Keyra Onellia, seorang putri angkat keluarga Arlott yang kini sudah tak dianggap akibat keluarganya kembali menemukan sang anak kandung. Dari umur 13 tahun, Keyra mulai tersisihkan. Kembalinya Dasya, membuat dirinya tak mendapatkan kasih sayang lagi. Di hancurkan, di kucilkan, di buang dan di rendahkan sudah ia rasakan. Bahkan diakhir hidupnya yang belum mendapatkan kebahagiaan, ia harus dibunuh dengan kejam.
Keyra mengira jika hidupnya telah berakhir. Namun siapa sangka, bukannya ke alam baka, jiwanya malah bertransmigrasi ke tubuh bibinya—adik dari daddy angkatnya.
•••
"Savierra, kau hanya alat yang akan dikorbankan untuk kekasihku. Ku harap kau jaga sikap dan sadar diri akan posisimu!"
Mampukah Savierra yang berjiwa Keyra itu menghadapi tiran kejam, yang sial nya adalah suaminya itu? Takdir benar benar suka bercanda! Apakah Savierra harus mengalami kemarian tragis untuk kedua kalinya? Tidak! Savierra akan berusaha mengubah takdir hidupnya!
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Capítulo 8
"¿Qué?", preguntó Savierra con brusquedad. Permaneció sentada en la silla, mirando a Ryden, quien la miraba con complejidad.
"¿Qué haces en la mansión a estas horas de la noche?", preguntó el hombre, haciendo que Savierra apretara los puños.
"¡Ya te lo dije, quiero protestar! ¿Tienes problemas de audición?", dijo irritada. "Oye, ¿solo porque dije la verdad sobre tu novia ayer, me castigas con crueldad? ¡Eres un desalmado!", continuó mirando a su marido con fiereza.
Suspirando, Ryden volvió a mirar a Savierra. "¿El castigo que te di fue demasiado leve? ¡Cómo te atreves a hablarme así!".
Savierra entrecerró los ojos. "Qué le pasa a este hombre. Es un desalmado", pensó la mujer.
"¡Lo que más me debilita es un día sin comida deliciosa! ¡Y me has castigado a comer pan y leche durante 3 días! ¿Quieres matarme, Ryd?", espetó Savierra enfadada. Al diablo con la cortesía y la imagen que tenía que mantener según su plan. En este momento, solo quería desahogar la ira que había estado reprimiendo desde ayer. Tampoco le importaba tener que llamarlo sin títulos honoríficos ni nada por el estilo.
Mientras tanto, el hombre solo se encogió de hombros con indiferencia. "¿No estás viva ahora? ¡No te vas a morir solo por comer pan y beber leche!", dijo con despreocupación.
"¡NO! ¡QUIERO QUE ME DEVUELVAS MI RACIÓN DE COMIDA! ¡NO QUIERO VOLVER A COMER SOLO PAN Y UN VASO DE LECHE TODOS LOS DÍAS!".
Los ojos de Ryden brillaron con intensidad, esbozó una sonrisa cínica cuando Savierra se atrevió a hablarle en voz alta. "Está bien. Te añadiré 2 días más de castigo. Un total de 5 días, y aún quedan 3 días para que termine tu castigo. Espero que lo medites bien", dijo Ryden sin remordimientos.
Savierra resopló, su ira estaba en su punto álgido. Sentía que quería explotar en ese mismo instante. "¡Eres un malvado! ¡Desalmado!", le gritó con los ojos llorosos.
"Sí, ese soy yo".
"¡Corazón de piedra! ¡Eres un marido que no quiere a su mujer!".
"Así es".
"¡ERES UN CABRÓN, RYD!".
"Hm".
Al ver la indiferencia de Ryden, Savierra se enfureció aún más. Caminó rápidamente hacia Ryden y entonces...
"¡AAAHHH SAVIERRA!".
La mujer salió corriendo de la habitación de Ryden, dejando a este dolorido por lo que había hecho. Savierra se tapó los oídos cuando la voz de Ryden la maldijo.
