Un hombre que muere y se arrepiente de no haber amado a nadie, aunque eso significaba perder a sus cercanos por ser homosexual, pero renació en un bebé en un mundo similar al nuestro pero con subgénero.
Entonces la pregunta es, el personaje principal de esta historia podrá encontrar el amor, averigua eso leyendo esta historia.
Advertencia: El contenido de esta obra está destinado exclusivamente a una audiencia mayor de 18 años. Incluye temas y lenguaje que pueden ser inadecuados para público menor de edad. Se recomienda discreción y el cumplimiento de las normativas sobre edad y contenido en su jurisdicción.
NovelToon tiene autorización de Enieth Loria Marín para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
5. Mundo similar, pero único. Parte 2
-No, ni en su habitación y la única televisión a la que tiene acceso es en la sala común donde la señora ve noticias financieras y nada más.
-Él dijo cosas que un niño de su edad no debería saber.
-Cómo que, Steven.
-Un avión dañado que cae al mar y que el piloto muere, el nombre del hombre era Fergus, no han visto algo así en la televisión.
-Te dijo que no.
-Bueno, tráelo el jueves si puedes para otra sesión creo que debemos llegar a la raíz de estos sueños, además mamá sacaste a Cian con la excusa de salir de compras.
-¡Ah!, no esto es para la casa, la excusa que use fue llevar a Cian al parque.
-Y te dejaron sacar un niño de dos años al parque donde se pudo perder sin mucha supervisión.
-Si, el señor Ronan, no le presta atención, mucho menos la señora Aoife porque ya obtuvieron lo que deseaban un hijo alfa.
-Tal vez eso sea parte del problema, el rechazo de sus padres.
-No lo sé, las visitas de Aoife a Cian son casi nulas y Ronan ha entrado en lo mismo.
-Bien, exploraré eso en la siguiente sesión porque habló con una sonrisa de la familia de “Fergus”.
Clara llevó a Cian a la mansión y cuando volvió a su casa ya era tarde, cerca de las 6:30 pm y Evan ya estaba en casa.
-Eva, ya llegué, los siento me tarde mucho.
-Está bien, pedí pizza hace poco la trajeron, por si quieres un pedazo.
-Dejaste para tu papá.
-No le hace bueno el queso a esta hora, para él pedí un poco de pollo.
-Gracias, querido, pero podrías hacerme un favor.
-Si, que necesitas mamá.
-Puedes buscar en la computadora sobre alguien.
-Quieres buscar algo en internet.
-Si, sobre un piloto llamado Fergus.
Clara y Evan se la pasaron buscando información en internet hasta que llegó William por lo que Clara se fue a calentar el pollo para su esposo y minutos después Evan encontró un artículo viejo online sobre un amerizaje donde el único muerto era el piloto cuyo nombre fue Fergus Mac Donal por lo que Evan le habló a su madre.
-¡Mamá!, lo encontré.
-En serio, envíaselo a tu hermano.
-Bien.
Con el desliz del tiempo llegó la siguiente sesión con Steve y una vez en la oficina Clara fue llevada aparte para hablar por su hijo.
-A qué se debe la noticia que me envío Evan.
-Creo que el joven puede ser uno de eso raros casos que recuerdan otra vida.
-Mamá sabes que ese es un tema delicado.
-Si, pero nada perdemos con intentar y dime tienes las fotos que encontró Evan, ve a mostrárselas.
-Esa no es la manera correcta de identificar si él conoce a las personas, necesito colocar más fotografía y que él escoja la correcta.
-Mmm, usa fotos de nuestro álbum y tal vez de tus compañeros de trabajo.
Entonces tomó unos minutos más conseguir más fotografías con una sola persona en la toma, mientras Cian jugaba con las cosas que tenía Steven, aunque su mente era madura no podía evitar aburrirse y cedía a su lado infantil para pasar el rato y cuando ya tenía una cuidad construida en la mesa de café, Clara y Steven llegaron.
-Cian, querido puedes recoger los juguetes.
-Siii. Cian devolvió los bloques de madera y otros juguetes a la caja de donde los sacó.
En cuanto desocupó la mesa Steven sacó unas 15 fotos en filas de 5, luego le hizo señales a Cian para que se acercará.
-Cian dime si conoces a alguien entre estas fotos.
-Ailsa y Fiona.
-¿Quiénes son para ti?
“Mierda, que vergüenza no dije eso, pero soy consiente de que ya no soy Fergus” pensó Cian al darse cuenta de ese despliz.
-Ailsa es la mamá de Fergus.
-Fiona es la bebé de la familia.
-¿Por qué es la bebé de la familia si ya esta grande? Pregunta Steven
-Los hijos de Ailsa y Gustav son Fergus el mayor, le sigue Finn y la última fue Fiona entre los hermanos mayores ella tiene una diferencia de 10 años.
Lo explicó mientras se tocaba sus dedos pequeñitos y de esa manera evitaba la cara de Steven tenía miedo de su expresión.
-Sabes cuantos son 10 años, Cian.
-Si tengo 10 dedos, así que sé cuánto son 10 años.
Estiró las manos con las palmas abiertas en un gesto infantil, pero al hacer ese gesto vio el rostro de Steven y se podía ver su expresión de sorpresa, puesto que respondió esas preguntas y continuó con problemas matemáticos simples, así como lectura y una vez que respondió que sabia cuanto eran 10 años, Cian se dio cuenta que había metido la pata con su sinceridad y para salir de eso recurrió a la táctica de lágrimas de cocodrilo.
-CLARA, Clara quiero ir a casa. Dijo intercalando sonidos de “bua” y “snif”
-Lo siento, Steven tendré que llevar a Cian a casa.
-Esta bien, creo que me emocioné de más.
-Es raro que llore así suele ser tan fácil de cuidar o de convencer.
-Es normal, le pedí hacer muchas cosas es habitual de que se molesten.
Luego de otras sesiones Steven hizo recomendaciones para ayudar a Cian a dormir como una infusión o té, además le habló sobre la manzanilla, tilo y menta, debían ser alternados y usar un difusor con lavanda, por último, establecer una rutina antes de dormir para que se relajara como baños de agua tibia.
En la casa hay un piano en la sala común, sin embargo, no era diferente de un adorno ya que no había nadie interpretando alguna pieza en estos 2 años por eso que al momento de escuchar las primeras notas de un piano hizo una carrera lo más rápida posible con sus piernas cortas y se escondió al llegar.
Entonces vio a William afinando el piano cuando terminó Clara se acercó y apoyó una mano sobre el nombro de su marido que comenzó a tocar una hermosa pieza romántica y que Clara sabia la letra de la canción porque comenzó a cantar, de igual modo que una polilla al fuego Cian se acercó para ver ese concierto de primera fila y para cuando terminaron, el pequeño estaba sentado a 2 metros de ellos por lo que dijo.
-Hermoso.