En esta apasionante novela, "María" Gómez, una joven y talentosa periodista, se encuentra con un misterioso hombre llamado Alejandro, cuya sonrisa enigmática la deja sin aliento. A medida que se conocen mejor, María descubre que Alejandro esconde un secreto que podría cambiar su vida para siempre
NovelToon tiene autorización de mile vivero para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
El pasado y la sorpresa
La vida en común de Alejandro y María parecía perfecta.
María había estado sintiendo náuseas y mareos durante días. Al principio, pensó que era solo un virus, pero cuando los síntomas persistieron, decidió hablar con su amiga Sofía.
—Sofía, no me siento bien —dijo María—. He estado sintiendo náuseas y mareos.
Sofía se preocupó.
—Deberías ir al hospital —dijo—. Hacer una prueba, de embarazo
María asintió.
—Tienes razón —dijo.
Al día siguiente, María y Sofía fueron al hospital. María se hizo la prueba y esperaron los resultados.
—¿Qué dice? —preguntó María, ansiosa.
Sofía sonrió.
—Estás embarazada —dijo.
María se sintió emocionada.
—¿De verdad? —preguntó.
Sofía asintió.
—Sí —dijo—. ¡Vas a ser mamá!
María se sintió feliz.
—Gracias, Sofía —dijo.
María decidió guardar el secreto hasta que encontrara el momento perfecto para decírselo a Alejandro.
—Voy a planear una sorpresa —dijo Maria —. Para decírselo a Alejandro.
María estaba cocinando en la cocina, rodeada de una decoración bonita y aromas deliciosos. Alejandro entró en la cocina y se acercó a ella.
—¿Qué es todo esto? —preguntó Alejandro—. Parece una celebración.
María sonrió.
—Es solo una cena especial —dijo.
Alejandro se acercó más.
—¿Qué ocasiona? —preguntó.
María se rió.
—No es nada —dijo—. Solo quería hacer algo especial.
Justo en ese momento, el timbre de la puerta sonó. María se sintió nerviosa.
—Voy a responder —dijo.
María abrió la puerta y encontró un paquete con su nombre.
—¿Qué es esto? —se preguntó.
María abrió el paquete y encontró una foto de Alejandro con una mujer llamada Luisa. La foto mostraba a Alejandro abrazando a Luisa, con una sonrisa en su rostro.
María se sintió conmocionada.
—¿Quién es esta mujer? —se preguntó.
Alejandro se acercó a ella.
—¿Qué pasa? —preguntó.
María se sintió enfadada.
—¿Quién es Luisa? —preguntó.
Alejandro se sintió nervioso.
—No sé de qué hablas —dijo.
María le mostró la foto.
—¿Y esto? —preguntó.
Alejandro se quedó en silencio.
—¿Alejandro? —preguntó María.
Alejandro suspiró.
—Luisa es... alguien del pasado —dijo.
María se sintió herida.
—¿Alguien del pasado? —repitió.
Alejandro asintió.
—Sí —dijo—. No significó nada.
María se enfadó.
—No significó nada —repitió—. ¿Y esta foto?
Alejandro se sintió acorralado.
—María, por favor... —dijo.
María se dio la vuelta y se fue.
—Voy a salir —dijo.
Alejandro se quedó solo en la cocina, sin entender qué había pasado.
Después de un rato, Alejandro se acercó a la mesa y vio un regalito envuelto en papel de seda.
—¿Qué es esto? —se preguntó.
Alejandro abrió el regalo y encontró unos resultados de embarazo positivo con una nota:
"¡Sorpresa! Estoy embarazada."
Alejandro se sintió emocionado y sorprendido.
—¿María está embarazada? —se preguntó.
Y en ese momento, Alejandro se dio cuenta de que María se había ido sin decirle nada.
—Tengo que encontrarla!
María salió de la casa de Alejandro, enojada y llorosa. No podía creer lo que había descubierto. Caminó rápidamente, sin prestar atención a su alrededor.
De repente, un carro se acercó y la atropelló. María gritó de dolor mientras caía al suelo.
El conductor del carro salió corriendo.
—María, ¡Dios mío! —exclamó.
María abrió los ojos y vio a Luis, su exnovio.
—Luis... —susurró—. ¿Qué pasa?
Luis se arrodilló a su lado.
—Lo siento, María —dijo—. No vi que estabas allí.
María se sintió mareada.
—El bebé... —susurró—. No quiero perder al bebé.
Luis se asustó.
—¡No te preocupes! —dijo—. Llamaré a una ambulancia.
María se sintió débil.
—Alejandro... —susurró—. Necesito que venga.
Luis se levantó y llamó a Alejandro mientras María se desmayaba.
Alejandro llegó al hospital, desesperado.
—¿Dónde está María? —preguntó.
La enfermera lo guió hasta la habitación de María.
—Está estable —dijo—. Pero debemos monitorear al bebé.
Alejandro se sintió aliviado.
—Gracias a Dios —dijo.
María abrió los ojos.
—Alejandro... —susurró.
Alejandro se sentó a su lado.
—Estoy aquí —dijo—. No te preocupes.
Se que estas embarazada,
Lo.siento te lo hiba a decir dijo María
No te preocupes te entiendo dijo Alejandro
María se sintió tranquila.
—El bebé... —susurró.
Alejandro sonrió.
—Está bien —dijo—. Nuestro bebé está bien.
María sonrió débilmente.
Alejandro se inclinó y la besó.
María aparto la cara
Pero de repente, María se sintió incómoda.
—Luis... —susurró—. ¿Dónde está?
Alejandro se tensó.
—No te preocupes por él —dijo—. Está fuera.
María se sintió inquieta.
—Quiero saber qué quiere —dijo.
Alejandro suspiró.
—Hablaré con él —dijo.
Y con eso, Alejandro salió de la habitación para enfrentarse a Luis.
¿Qué quiere Luis?
¿Qué pasará con María ?