El Diario De Supervivencia

Ashleigh

La búsqueda que tuvimos junto con Brian, fue decepcionante, no encontramos a Victoria, ni tampoco nos cruzamos con Lisa y eso hace que esté aún peor. La piscina estaba sucia, al igual que el minibar. Nada de aquí parecía tener mantenimiento, solo los ascensores, las escaleras y nuestras habitaciones. Es todo muy extraño y estoy cada vez más paranoica, ¿Y si ese hombre, del cual tanto desconfió, preparo lo justo y lo necesario?, sé que pude ser una locura, pero para mí tiene sentido.

—¿Aún sigues pensando que Kefor tiene algo que ver con las desapariciones?—me pregunto Brian, mientras me miraba y seguía caminando escaleras arriba. Él sostenía mi mano, puesto a que estuve bastante distraída por culpa de las múltiples dudas que tenía en mi cabeza.

Levante mi mirada para ver sus ojos marrones. Mi rostro se movió lentamente hacia abajo así daba un asentimiento como respuesta a su pregunta.

—Me lo imaginaba, ¿Quieres saber algo?—me volvió a preguntar. Brian, esta vez, ya no me miraba, tenía su rostro al frente para concentrarse en subir las escaleras.

—Sí, supongo que si—conteste algo dudosa, ya que no estaba segura de seguir hablando de este tema, no quiero seguir pensando que algo malo esté pasando, y que posiblemente algo malo le sucedieron a Victoria y Lisa, ¿Y si ahora mismo están muertas?, es algo que sentía lejano, pero esa pregunta rondaba por mi cerebro como si fuera una órbita. No creo que estén muertas, pero esto es extraño, mi propia cabeza se contradice mucho, simplemente debo de estar creyendo estas idioteces por el miedo, y sí, es exactamente eso. Al apenas pisar un pie aquí, ya estaba asustada, todo esto se debe a la culpa de ese maldito señor. Mierda, ahora me pregunto si es que ese maldito señor tenía razón, aquel hombre dijo que hubo casos de desapariciones. Dios mío, no puedo dejar de estar así, creo que se me va a salir el corazón o voy a desmayarme en cualquier momento, no puedo seguir así, no puedo seguir teniendo estos pensamientos, no puedo seguir estando aquí, quiero salir, quiero irme. Todo mi alrededor está raro, todo se mueve como espiral, todo sigue un patrón de movimientos raros, mis oídos zumban, mi corazón no para de latir. No, no, no, esto está mal, esto está jodidamente mal.

—Creo que también desconfió de Kefor.

Repentinamente, todos aquellos efectos se esfumaron al escuchar a Brian. Mis piernas se detuvieron un momento para analizar lo que acabo de pasar, sin embargo, preocupe al contrario, ya que se detuvo y soltó mi mano para esta vez acariciar mi espalda.

—Hey, hey, ¿Ashleigh?, ¿Te sientes bien?—me preguntaba, y tomaba mi hombro con su mano libre. Yo simplemente no reaccionaba ante el tacto o las preguntas. Me sentía atontada o perdida. ¿Tan mal me veía como para que Brian me preguntara como me sentía?, quizás esas cosas que pasaron anteriormente me dejaron con alguna cara que demostrara que estaba punto de vomitar o alguna expresión parecida que no logre de controlar.

—Sí... Sí, estoy bien, no te preocupes—le conteste, mientras acomodaba mi cabello que se pegaba a mi propia cara. Debo de estar sudando ahora mismo, creo que si es preocupante el estado en el que estoy ahora mismo, ¿A qué clase de persona le pasa esto de la nada?.

—¿Segura?, estás muy pálida Ash, ¿Sientes el cuerpo pesado?, ¿No será que se te está por bajar la presión?.

—No lo sé Brian, mejor sigamos, descansaré un rato cuando lleguemos a los cuartos—dije para intentar convencerlo, y Brian no dijo más nada, pero no se movía, se notaba que no estaba seguro de si seguir subiendo los escalones, quizás por mi salud. Igualmente, yo no me preocupe demasiado por eso. Bueno, si estaba extrañada por lo que me paso, sin embargo, tenía en cuenta que quizás solo paso por mis malos pensamientos, estas clases de cosas como la preocupación, puede afectar a alguien hasta de la manera física, o al menos eso es lo que me ha dicho mi madre muchas veces.

Me sostuve del barandal a la hora de subir las escaleras, pero no pise más de dos escalones. Brian me tomo del brazo para detenerme y luego solo subió un escalón. Quede algo confusa, no entendía lo que estaba sucediendo y me puse en alerta, más no dure mucho estando en aquel estado alarmante, puesto a que sentí la mano de Brian pasando por debajo de mis piernas y luego soltó mi brazo para pasar su otra mano en mi espalda, de ese modo termino por cargarme.

