Herederos

No había más que esperar, Daniel al igual que Kylian sabían que el momento de que sus hijos empezarán a conocerse y convivir ya había llegado.

Tuvieron una larga charla dónde no podían ponerse de acuerdo en el lugar donde se reunirían por primera vez, Daniel insistía en que fuera un lugar neutral, Kylian alegaba que sería mejor en la manda, debían de darle la oportunidad a Dayanna de conocer a gente de su otra raza, al fin al argumento de Kylian ganó, pactándose el encuentro en las vacaciones venideras, o sea, dentro de dos meses.

Las tías ya con el consentimiento de los padres, intercambiaron números de los niños quienes no perdía oportunidad de hablar cada que tuvieran tiempo, porque eso sí, debían atender sus deberes como hasta ahora.

La pequeña Dayanna envidiaba el estilo de vida de su hermano, vivir rodeado de naturaleza y entre todo el pueblo que casi se considera familia, además de contar con hermanos pequeños, una vida que ella deseaba. Por su parte lo que le contaba su hermana era muy interesante para Dereck, estudiar en un gran colegio y convivir con vampiros, tomar esa bebida que necesita muy seguido sin sentirse fuera de lugar, era una paz que el pequeño añoraba.

Los días pasaron en un abrir y cerrar de ojos, aunque para los gemelos fuera casi un suplicio contando cada día, pero por fin el último día de clases llegó.

- Mañana partiremos? - pregunta muy entusiasmada Dayanna

- Así es - responde Carolina - espero que ya tengas lista tu maleta? -

- Por supuesto!!, está lista desde hace días -

- No me sorprende - responde su tía con una sonrisa - aun así debemos revisarla -

- Muy bien, te espero en mi cuarto -

Mientras tanto en la manada...

- Papá, crees que esté bien que Dayanna duerma en el mismo cuarto que la tía Carolina?, tal vez debemos preparar una habitación para cada una? -

- Hijo ya lo habíamos hablado, así está bien -

- Y la comida crees que le agrade? -

- Sí, Alice y Carolina hablaron, la comida es la adecuada -

- Y?...

- Dereck, basta, todo está bien, y todo saldrá bien, no te preocupes -

Con un gran suspiro el pequeño mira a su padre y dice - es que quiero que ella esté muy a gusto aquí, y no solo ella, también el señor Daniel, la verdad, tengo miedo que se decepcionen -

- Por qué piensas eso?-

- Tiene un estilo de vida diferente al nuestro, tal vez no les guste aquí, tal vez no les agrade el lugar... o yo -

Ahora quién suspira fuerte es Kylian, toma a su hijo de los hombros y se dirige a él de forma seria - Dayanna está que se muere de ganas de verte, así que no pienses eso de ella, en cuanto a Daniel, créeme tal vez lo veas como un hombre muy serio, pero también yo lo soy y eso no quiera decir que no le agrades, ya verás que todo saldrá bien, de acuerdo? -

Dereck asiente, se acerca a su padre y lo abraza siendo correspondido de inmediato, es un niño que conocerá a su hermana y su otro papá, es normal estar lleno de dudas.

En el Jet privado iban Dayanna, Daniel, Carolina y Mayeli, quien regresaba después de estar una temporada con su hijo Marcus y aprovechó el viaje para visitar viejas amistades.

- Entonces tú conoces la manada, abuela?-

- Así es mi pequeña, cuando tu madre te esperaba a ti y a tu hermano la visitamos seguido -

- Y es tan bonita como me cuenta Dereck?-

- Ya lo verás por ti misma -

- Lo primero que haré será visitar la tumba de mamá - Dayanna lo dijo como lo más normal, pero en el rostro de su padre una gran pena se vio reflejada, él se fue huyendo de los recuerdos que ahora lo alcanzaban.

Después de varias horas por fin llegaron a su destino, en los alrededores se encontraba una comitiva para darles la bienvenida, encabezados por supuesto, por Dereck y Kylian.

Después de apagados motores se abrió despacio la compuerta, se desplegó la escalera, todo bajo el ojo crítico de un pequeño que veía como si fuera en cámara lenta. Ya por fin se veía la primera figura que salía de ahí, un hombre alto, rubio, con un aura increíble, era una energía familiar para Dereck, una energía parecida a la de él, caminando detrás una cabecita se asomaba, viendo alrededor, pero fijando la vista casi de inmediato a él, tenía un parecido al señor rubio, no un parecido no, era la versión femenina e infantil de él, era un ángel con una sonrisa hermosa que lo contagió de inmediato, y sin pensarlo empezó a caminar en dirección de ella, y ella sin dejar de verlo caminó acercándose a él.

Estando frente a frente se quedaron así, viéndose, estudiándose, porque sí, ya se conocían por videollamada, pero era tan diferente verse en persona

- Creo que la tía Carolina tiene razón, nuestras sonrisas son iguales - comentario que hace sonreír mucho más a los gemelos

- Y nuestra nariz - se toca Dereck mientras Dayanna lo imita, pero en ese momento el rostro alegre de la niña cambia, sus ojos se llenan de lágrimas, su boca se encorva y sin que Dereck lo vea venir, ella se arroja y lo abraza

- Me has hecho tanta falta -

- Y tú a mí -

Los hermanos lloran abrazados, diciéndose todo lo que por teléfono no podían, fue un encuentro que tocó los corazones de los presentes, varios lloraban junto con ellos.

- Bienvenidos - dice Kylian a Daniel

- Gracias por recibirnos después de tanto- Daniel extendió su mano que fue tomada de inmediato por Kylian

- Ella siempre será recibida, y tú tenías que venir con ella - levantando los hombros prosigue - son nuestros hijos Daniel, aunque no queramos siempre estaremos relacionados - ambos padres siguen viendo a sus hijos - gracias, ellos en realidad se necesitan -

- Y nosotros también - responde el vampiro

- Y nosotros también - le corresponde el lobo...