La Experiencia Adquirida

¿Qué tenían en común todas las chicas con las que había visto a Alex desde que estaban en preparatoria? No era un número considerable, pero ella contaba por lo menos seis, considerando a esta última. Ella habría conocido al menos a cuatro de ellas; chicas bonitas, cuerpos envidiables y sobre todo extrovertidas.  

 Adquirir experiencia… eso es lo que Jennifer había sugerido; Daniela no era de las chicas que se dejarán llevar por lo que otras querían que hiciera, de hecho en más de una ocasión había rechazado el consejo de la propia Jenni que era su mejor amiga, ese de hacerse novia de algún chico que se interesará en ella. Sin embargo, si era eso lo que hacía falta para poder romper esa imagen de chica aburrida e inocente que seguramente Alex tendría de ella, quizás no sería mala idea.

Bien, si eso era lo que necesitaba, entonces lo haría, pero no podía simplemente hacerse novia de cualquiera, necesitaba alguien con experiencia y con quién no fuera a establecer un compromiso, alguien en quien pudiera confiar plenamente.

Ya tenía en mente a quien le iba a pedir ayuda. Solo había un hombre en el que confiara de esa forma ciega, solo era un buen amigo, sino además era un hombre guapo, inteligente y experimentado. Le confiaría su vida sin pensar. Solamente esperaba que él aceptará ayudarla pues lo que ella planeaba hacer bien podía ser tomado en cuenta como el mero capricho de una chiquilla inmadura.

—Vamos Daniela, ¿Que tan difícil puede ser?

Daniela miró desde la ventana de su cuarto a su hermano riendo recargado en el auto de Gael, aún no se iba. Ella corrió hacia la puerta, pero se detuvo; no podía solo decirlo y estando ahí su hermano, si llegaba y le decía que quería hablar a solas con él, Liam no la dejaría en paz después tratando de averiguar de que hablaron. Mejor esperaría y así pensaría mejor como decirlo.

...

—¡¿Te volviste loca!?—Dijo Jenni sin medir el volumen de su voz. 

—Cállate te van a oír —Daniela se puso roja cuando las miradas de los de la mesa de al lado se fijaron en ellas dos; estaba segura que no serían solo ellos, pues estaban en la cafetería del campus y estaba llena. —solo pensé en seguir tu consejo. 

—No, yo me refería a que te divirtieras con alguien más, para que adquiridas un poco de experiencia, no a que le pidieras a un profesor que te diera lecciones. 

—Gael no es cualquier profesor. 

—Claro que no, también es el mejor amigo de tu hermano 

—Y es el único hombre en el que confió para esto. 

—Creo que no estás pensando con claridad —dijo Jennifer con preocupación.

—Lo estuve pensando todo el fin de semana y esto es lo mejor. 

Jennifer tomo un sorbo de su café y de pronto le llego una idea no tan descabellada y dio un golpe a la mesa que asusto a Daniela que casi escupe el café —. Porque no mejor se lo pides a Alex. 

—Por supuesto que no —la cara de Jenni era un signo de interrogación, entonces Daniela se dispuso a explicar toda la cuestión como si estuviera hablando con la chica sobre el pronóstico del tiempo. —No tengo una relación con Alex, ni siquiera somos amigos, como le voy a decir que quiero experimentar de esa manera. Además tú misma me dijiste con alguien más o ¿Ya se te olvidó? 

—Si, pero es que yo decía con cualquier otro, no con el profesor. 

—Pues no voy a pedírselo a cualquier fulano y mucho menos a Alex, que vergüenza. 

—Te da vergüenza con Alex ¿y qué me dices del profesor? Además… no creo que sea de esos hombres que se interesan en chicas jóvenes, bueno yo escuche algunos rumores. 

—¿Qué rumores? —Daniela no pudo contener su curiosidad. 

—Pues hay unas chicas de la clase de fisiología que querían salir con el profesor, no al mismo tiempo obvio —aclaro al ver la cara que puso la chica —el caso es que el profesor rechazo todos los intentos de cada una de ellas y eso que las tres son bastante convincentes —Jennifer hizo una mímica con sus manos dando a entender lo bien formadas que estaban aquellas chicas —no creo que caiga contigo. 

—Que quieres decir, que no soy capaz de conquistar a un hombre —respondió Daniela fingiéndose indignada. 

—No me refiero a eso, si no que eres demasiado inocente como para seducir a un hombre como el profesor. 

—Ya relájate, no pienso seducirlo, por supuesto que no podría hacerlo. 

—¿Entonces? —Jennifer se sintió tonta al no entender lo que su amiga pretendía. 

—Voy a hablar con él, se lo pediré como un favor. — Jenni se atraganto con el café y por poco lo tira al suelo. Entonces tomo a Daniela de las manos con una expresión más de preocupación que de otra cosa. 

—¿Estas segura de esto? Y si mejor buscas otro candidato. 

—No, ya lo decidí, y ¿Cómo piensas que voy a buscar a otro candidato? Ni siquiera se como acercarme a un chico. 

—Pues algún amigo, alguien de confianza. 

—Es que te digo que Gael es de los hombres en quien más confío y ya lo decidí iré a verlo ahora mismo que está por terminar su última clase. 

Daniela levantó de la silla, muy segura tomo sus cosas y dejo sobre la mesa el pago del café y se fue, a Jenni no se le ocurrió nada más que decir para convencerla de que no lo hiciera; cuando ella le dio ese consejo a su amiga no pensó en que se lo tomaría de esa manera tan específica, ella solo quería que Daniela se abriera más a otras opciones y se olvidará de Alex. Pero que podía hacer, solo quedaba esperar a que su amiga le contara todo después. Además ¿Qué podía pasar? Lo más probable es que profesor le diría que no y encontraría las palabras para explicar lo que ella no pudo explicar, quizás y Daniela ni siquiera le diría nada, seguro que se acobardaría justo antes de entrar a verlo, en fin solo quedaba esperar.