—Deja que te lleve así por favor, no quiero que te desmayes, luego te sostengas de mí para no caerte y terminemos cayendo juntos por las escaleras—me dijo con un poco de humor, también note que se le formaba un pequeño rubor en los pómulos. No espero mi respuesta y subió igualmente los escalones teniéndome en sus brazos.

Dios, siento que me arde la cara, ¿Por qué es tan bueno conmigo?, solo se comporta de esta forma estando junto a mí. No me quejo, ya que me parece lindo esos detalles que solamente él ha hecho por mí, sin embargo, si me deja algo confusa, ¿Esto quiere decir que Brian quiere algo conmigo?, sé que es una pregunta estúpida, pero... Nadie ha hecho algo así conmigo como dije, y me emociono bastante cuando él lo hace, además de que Randy también hace comentarios de los cuales no entiendo perfectamente. Dios, está mal pensar esto cuando mis amigas están desaparecidas ahora mismo, pero no puedo no hacerlo, es como si esa simple acción me revolvió el cerebro a tal punto que apago aquellos pasamientos que tan angustiada me dejaban y tal parece que pálida. Deseaba que esto dure, me refiero a estar de este modo con Brian, no es por presumir, pero me siento en una película de romance, aquellas películas que tanto amo aun si son clichés o antiguas. Créanme que las amo, he visto una, que me recomendó Charlott, llamada "Capricho de mujer", era una película en blanco y negro muy graciosa, algo romántica y tierna, sí mal no recuerdo, llore también. Lisa se burló de mí por eso, pero luego de que le mostrara la película, también término con lágrimas como yo, ¿Tanto amor nos falta en nuestras vidas como para llorar por una película en blanco y negro?, tal parece que si.

—¿Te sientes mejor?.

—Si, tranquilo, solo fue como un mareo—le conteste. Dirigí mis ojos hacia él para ver los suyos, Brian también miraba los míos y hacíamos contacto visual sin apartar la mirada, ninguno de los dos decíamos algo al respecto, era extraño, pero también hipnotizante al vez, era un embrollo de emociones lo que sentía ahora mismo, con tan solo un simple contacto visual mutuo, ¿Brian se sentirá igual que yo?, ¿Eso es lo que siente ahora mismo y lo que ha sentido algunas vecess?.

—Ashleigh, llegamos al ultimo piso,máss bien, ya llegamos a tu cuarto—me dijo repentinamente, eso hizo que esquive mi mirada para notar que estábamos parado justamente frente a la habitación que yo escogí al hospedarnos aquí. Que vergüenza, Brian me estaba viendo para que me baje de sus brazos, y yo como idiota mirándole los ojos y pensando idioteces, ¡Dios!, que estúpida.

—Ah... Si, yo... um... Lo siento—me disculpe entre balbuceos que eran provocados por una enorme vergüenza. El ambiente romántico tal parece que se hizo aun lado para dar paso a un entorno incomodo, o al menos así lo sentía. Brian, a comparación mía, parecía darle gracia mis reacciones porque tan solo sonreía, pero casi ni le dirigía la mirada para ver aquella acción por su parte.

—Tranquila Ash, deja de ser tan vergonzosa—me dijo de forma tranquila, mientras su cuerpo se inclinaba un poco para bajarme de sus brazos. Al apenas ponerme de pie, abrí la puerta de mi cuarto, sin embargo, no entre al mismo. Mis pies se quedaron en su lugar y mis ojos estaban posados en Brian, el mismo noto que necesitaba algo más, así que me quedo mirando también, tal parece que esperando mi respuesta—¿Sucede algo Ash?.

—¿Puedes quedarte conmigo?— pregunté algo avergonzada, puesto a que Brian hizo bastante por mí. No me esperaba ver un gesto de labios curvados hacia arriba por parte del de ojos marrones. Su sonrisa es única para mí, creo que los gestos de labio de Brian son tan expresivos que logran no hacerme sentir tan mal por tal petición.

—Claro, estás algo asustadas, ¿No es así?.

Entre al cuarto una vez que escuche a Brian decir que estará conmigo, eso me alivia, ya que de este modo me sentiré más protegida, pero al escuchar su pregunta detuve mi mirada en él. Si, si tenía miedo, eso era obvio, es normal que lo tenga luego de la desaparición de Victoria y ahora tal parece que de Lisa, por el hecho de que aún no han aparecido, mis sospechas siguen detenidas en Kefor, haciendo que me dé mucho más miedo el pensar que ahora mismo estamos en el mismo lugar que un asesino, y aun empeorando la situación, Charlott y Randy siguen por ahí con aquella búsqueda con el asesino suelto. El pensar en eso hace que mi corazón se acelere, todo esto me recuerda a ese maldito día, ese día en que mi respiración estaba igual de agitada que ahora, ese día en el que mi corazón latía tanto al escuchar pisadas que pasaban cerca de aquella cama donde estaba escondida, ese día en que tenía sudor frío por todo mi cuerpo deslizándose. Escuchaba de forma atenta como los pasos se detienen justamente a mi escondite, aquel asesino que tenía su cara cubierta me tomo de la pierna y me arrastro a la fuerza para hacer que salga de mi escondite. Mis gritos eran fuertes y desgarraban mi garganta, no tarde en ser callada por ese hombre trastornado por querer ver el cuerpo de alguien sin vida. Sus manos sujetaban mi garganta con mucha firmeza y hacía que mis pies no toquen el suelo. Recuerdo el estremecer de mis piernas, mis manos intentando hacer algo para salvarme de aquella situación y mis ojos humedecidos por lágrimas de miedo. Estuve a punto de morir, era muy probable que lo hubiera hecho, pero mi padre logro escuchar mis gritos y se enfrento a ese loco.

