La Viuda Y El Mafioso

Capítulo 8

Afortunadamente para Ornella, la convivencia con Liah había comenzado con el pie derecho, la pequeña nunca había convivido con alguna mujer que saliera con su padre. Liah estaba fascinada con ella, ya que Ornella tenía ese instinto maternal muy desarrollado.

Después de anunciar su compromiso con Bastian, se había llegado la hora de conocer a la familia de su futuro esposo. La madre de Bastian y su única hermana, llegarían a parís para conocer a la prometida y esperar la boda.

—¿Estás nerviosa?—preguntó Mariella después de observar a Ornella cambiar seis veces de vestido

—Si mucho, Theo me adelantó algunos por menores de la señora Leroy y de la única hermana de mi futuro esposo. No quiero que me vayan a rechazar, menos ahora que Liah y yo tenemos una buena relación, es una niña muy dulce.—

—Tranquila, aunque ellas no te acepten. Lo importante es que Bastian y su hija te quieren en su vida.—

Ornella respiraba profundamente, se le terminaba el tiempo antes de que pasaran por ella para llevarla a la mansión de los Leroy. Bastian estaba emocionado, estaba reunido con la coordinadora de la boda, solo para detallar algunas cosas.

—Pensé que una boda era más sencilla.—

—Me imagino señor Leroy, su prometida eligió dalias blancas y magnolias para toda la decoración, incluido el ramo que usará.—

—Si, me dijo que no le gustan las rosas. Además las magnolias y las dalias son muy aromáticas, me imagino que por eso las eligió. Se hará como mi prometida lo quiera. ¿Te envío la lista de sus invitados?—

—Si señor, solo son tres. La mayoría son invitados de usted, y los que agregó su señora madre.—

—Esta bien, Merci.—

En cuanto se marchó la organizadora, Theo se acercó para hablar con Bastian. Él había contratado un investigador por órdenes de Bastian para buscar a la hermana de Ornella, quería localizarla o por lo menos saber que había sucedido con ella.

—Bastian, tenemos la información completa sobre Allegra Rossi.—

—Excelente, ¿fue secuestrada?—

—Ella no fue secuestrada, ella está casada con Petrov Volkov el líder de la mafia rusa. Vive en Moscú con su esposo.—

—Entonces Ornella tenía razón, huyó con él para cambiar de vida.—

—La señora Pía, levantó una denuncia de su desaparición, pero se quedó de manera interna en el país. Nadie le dio seguimiento, se determinó que si hubiera sido secuestrada o raptada estaría en otra situación. Está opinión nos la hizo saber el investigador.—

—Siendo así, no podemos acercarnos a ella. Sería involucrarnos con gente peligrosa, tampoco sería bueno para el prestigio de mi familia. Hablaré con Ornella sobre esto, tenía una esperanza de que no fuera la misma mujer.—

Más tarde llegó Ornella hasta la que pronto sería su nuevo hogar, todos se portaban amables con la futura señora de la casa.

—Te ves hermosa.—

—Merci.—Bastian abrazaba fuertemente a su prometida.

—Necesitamos hablar sobre tu hermana.—Bastian se tomó el tiempo y buscó las palabras correctas para darle la información que tenían sobre Allegra.

—Lo sabía, si se casó con ese hombre, sin duda no fue raptada como pensábamos. Porque casarse con un hombre como él, además como no nos dimos cuenta. No quiero juzgarla, tampoco quiero que pienses mal sobre nosotras.—

—No tengo porque, sin embargo tengo un apellido y un prestigio que cuidar. Si se relaciona a los Volkov con nuestro negocio comenzarán los problemas.—

—No te preocupes eso no pasará, yo no tengo familia. Mi familia son ustedes y Mariella. Para mí, Allegra sigue desaparecida, y no va a volver nunca.—

—Mi vida, yo quería que ella estuviera en un día importante para los dos, después de todo es tu hermana.—

—Dejó de serlo cuando se casó con ese hombre, y cuando no le importó hacer sufrir a mi abuela desapareciendo. Bastian teníamos mucha necesidad, yo tenía dos trabajos y mi abuela era costurera. Todo para que no faltara nada en la casa y que ella siguiera estudiando, después cuando se graduara ella pagaría mi carrera. Después un día dijo que el estudio no era garantía de tener éxito, ahora entiendo a qué se refería.—Bastian la abrazaba para hacerla sentir mejor, sin embargo Ornella era demasiado fuerte.

Más tarde había llegado la señora Marie Leroy y Abigail la hermana de Bastian, Ornella estaba nerviosa. Había imaginado mil cosas, todas malas.

—Eres muy bella Ornella, soy Marie tu suegra.—Marie estaba feliz porque por fin su hijo se casaría.

—Mamá, la vas a asustar. Yo soy Abigail, seré tu cuñada y espero que una hermana.—

—Estaba muy nerviosa de conocerlas, es un gusto.—respondió Ornella

—Bastian me ha estado informando sobre todos los preparativos de la boda, y tienes un excelente gusto. Por cierto ¿dónde está Liah?—preguntaba Marie

—No debe tardar, tenía terapia.—respondió Bastian

—Bastian ahora que te cases, todo va a cambiar. Sobre todo la conducta de mi pequeña nieta.—

—Espero que así sea, Liah aceptó a Ornella. Ya verás cuando llegue de lo que te hablo.—

Cuando llegó Liah, inmediatamente después de ver a Ornella corrió para abrazarla. A Marie le alegraba saber que estaban siendo muy unidas, así que vivirían de una manera armoniosa en esa casa. Haciendo ambas la vida de su hijo más feliz.

Los días se pasaron realmente rápido, se había llegado el gran día. Bastian y Ornella estaban a pocos minutos de casarse, todos los invitados estaban reunidos para celebrar un evento tan importante para los Leroy.

—¿Estás lista?—preguntó Mariella

—Si, sé que voy a amar mucho a Bastian. Como quisiera que mi abuela estuviera aquí.—

—Lo está, de eso no tengas dudas. Te ves hermosa.—

La coordinadora acomodaba a todos los que participarían en el cortejo, la pequeña Liah caminaría de la mano de Ornella para llevarla hasta el altar. Comenzó a caminar Bastian en compañía de su madre, y detrás las damas incluida Abigail y Mariella. Bastian estaba radiante, Theo siempre a su lado apoyándolo. Ver a Ornella vestida de novia y de la mano de su hija, era un momento único en su vida y que atesoraría por siempre. Al llegar hasta Bastian, Liah le dio un beso a Ornella y otro a su padre para ir a tomar asiento con su abuela. Bastian tomó la mano de Ornella para comenzar la ceremonia.

—Eres la novia más hermosa del mundo.—

—Tu eres el novio más guapo.—

Hicieron sus votos, juraron amarse y respetarse hasta que la muerte los separará. Ornella y Bastian comenzaban una vida juntos, ella estaba decidida a ser feliz al lado de su esposo y dejar atrás todo el dolor de su pasado.