Mientras tanto, Ryden se quejaba mientras se frotaba el brazo. "Ssshh... ¿es del signo del perro? Dios mío... Su mordida duele mucho", se quejó, y luego examinó su brazo, que tenía una marca roja.
"Incluso está sangrando", murmuró Ryden con el ceño fruncido.
"Ah, es cierto. Esa mujer ha cambiado mucho ahora".
•••
Mientras tanto, en Australia—7:00 a. m.
Una pareja de ancianos con ropa moderna se dirigió a un sencillo edificio de dos plantas. Ambos entraron por la puerta y fueron recibidos por una mujer de mediana edad, la dueña del edificio.
"Bienvenidos, señor y señora. ¿En qué puedo ayudarles?", preguntó la mujer con educación. La gente la llamaba mamá Delana, ya que era la cuidadora y propietaria del orfanato "ChildGold", que significa "niño de oro". Enfatizaba que todos los niños que estaban allí no eran una vergüenza ni un error. Eran niños especiales. Niños maravillosos, y su presencia era un regalo, no un error.
"Disculpen si nuestro lugar es pequeño. Por favor, entren", dijo Delana amablemente.
"Sí, gracias", respondieron los dos ancianos con una leve sonrisa.
Los tres entraron en el salón. Delana inmediatamente ordenó a uno de sus hijos que preparara bebidas para los dos distinguidos invitados.
Delana se quedó mirando en silencio a las dos personas que le parecían elegantes. Debían de ser de clase alta, o incluso de la nobleza. A juzgar por el número de guardaespaldas que los acompañaban, Delana pudo determinar que no eran gente corriente.
"Perdone, señora, pero hemos venido aquí para preguntar por algo", dijo el hombre.
Delana asintió. "Por favor, señor, si lo sé, le daré la información que busca. Sin embargo, este orfanato tiene una regla: no se puede indagar demasiado en la información si aún no se ha proporcionado una identificación", explicó Delana, haciendo que ambos asintieran.
La mujer le entregó una vieja foto a Delana. "¿Alguna vez recibió a esta bebé hace unos 22 años?", preguntó con expresión esperanzada.
Tomando la foto, Delana miró fijamente la imagen del bebé que le resultaba familiar. "Espere, señora, voy a buscar los archivos correspondientes".
La señora asintió y dejó ir a Delana. Se volvió hacia su marido, que también parecía nervioso. "Cariño, ¿qué pasa si no está en este orfanato? ¿Qué más vamos a hacer?", dijo con tristeza. "Echo mucho de menos a nuestras dos hijas, ¿cuánto tiempo más tenemos que vivir sin ellas?".
El marido, al ver a su esposa triste, trató de tranquilizarla. La abrazó y le acarició suavemente el pelo. "Si realmente no están aquí, seguiré buscando hasta que encontremos a nuestras dos hijas, cariño... no me rendiré. Así que cálmate", dijo el marido para tranquilizarla, haciendo que la mujer asintiera a regañadientes.
El sonido de unos pasos hizo que ambos miraran hacia Delana, que volvía con un montón de archivos. "Estos son los archivos de los bebés que encontré y que recibí hace unos 22 años, señora. Ese año recibí 12 bebés y encontré 5 bebés abandonados. Estos son sus datos biográficos y sus fotos de la infancia. Por favor, señor y señora, observen uno por uno", dijo Delana mientras entregaba los 17 archivos a la pareja.
El hombre los cogió y empezó a cotejar uno por uno los datos biográficos y las fotos de los bebés. Las observó y las comparó con la foto que tenía en la mano.
"¡Cariño! ¡Mira, he encontrado una foto de un bebé que se parece mucho a Calesya!", exclamó la mujer. Vio que la fecha que encontró era 3 días después del nacimiento de su hija.
