Esta es la continuación de la primera novela de la saga, titulada; NO ES TU HIJO.
Cyrus Vidal, al nacer en una familia adinerada, crece sabiendo aprovechar el poder que le fue otorgado desde su nacimiento, logrando encontrar placer en el caos que el mismo causaba, aprovechándose de las personas a su alrededor y engañándolas.
Uno de sus mayores timos, era cuando se hacia pasar por su hermano gemelo, Ethan, logrando asi, tener lo mejor de ambos mundos, sin importarle quien saliera herido en el proceso de su diversión.
Aunque como todo, siempre aparece un rival, en el caso de Cyrus, se trataba de Nyra, la mejor amiga de Ethan a quien quería ver sufrir sin importar el costo.
Es asi como después de descubrir el amor no correspondido de la mujer por Ethan, Cyrus descubre la forma de verla a sus pies, "El y yo somos iguales, ¿quieres usarme como su sustituto?"
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Capitulo 7. Dos por uno
Es bien sabido, desde años inmemoriales, que, quien posee la información es aquel que tiene el poder, en los años de guerra, cuando el mundo era un caos, la información y el conocimiento, se convirtieron en armas peligrosas, que dependiendo del que los posea, podían ser utilizados para el bien o, para el mal.
En el caso de Cyrus, sus actos la mayoría de las veces no eran para el bien, y esta no era diferente a las otras ocasiones, ya que con la nueva información que tenía entre sus manos, podía molestar a dos por el precio de uno.
Por un lado, estaba Ethan, quien al parecer aún no se atrevía a decir palabra alguna sobre su reciente dilema paternal, era obvio el por qué se comportaba precavido ante ese tema, el estar con un hombre como Ethan Vidal, aunque tuviera todas sus mejores intenciones, la prensa se iba a comer viva a la Omega, se encargarían de destruirla sin darle tregua alguna. Pero eso no era problema de Cyrus, quien ahora tenía una carta para molestar a su hermano.
Por otro lado, se encontraba Nyra, la mujer que estaba perdidamente enamorada de Ethan, y lo más seguro, dado que aún no se mostraba desesperada, era que esta no tenía idea alguna de las buenas nuevas. No era para nada difícil el imaginar cómo se volverán añicos sus sentimientos al enterarse, algo que pretendía disfrutar a plenitud, solo debía conseguir el momento indicado para ello.
- Cyrus, necesito que tu equipo realice un plan para el nuevo lanzamiento- le dice Liam
- Claro, en cuanto nos entreguen el nuevo diseño – dice viendo a Nyra
- Lo tendrás esta misma tarde – le dice sin verlo a la cara
- Pónganse de acuerdo esta misma semana, necesito que tengan eso listo antes de este fin de semana – les dice Liam, mientras observaba su teléfono – eso sería todo, ya pueden retirarse – les dice a todos los que se encontraban en la reunión
Nyra, tomó sus carpetas y las organizó, se levanta del asiento y camina hacia la salida. Cyrus, enseguida se levantó de su asiento, siguiendo a la mujer con la mirada, teniendo en mente, de qué forma debía molestarla ese día.
- Cyrus – le dice Liam en tono fuerte
Se detiene mientras observa a la mujer marcharse, suspira y se da la vuelta hacia Liam
- ¿Qué sucede? – le dice acercándose
- Iré a vivir por un tiempo a la mansión – le dice serio
- No es mi problema – le dice despreocupado
- La Omega, a quien intentaste atacar la vez pasada, también vendrá conmigo – dice viéndolo de forma amenazante
- Mmmm, entiendo, temes que pueda intentar atacarla nuevamente – le dice sonriéndole maliciosamente, es interesante cuando tienen en cuenta tus acciones antes de actuar, ya que, si no lo hacen, saben que sería un gran fallo – aunque admito que suena sumamente placentero el tener bajo el mismo techo la oportunidad de sacarte de quicio, puedes estar tranquilo – le dice despreocupado – en este momento, me encuentro distraído con otras cosas que llaman más mi atención – le dice
- De todas formas, te advierto, no quiero que la toques – le dice amenazante
- Sí, sí, claro, como digas – le dice dando la vuelta y marchándose al ver que la conversación ya había terminado.
Perdió por completo la oportunidad de continuar provocando a Nyra, solo por tener que escuchar las tontas quejas de Liam.
- Que lastima, mi presa se escapó – dice suspirando
- ¿Disculpe, señor? – dice la asistente de Nyra, quien le había notificado a Cyrus que la mujer ya se había marchado
- Solo estoy divagando – le dice de forma casual
Después de ver su cacería perdida por ese día, se enfocó en el trabajo, al final de cuentas, nadie había dicho que no sería un tanto difícil, es por ello que las presas más difíciles de cazar, siempre tienen un alto valor monetario y de satisfacción. Solo debía tener paciencia hasta conseguir su objetivo y disfrutar de su recompensa.
Una semana después, el momento apropiado se presentó ante él.
Llego a la mansión después de evaluar algunos lugares para la nueva campaña. Fue hacia el jardín en el momento en que escuchó unas voces, allí se encontraban Nyra, Ethan y Killia (el hijo de Liam, a quien apenas estaban conociendo)
- En mi escuela teníamos un juego muy divertido, ¿quieren jugarlo conmigo? – se escucha al niño
- Claro, creo que aún tengo algo de energía – le dice Ethan, quien había jugado por un buen rato a la pelota con el niño
- Creo que esto te sirve de entrenamiento, físico y mental, ¿no crees, Ethan? – le dice Cyrus acercándose a ellos – después de todo, esta será tu realidad dentro de poco – le dice en tono malicioso, asegurándose de que Nyra escuchara claramente sus palabras
- ¿a qué se refiere? – le dice Nyra a Ethan
- Ah, vaya, al parecer no le has dicho nada – dice viendo a Ethan, su mirada mostraba las malas intenciones en sus palabras – es una pena, yo que creí eran los mejores amigos del mundo – dice
- Cyrus – le dice Ethan para que se callara
- De todas formas, se va a enterar en cualquier momento – dice Cyrus
- Ahora, que – dice Nyra suspirando
- No mucho, solo que próximamente Ethan tendrá un descendiente, ¿recuerdas a la Omega afuera de la oficina? – le dice viéndola, disfrutando de la expresión de sorpresa en el rostro de Nyra – tú, ¿hablaste con ella? – le dice Nyra
- Oh, si – le dice Cyrus riendo – la mujer no tiene tu talento para reconocernos, deberías compartirle tus secretos, sería una pena que se volviera a confundir, ¿no crees, Ethan? – le dice sonriéndole
- Cyrus, no me provoques – le dice Ehtan molesto.
Nyra parecía pensativa, seguramente estaba tratando de digerir aquella noticia, aunque no disimulaba nada bien, el hecho de que la había afectado, justo lo que Cyrus quería ver en ella, aunque no era suficiente.
- Yo, yo – le mujer no se veía nada bien – yo, iré a buscar a la madre de Killian, quizás ella también quiera unírsenos para el juego – dice levantándose y caminando hacia la mansión.