La Asistente Del Villano

La noche había llegado, Eva decidió hacer su idea cuando no hubiera nadie en la cocina.

“ Hadrian solo me dió muy poco granos cacao, pero puedo hacerlo un poco de chocolate con esa cantidad, será sencillo aún así confío en el que le gustará"

Inventar el chocolate en este mundo sería un tipo de innovación grande para esta época. Además, era uno de los postres favoritos de Eva en su vida pasada, sabía cómo prepararlo naturalmente de ahí crear cualquier tipo de chocolate, pero por ahora se basará en la tradicional trozos de chocolate.

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Era más de las 11 de la noche. Evangelyn había durado varias horas en su proceso de preparar el grano de cacao a un chocolate dulce.

“Es probable que el chocolate sea de sabor fuerte y amargo, pero mi abuela me explicó que de una buena preparación podría su sabor ser el más dulce y delicioso"

Eva principalmente había tostado el cacao en en la chimenea de la cocina. Para después de que se enfriará quitarle la concha, y triturarlas hasta que se convierta en un polvo. Le tomó más tiempo de lo esperado pero por fin tenía la base para crear su chocolate.

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Por otro lado, Hadrian en su habitación no podía conciliar el sueño. Lo que pasó hoy fue la cereza del pastel para dejar atrás en lo que creía. Ya lo había intentado hace tiempo y el resultado era el mismo, nadie lo apoyaba.

En cambio su hermano mayor Ricardo era el favorito de todos y que siempre recibía la ayuda de los demás. Por eso Hadrian decidió ser independiente a su familia. También, una de las razones para dejar a su familia fue no vivir bajo la presión de casarse en un matrimonio arreglado.

Salió de su habitación para caminar un poco y dejar de pensar en que su proyecto iba a ser algo grandioso ya que al final resultó ser un fracaso.

Más allá, un olor que le resultaba extraño le llamo la atención, se detuvo momentáneamente para detectar ese aroma tan peculiar, vuelve a caminar por el pasillo hasta que se cruzó en el camino a Eva.

— ¡Maestro!— le tomó de sorpresa su aparición repentina.

— Evangelyn... ¿Que es eso?

— ¿Que cosa?

— ese olor... Es amargo, dulce... Es extraño pero a la vez tentador. ¿Que estás haciendo Evangelyn? Se que viene de la cocina y sé que acabas de salir de ahí. Veo tu delantal manchado.

— bien, bien... Maestro, antes de seguir, yo quisiera decirle que lo apoyo.

— ¿Que?... ¿Me apoyas?— preguntó, muy confundido.

— si. Se que es extraño y más viniendo de mí, pero se lo que se siente cuando nadie más está ahí para tí. Por eso.— Evangelyn tomo las manos de él y le aclara lo siguiente.— no quiero que se rinda ante lo que piensa hacer para lograr grandes cosas, déjeme ser la persona que lo ayudará con su proyecto.

Hadrian miraba sorprendido aquel gesto que intentaba hacer su asistente.

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— Evan-...— ella le tomó la muñeca y se lo llevó a la cocina sin dejar que terminara de hablar.

Al llegar, él pudo notar el desorden en la mesa, y sobre todo, ese olor que no dejaba de darle un cosquilleo en la nariz, observó un plato con unos dulces peculiares.

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— ¿Esos son dulces?... ¿Por qué son de ese color?... Jamás había visto uno igual.

— el cacao es el responsable de su color... Lo hice sencillo debido a que no tenía mucho granos. Pero hice lo suficiente como para que lo probara.

— ¿Que?— miro anonadado a Eva.— ¿Utilizaste los granos de cacao para hacer este tipo de dulce?... ¿Sabe bien?— preguntó, era algo que jamás había visto ni probado y por eso le resultaba tan cuestionable.