En el archivo, vio que había 5 fotos. Una de cuando era bebé y las demás de cuando era adolescente. La mujer se llenó de lágrimas. Realmente, el rostro del bebé era muy parecido al suyo cuando era pequeña. "Esta es... Calesya, mi hija...", sollozó sin poder contenerse más. Acarició la foto de la pequeña.
"¿Esta es Calesya, mamá?", dijo el hombre en voz baja, a lo que su esposa asintió.
La mujer levantó la vista hacia Delana. "Señora, ¿cómo se llama esta niña? ¿Y tiene alguna marca de nacimiento en el cuerpo?", preguntó con entusiasmo. ¡Deseaba con todas sus fuerzas que fuera su Calesya!
Delana intentó recordar, la chica se llamaba Keyra. "Si no recuerdo mal, tiene una marca de nacimiento detrás de la oreja".
"¡ES NUESTRA HIJA, CARIÑO!", exclamó la mujer con alegría. Abrazó a su marido. "¡Por fin hemos encontrado a nuestras dos hijas!".
El hombre sonrió. "Nuestra búsqueda durante todo este tiempo no ha sido en vano, cariño...".
"Si me permiten preguntar, ¿quiénes son ustedes para Keyra?", preguntó Delana con educación.
"¿Keyra? ¿Le pusieron el nombre de Keyra? Es un nombre bonito. Soy la madre de Keyra. Encantada de conocerla, señora, soy Anneth Paradisa Zelgan y este es mi marido, Nathanio Darius Zelgan. Somos los padres biológicos de Keyra", se presentó Anneth con entusiasmo. "¿Dónde están mis hijas ahora, señora? ¿Siguen mis dos hijas aquí?".
"Lo siento, pero a la edad de 7 años, la señorita Keyra fue adoptada por una familia", respondió Delana.
¡Boom!
Anneth se quedó paralizada, "¿a-adoptada?", dijo en voz baja, haciendo que Delana asintiera. "¿Y su gemela?".
Delana frunció el ceño. "Lo siento, pero aquí no hay ninguna gemela de Keyra. Solo recibí a Keyra cuando el hospital me entregó a la bebé".
¡Boom!
¿Qué clase de prueba era esta, Dios mío? La sonrisa que había aparecido en los labios de Anneth y Darius se desvaneció. "Entonces... ¿una fue adoptada y la otra desapareció?", murmuró Darius sin poder creérselo.
Anneth negó lentamente con la cabeza. "¿Qué familia adoptó a Keyra?".
"Si no recuerdo mal, la familia Arlott, señora. Son una familia de empresarios ricos de Australia", explicó Delana.
Darius agarró con fuerza la mano de Anneth, que ya estaba sudando. "Gracias por su ayuda, señora Delana. Por favor, acepte esto. Considérelo una donación para este orfanato. Gracias por cuidar de Keyra durante 7 años", dijo Darius con sinceridad mientras le entregaba un cheque por valor de cientos de millones.
Tras obtener esa pista, ambos se despidieron. De camino al coche, Anneth no dejaba de llorar. "Cariño, pensé que por fin podríamos abrazar a nuestras dos hijas. Resulta que nuestra prueba aún no ha terminado. Calesya ha sido adoptada por otra persona, mientras que Clarissa sigue desaparecida. ¿Cuándo podremos abrazarlas, cariño...?", sollozó con decepción.
Darius abrazó con fuerza a su esposa. "Estoy seguro de que podremos encontrarlas a las dos. Es solo cuestión de tiempo. Tienes que ser paciente... Algara también debe de echar mucho de menos a sus dos hermanas pequeñas". En ese momento, Darius solo podía consolar a su esposa. Después, buscaría la forma de que pudieran reunirse con sus dos hermosas hijas lo antes posible.
•••
Hola a todos, siento llegar un poco tarde (｡･ω･｡)
Ah, sí, ¿alguien puede adivinar qué hará la familia Zelgan cuando se entere de que la hija que tanto esperaba está muerta?
¿Cuál será el destino de la familia Arlott? Jiji....
