- alguien la hirió y la enveneno, cuando llegamos ya se encontraba en sus últimas. Respondió Lidia en un tono triste

- vi a varias mujeres entrar a esa casa, pero cuando ellas salieron, Maite estaba en la entrada, vi que no estaba herida, inclusive me saludo con una sonrisa

- ¿está usted seguro?. Pregunto Lidia

- por supuesto

Luna camino hacia el hombre y lo miro a los ojos

- ¿me permite su mano?. Pregunto

El hombre estaba indeciso, pero al mirar la profundidad de sus ojos, se la entrego, Luna vio que lo que el hombre estaba diciendo era verdad

- ¿qué más vio?. Pregunto Luna

- eran siete mujeres, pero solo salieron seis

Luna rebusco en sus recuerdos y no encontró ninguna otra información referente a la madre de Evelyn

- gracias señor

El hombre volvió en sí y siguió hablando como si Luna nunca hubiera revisado sus recuerdos

- ¿qué pasa hija?

- en el camino le digo, llevemos a Evelyn con nosotras

Lidia pidió que la ayudarán para subirla al auto, los vecinos obedecieron y la colocaron en el asiento trasero, Luna decidió ir atrás para sostener su cabeza

- vamos mamá, salgamos de aquí

Lidia empezó a conducir, Luna se encontraba llorando, su amiga estaba pasando por algo muy fuerte y ella podía sentir su dolor

- mamá, ¿porqué no intento salvarla?, ¿porqué no la ayudo?

Lidia detuvo el auto y con tristeza le respondio

- no era fácil hija, aunque lo intentará no la salvaría, el veneno no fue lo que acabo con ella, nosotras las elfas no morimos tan facil

- ¿porqué mamá?, ¿porqué ella si murió?

- murió de tristeza, su alma ya estaba débil, no quería seguir viviendo

Luna recordó que su madre le hablaba a alguien a quien ellas no podían ver

- mamá, cuando estábamos en casa de Evelyn, ¿a quién le hablaba?

- a un espíritu, cuando las sombras de la muerte aparecen detrás de las personas, significa que ya no se puede hacer nada, ademas el veneno de la Adelfa es muy fuerte

- ¿qué será de Evelyn?

- hablaré con tu padre para que le permita vivir en nuestra manada

- gracias mamá, eres la mejor

- hija, ¿qué le hiciste a ese hombre?, ¿porqué no me hablas de tus poderes?

- me metí en sus recuerdos, él si vio lo que dijo, pero quien lo saludaba no era la señora Maite, era otra persona que había tomado su apariencia

- ¿estas segura?

- sí mamá, esa no era la señora Maite, además la habían visitado siete mujeres pero solo salieron seis

- eso quiere decir que cuando llegamos esa persona aún seguía en casa, quizás ella inició el fuego. Dijo Lidia preocupada

- conduce mamá, Evelyn aun esta en peligro

Lidia condujo lo más rápido que pudo, al salir del territorio elfo se sintió aliviada

- logramos salir, vayamos a casa

De repente una mujer se paró frente al auto y Lidia se detuvo

- disculpe, ¿puede moverse por favor?. Pregunto Lidia

Cuando la mujer levantó la mirada Lidia y Luna quedaron sorprendidas, Evelyn despertó en esos momentos y vio de quien se trataba

- mamá. Dijo Evelyn queriendo salir del auto

Lidia colocó el seguro para que Evelyn no pudiera bajar

- déjenme, quiero ir con mi madre

- ella no es tu madre, es quien la asesino, no salgas por favor

Evelyn se la quedo reparando, la mujer tenía una sonrisa y reflejaba maldad

- es cierto, no es mi madre, pero ¿porqué se ve idéntica a ella?

- no lo sabemos, pero esta persona quiere acabar con nosotras, nos ha seguido hasta aquí

- ¿qué haremos mamá?. Pregunto Luna asustada

- Debí enseñarte a conducir, manténganse en el auto, yo saldré. Dijo Lidia transformándose en Alia

La cambia forma empezó a golpear el vidrio, cuando vio que la elfa dentro del auto se transformó en loba, se asustó e intento huir

Alía estaba tan enojada que la atacó al instante, la cambia forma al sentir los colmillos en su piel, empezó a pedir perdón

- déjame ir por favor

- ¿quién eres?, ¿y porqué asesinastes a Maite?. Pregunto Alia

Alía, al ver que ella no quería hablar le clavo las uñas en las piernas