— sabrá tan bien que será una adicción... Si no me cree...— Eva primeramente se comió un trozo de chocolate para demostrarle que era seguro. Hasta ella misma se asombró.— oh, por Dios... No pensé que sabría tan bien.

— Evangelyn... Yo...

Sin esperar a que hablara, otra vez Evangelyn siguió su instinto y le dió un chocolate directamente en la boca de imprevisto.

— no hable y saborea.— explicó ella.

Al principio su rostro se había vuelto en una confusión total, segundo después, sintió ese sabor en su paladar como se mezclaba fácilmente con sensaciones gustosa y un leve cosquilleo en su lengua que sin duda alguna era el sabor mas extraño y exquisito que todo lo que ha probado.

Se había dado la vuelta tapado la boca para que Evangelyn no lo viera. Pero en su cabeza era un sentimiento muy inusual por el chocolate.

“ Dios, ¿Que esté dulce que creo está mujer?... Es algo de otro mundo. Nunca en mi vida había probado algo tan delicioso, la mezcla del dulce y un poco amargo van de la mano con este platillo y solo con unos simples granos de cacao. Eva, realmente este cambio que tuviste... Es asombroso"

— ¿M-Maestro...?

— Evangelyn.— nombró seriamente sin darse la vuelta.— ¿Como... Como fue que llegaste a la conclusión de que se podía hacer el dulce más exquisito del mundo con el cacao?

— ¿Eh?... ¿Le gustó?

— no hay palabra que describa lo que me hizo sentir ese pequeño dulce... Pero puedo decir que me hizo sentir emocionado y feliz en cuestiones de segundos.

Eva sonríe, sabía que esto podría funcionar, ahora solo faltaba darle una excusa razonable.

— me lo enseñó una persona muy importante para mí. Era la única que sabía que más hacer con los granos de cacao a pesar de no tener ese grano en el imperio, lamentablemente ella falleció y todos sus conocimientos me lo dio por si algún día me volvía a encontrar con esos granos que son muy escaso en este territorio.

— eso explica el por que trabajaste de inmediato apenas te di los granos. ¿Que más se puede hacer con el cacao?

— una variedad de postres, desde el más sencillo hasta el más elaborado. El que acaba comer usted es el más sencillo.

Hadrian nuevamente se asombra, si ese era el más común como sabría el más elaborado.

— me gustaría saber más de eso.

— por supuesto. Le diré todo lo que necesita saber.

— Evangelyn... ¿De verdad me quieres ayudar?

— sí. Por eso hago esto.

— ¿A cambio de dinero, estatus...? ¿Que es lo que deseas a cambio de esto?

Hadrian estaba acostumbrado a que las buenas acciones siempre llevan un favor a cambio, pero Evangelyn le hará saber que con ella no es así.

— no deseo nada a cambio. Solo con saber que su proyecto sigue en pie me basta.

— ¿En serio?... Solo dímelo, no te juzgaré por lo que me pidas.

— ya le dije. No me hace falta nada en esta vida. Yo solo quiero que siga con su meta y con esto puede hacer que su proyecto nazca sin ser chantajeados por persona interesada.

— Evangelyn... Lamentó decirte esto... Pero el proyecto ya no es solo mio...

— ¿Qué?

Hadrian aclara con una pequeña sonrisa.

— es nuestro. Tú hiciste que naciera este manjar, no puedo quedarme con todo el crédito si tú eres la responsable de crear tan grandioso dulce. Fuiste mi única ayuda cuando más lo necesitaba... Gracias.

Eva miraba sorprendida, jamás espero escuchar que Hadrian la haría parte de su proyecto, pero lo escuchó muy bien decir la palabra nuestro.

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Muchas gracias por leer, no olviden dejar su preciado like y comentario para apoyar más esta obra y ver más capítulos seguidos.

Ah!, me gustaría saber qué tipo de dulce de chocolate desean leer en los capítulos siguientes, la gerencia tomará el pedido de los dulces que más mencionen en los comentarios. Gracias 💕