Charlott es la única que se sabe esa historia, solo quería que ella sepa todo lo que paso, tenía temor que los demás se burlen de algo que se quedo tachado en mi cabeza como un trauma, o que hagan alguna broma muy pesada la cual no podría soportar. No quería arriesgar la poca cordura que tenía en ese momento.

—¿Quién te hizo daño?.

—¿Eh?.

Mis ojos se posaron en Brian al salir de mis recuerdos. Su rostro mostraba seriedad y sus ojos marrones estaban fijados en mí sin apartarse. Tal parece que no fui muy buena ocultando mi molestia.

—Desde que llegamos aquí te has comportado raro, sobre todo, le tienes mucha desconfianza a Kefor, y eso es muy claro, Éll te hizo algo?, ¿U otra persona te ha hecho algo?—volvió a preguntar. Sus pasos se acercaban a mí y tomaba mi rostro entre sus manos para hacer que lo mire a los ojos—no quiero obligarte a decir algo que no quieres, solo no puedo imaginar que algo malo realmente te paso Ash, eso me frustra.

—Es... Algo difícil de contar—fue lo único que dije y aparte mi rostro para que sus manos no me estén sosteniendo. En serio valoro que Brian esté preocupado por mí, pero no creo que sea el momento para llorar por algo que quedo en el pasado, prefiero concentrarme en el ahora—Brian, tome algo que no debí al apenas llegar aquí, una clase de libro o algo así.

—¿A tomar te refieres a robar?—inquirió. Una de sus cejas se elevó haciendo que me ponga aún más nerviosa, ¿A quién le gustaría que los vean como ladrones?, a mí no me gustaría que Brian tenga esa impresión de mí.

—No... Yo... Solo...—volví a balbucear sin saber que responder ante aquella pregunta. Escuché como Brian reía un poco—no entiendo que tiene de gracioso que esté avergonzada—me queje con una pequeña mueca.

—Era broma Ash, solo muéstrame ese libro que dijiste—me dijo, pero sin borrar esa sonrisa tan característica de él.

Solo asentí de forma leve y me acerque a mi maleta para buscar aquel diario que tome. No se porque tome ese libro, jamás hice algo parecido, pero era como si algo me hubiese dicho que lo haga, se que suena extraño y sin ningún tipo de sentido, sin embargo, a estas alturas nada tiene sentido, tenia varias preguntas que no eran respondidas, solo espero que este libro diga algo al respecto, como un libro mágico o algo así, no quiero quedar como estúpida.

—Es este—le dije a Brian, mientras mi mano le extendía el objeto. Brian parecía dudar un poco por alguna razón, pero luego acerco su mano para tomarlo.

Un fuerte golpe seco provoco que soltemos un gritos y nos alteremos, la puerta había sido la responsable de aquel sonido. Mis manos soltaron el libro al sufrir espasmos y mi respiración aumento de una forma increíble, mi corazón ya bombeaba mucha sangre, creo que voy a desmayarme si sigo de este modo a cada segundo.

—¡¿Qué mierda te pasa?!—grito Brian notablemente molesto.

—Perdón, solo quería asustarlos un poco, no creí que Ashleigh reaccionaria así—se excusó Randy a la vez que se encogía de hombros, ¿Ahora entienden a que me refería con bromas pesadas?.

—Ashleigh, Ashleigh, tranquila, ¿Si?, solo fue un susto—me decía Charlott, mientras pasaba su mano por mi espalda estando preocupada, puesto a que mi respiración aún no volvía a la normalidad, ni mis manos dejaban de temblar.

—Estoy... Bien—conteste y me agache para tomar de nuevo aquel libro, aunque no estaba calmada aun, seguía con aquellos temblores a causa del susto. Al tomar el libro, mire la primera hoja escrita.

"Diario de supervivencia". Eso era lo que decía, pero había otro titítu que fue tachado, al parecer se arrepintió de haber colocado el anterior o algo así, pero no le tome mucha importancia y solo pase depáginaa para saber cuál era su contenido, aunque recibí algunas quejas por parte de Charlott, ya que no cumplí con lo que ella me dijo, que era el dejar el libro, pero necesitaba leerlo, necesitaba saber cuál era su contenido.