La Sombra De Mi Amor Perdido

1 año

Narra Vanesa

Ya ha pasado un año, un año de tortura, de dolor, un año de aguantar a Enrique y sus cambios de humor, no tengo vos o voto, Emiliano me defendía los primeros días, pero Enrique se desquitaba conmigo de noche y a solas, preferí hablar con Emiliano y pedirle que no lo haga más, frente a todos soy mujer del gran Enrique Vermut, frente a Dante soy feliz, sonrió y siempre tengo fuerzas, frente a Mica o Emiliano, me derrumbó cuál niña chiquita, pero en esas malditas cuatro paredes que Enrique llama habitación, sufro cada día y cada noche desde que acepte el trato, los primeros meses fue una agonía, quería salir corriendo, quería que alguien me rescatara, preferí ceder y obedecer, cumplir a cada maldita orden de Enrique, cumplir sus caprichos e incluso aprendí a comportarme según su humor. Cuando está enojado, frustrado, de pésimo humor o que algo le salió mal, viene a la casa y solo quiere que me desvista, me acueste y el hacer lo suyo, no quiere que me mueva, no quiere que lo toque, no quiere escuchar salir una sola palabra de mi boca, se quita la adrenalina y cuando se duerme, me encierro en el baño a llorar todo lo que no hago frente a él.

Cuando está feliz, alegre, que todo marcha bien, viene contento, me abraza, me besa, me mima, me trae algo de regaló, me saca a comer afuera o simplemente pasear, ama escucharme y saber que fue de mi día, me hace suya con amor, cariño y paciencia, así fue que conseguí ser la encargada de relaciones públicas de su empresa constructora, el cual tiene varios socios, he logrado conseguir mayores socios y ganancias, por lo cual Enrique anda feliz y de buen humor, tanto que me regalo un coche, también me enseñó a manejar, de todas formas voy de forma lenta, de esto ya hace 3 meses, todo ha estado tranquilo, ahí días que son de terror, pero son pocos y trato de no provocarlo, hoy Dante tiene turno en el hospital, Emiliano le ara estudios a fondo para ver su evolución, espero que me diga lo que por un año he querido escuchar, que ya no le debo nada a Enrique y soy libre, lo único que me ata a él, es la enfermedad de Dante, estoy en la oficina, más tarde de aquí salgo en busca de Dante y Mica, para ir a la clínica donde me espera Emiliano.

Estoy organizando unos papeles cuando mi secretaria me llama

📱📱📱

Vanesa- dime

Secretaria- el señor Cristian Valverde está aquí, pregunta si tiene tiempo de atenderlo

Cristian Valverde, hijo mayor de los Valverde, socios de la empresa por mayoría

Secretaria- señora

Vanesa- si haz que pase

📱📱📱

Golpea la puerta y doy el pasé

Cristian- buenas, no quisiera molestar

Vanesa- adelante, bienvenido, toma asiento

Cristian se sienta y yo igual

Vanesa- dime, a que debo el honor de tu visita

Cristian- vengo a ver, si me puede otorgar los balances de estos últimos meses, llega la hora de renovar contrato con la empresa, esa revisión la hacemos siempre

Vanesa- claro que si, permíteme

Apretó el botón del celular que me comunica con la secretaria

Secretaria- dígame señora

Vanesa- me traes el balance de este año de la empresa

Secretaria- enseguida

Suelto el botón y miro la hora en el celular

Cristian- si tienes cosas que hacer regreso más tarde

Vanesa- no, es la emoción lo que me hace mirar el celular

Cristian- que afortunado es Enrique al tener una mujer como tú

Solo agachó mi cabeza, Enrique no tiene idea que esta mujer está a un paso de irse de él, que está mujer solo está esperando escuchar una palabra para largarse, mi secretaria entra, controlo los papeles y se los pasó

Cristian- te molestaría si los llevo a revisar con calma

Vanesa- no, adelante, mejor para mí que debo salir

Cristian- perfecto, mañana le tendré una respuesta entonces

Cristian me pasa la mano y yo correspondo, coincidimos en el elevador, estoy nerviosa y ansiosa, al parecer se nota

Cristian- debe ser importante tu cita, digo por las ansias que traes, seguro te verás con Enrique

Vanesa- no, ojalá sea el quién me ponga así, pero no, es mi hermano menor, si todo sale bien espero que escuchar de la boca del doctor que está sano, eso sería la solución a mi vida

Cristian- y eso

Vanesa- larga historia y apenas te conozco

El elevador se abre y voy camino a mi coche, pero la rueda delantera está desinflada, como paso, siempre estoy atenta a eso, será que de la emoción hoy no controlé, escucho la bocina de un coche y al mirar es el de Cristian, que me habla desde arriba del mismo

Cristian- que paso

Vanesa- está desinflado y hasta que lo arreglen, me temo que llegaré tarde, tendré que avisar que vayan sin mí

Cristian- despreocúpate, sube y vamos, te llevo

Vanesa- pero debo pasar por mi hermano, ir al doctor, hacerle los estudios, llevarlo a la casa y no quisiera molestar

Cristian- sube, los llevo y hago todas las vueltas sin problemas

Subo, que más da, de todas formas Enrique encuentra algo para castigarme siempre, si lo va a hacer, que sea con razón y motivo. Pasamos a buscar a Dante y Mica, todo el camino Cristian nos hizo reír con sus historias graciosas, llegamos al hospital y Emiliano empezó hacer los estudios, pero no estarían dentro de un rato, para no tener a Cristian ni a Dante esperando preferí irnos, ya después voy por los estudios, dejamos a Dante en la casa junto a Mica y Cristian me lleva a la empresa.

Cristian- la verdad tu hermano es muy carismático, creo que saco eso de ti

Vanesa- no, lo saco de mi mamá

Cristian- te apellidas González

Vanesa- no, Dante tiene el apellido de su papá, yo tengo el apellido de mi mamá, mi apellido es Díaz

Cristian- Díaz, recuerdo haber escuchado ese apellido en algún momento, pero no recuerdo dónde

Vanesa- lo dudo, mi mamá no tenía más familiares

Cristian- tal vez solo era similar