Debido al error de sus padres, quienes confundieron a otro bebé con ella, la vida de Bella fue muy triste en la familia equivocada. Sin embargo, de repente, su verdadera identidad salió a la luz y finalmente conoció a sus padres biológicos.
Desafortunadamente, su llegada nunca fue aceptada por sus padres y su hermano mayor. Ellos seguían queriendo a la niña equivocada y la ignoraban.
Aún sin haber recibido el cariño de sus padres, Bella es forzada a casarse con un hombre misterioso que afirma estar casado y ser mayor.
Sigue la historia de Bella, llena de altibajos en la vida y su sed de venganza contra sus padres, especialmente contra la hija que ha ocupado su lugar durante todos estos años.
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Capítulo 6
Un rato después de que Al siguiera a Bella al bosque, Lara, al sentir que su plan iba a funcionar, decidió ir al salón de belleza. Esa noche planeaba seducir a Al, que seguramente estaría furioso por haber visto a su esposa "disfrutada" por varios hombres.
No pregunten cómo Lara, una simple sirvienta, podía permitirse tratamientos tan caros. El salario que Al ofrecía a sus empleados era realmente alto. Tanto que, si querían, podían comprar artículos de lujo o, si ahorraban durante un año, podían construirse una casa bastante lujosa. Sin embargo, siempre había un alto riesgo detrás de un salario alto.
Volviendo al estilo de vida de Lara. Cuando no estaba trabajando, iba de compras al centro comercial con el estilo de una mujer adinerada. Por eso Lara se veía hermosa y la gente creía que era la hija de una familia rica, no una sirvienta.
"Bienvenida, señorita Lara. Tanto tiempo sin verla". El personal de la clínica de belleza ya conocía muy bien a Lara porque la mujer sabía cómo complacerlos para obtener beneficios.
"Sí, he estado muy ocupada últimamente".
"¿Y los negocios?"
"Bien". Lara se hacía pasar por heredera de un negocio familiar. "Hoy quiero un tratamiento corporal completo".
"Muy bien, señorita".
El tratamiento comenzó. Lara lo disfrutó mucho.
Después de su tratamiento corporal completo, Lara, aún no satisfecha con su apariencia, decidió comprar un camisón fino y sexy para seducir a Al.
"Esta noche lo conseguiré". Lara estaba muy segura de que Bella ya había sido abandonada por Al.
Por desgracia, nunca se imaginó que esa noche sería la última en la que viviría en libertad.
Alexander observaba el rostro pálido de Bella. También se dio cuenta de que no sentía asco ni molestia al abrazar su cuerpo.
Muy diferente a lo que había experimentado hasta ahora cada vez que alguien se le acercaba. Sólo su familia podía estar cerca de él, aunque no pudieran ser tan cercanos como cualquier otra familia normal.
Mientras Alexander buscaba una respuesta a su inusual comportamiento con Bella, la puerta de la habitación se abrió de golpe, mostrando la figura de un apuesto doctor con sudor en la frente; incluso la respiración del joven doctor era irregular por haber subido corriendo las escaleras.
"¿Quién es esta vez?", preguntó el médico molesto.
"Es mi esposa".
Esas palabras dejaron a Raiden atónito, incluso se limpió los oídos para asegurarse de haber oído bien. En este mundo, había una cosa que era completamente imposible: el matrimonio de Alexander, un hombre conocido por su frialdad, hasta el punto de que sus amigos especulaban que era gay. Su convicción se vio reforzada por el hecho de que Alexander tenía un trastorno obsesivo-compulsivo bastante grave.
"Deja que te lo repita, puede que haya oído mal o que tenga los oídos sucios".
Al no se enfadó, sabía que las palabras de Raiden eran naturales teniendo en cuenta que había sido etiquetado como gay por mucha gente y, curiosamente, nunca se había molestado en negarlo.
"Ocúpate de ella como es debido, del resto ya te informaré".
"Está bien, ahora hazte a un lado. Si sigues ahí, me resultará difícil".
Obediente, Alexander se apartó del lado de Bella para facilitar el trabajo de Raiden.
"¿Cómo está?"
"Pareces un marido atento", bromeó Raiden.
"Vamos, dime cómo está. ¿Tengo que llevarla al hospital?"
"No es necesario, está bien y sólo necesita descansar".
Alexander asintió con la cabeza y luego acompañó a Raiden fuera de la habitación. El matrimonio secreto había comenzado a desvelarse en un mes debido a su inestabilidad emocional.
"Entonces, ¿cuándo os casasteis tú y esa mujer? ¿Por qué no recibimos ninguna invitación de boda ni escuchamos ninguna noticia sobre el compromiso de la familia Wesley? De repente, tienes una esposa. Si no fuera por lo de hoy, ni yo ni los demás hubiéramos sabido nunca que un hombre con TOC y etiquetado como gay se había casado con una mujer".
Lo que decía Raiden era cierto. Si Bella no se hubiera desmayado en el agua, probablemente habría ocultado su matrimonio unos meses más.
"Hay algunas razones y no puedo decírselas. Nuestro matrimonio también fue bastante repentino y no hay amor. Para ser sincero, sólo yo la he visto; ella nunca me ha visto".
"¿La obligaste a casarse?". Raiden no iba a cuestionar las razones que Alexander no podía revelar.
"Sí, pero también lo hice para protegerla. Su familia es muy cruel, casi acaba siendo una mala mujer".
"¿Quiénes son su familia? ¿Por qué son tan crueles? Si hubiera sabido que una mujer tan hermosa como ella estaba siendo tratada injustamente, la habría convertido en mi mujer".
"Será mejor que mantengas ese plan en secreto".
"¿Te has enamorado de ella?". Había sorpresa en los ojos de Raiden.
"No, pero no sentí asco ni odio al tocarla. Cuando la llevé a la habitación, no me sentí extraño ni incómodo en absoluto".
"¿De verdad?"
"Sí, así que pensé que podía intentar empezar una buena relación con ella".
"Bueno, tienes razón. Después de todo, es la única mujer que ha conseguido que no te sientas mal o asqueado".
"Hm. Además, es bastante adecuada para ser una esposa, no es codiciosa aunque un poco tonta".
Raiden asintió con la cabeza en señal de comprensión. Se alegró de que su amigo pudiera por fin llevar una vida normal.
"¿Y por qué se estaba ahogando?"
"Como te he dicho, es tan buena que es tonta y fácil de manipular".
"¿A qué te refieres?". Las palabras de Al siempre estaban llenas de misterio, lo que hacía que sus amigos no lo entendieran.
"Esa zorra intentó deshacerse de ella contratando a cinco vagabundos para que abusaran de ella en el bosque. Por suerte, llegué a casa y conseguí salvarla antes de que la tocaran".
Raiden asintió con la cabeza, conocía muy bien la crueldad de Al y sabía que la gente que se metía con él acabaría mal.
"¿Y dónde está esa mujer?"
Además de intentar seducir a Al, Lara también había intentado seducir a los amigos de Al, pero al igual que su jefe, sus amigos nunca le hicieron caso.
"Está en el spa poniéndose guapa. Pensando que su primer intento tuvo éxito, ahora tiene confianza para continuar con su segundo plan de seducirme".
Raiden se rió. "Es una descarada. ¿Y si se la damos a la banda? Podemos hacer que lo haga en medio del bosque, como planeó con tu esposa".
"Hm, estoy de acuerdo. Necesita recordar la lección de meterse con lo que no debe". Era la primera vez que una mujer conseguía darle tanto asco. Alexander planeaba darle una lección que nunca olvidaría. Algo así como ojo por ojo.
"Está bien, yo me pondré en contacto con ellos. Pero hay una cosa que me tiene muy intrigado".
"Lo sé. Te preguntarás quién la ayudó a hacer esas cosas horribles hoy".
"Sí, siempre das en el clavo".
"Quien la ayudó no es nadie importante. Sólo algunos hombres a los que se ha acostado".
"Es una auténtica salvaje".
Al no hizo ningún comentario. Era sólo que le parecía demasiado negligente que una criada se atreviera a desafiar a su amo.
