En Sus Brazos

* Recuerdan el primer capítulo?

No voy a repetir el párrafo completo... (gracias ☺️)

...Continuemos...

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📱Eres una descarada, maldita...

📱 Responde desgraciada, no te hagas la sorda, dame la cara, estúpida, recuerda que ese hombre con el que te revuelcas es mi marido... --Abbi respiro profundamente, mientras tomaba su vaso de leche, dejo su teléfono en la mesa hasta que Lisbeth se cansara de hablar y de insultar--

📱Maldita mujerzuela, zorra, arribista te le estás metiendo por los ojos a mi marido, se que Sebastián está en tu casa, deberia de darte vergüenza, recuerda que él te dejo por mí, no fuiste lo suficientemente mujer para él... --Abbi respira, será que Lisbeth no se ha dado cuenta del papel que está jugando? Se decía Abbi mentalmente. Si es muy cierto, Sebastián la engaño con ella y realmente fue Abbi quien lo corrió de la casa y de su lado al darse cuenta de todo lo que pasaba a sus espaldas, entonces... sí para la mente de Lisbeth, Sebastián dejo a su esposa por ella, pero en la ahora aturdida mente de Sebastián Abbi lo dejo no por ser mala esposa, ni por desatender su familia , ni su hogar, sino porque la aventura y curiosidad a lo que se suponía era nuevo lo llevo a los brazos de Lisbeth... Abbi estaba sumergida en sus pensamientos mientras en su teléfono una chillona y vulgar voz sonaba--

- Abbi, te encuentras bien? --Abbi volvió en si ante la pregunta de Sebastián a quien tenía parado al frente y aún se escuchaba la voz de Lisbeth en el teléfono--

- Ah! Sí, sí... Por favor dile a tu "señora" que por favor no me llame más... --hago comillas con mis dedos porque una verdadera mujer que conoce su lugar no se comportaría de esa manera y mucho más sabiendo que entre Sebastián y yo hay un hijo de por medio--

- Qué? De que hablas, no te entiendo... --no lo dejo terminar de hablar, tomo el teléfono de la mesa y se lo muestro, donde todavía Lisbeth está como loca insultando, él lo toma y se lo lleva a su oído por unos pocos segundos--

📱 Lisbeth? ...Hablamos en casa. --fue lo único que dijo en un tono bastante serio, cortó la llamada y me entrego el teléfono-- Abbi disculpa, no sé que le pasa a Lisbeth...

- Estoy cansada... Sebastián ya he cambiado mi número de teléfono varias veces y no es justo que ella no me deje en paz...

- Lo siento! Hablaré con ella...

- Está obsesionada conmigo? --me levanto para respirar un poco de aire puro frente a la ventana-- Agarra a tu loca y sácale esas cosas de la cabeza, yo no tengo la culpa de que tengamos un hijo en común y... nada más... Nuestra relación es solo de papá y mamá de Miguel...

Ciertamente, Sebastián después del divorcio pasaba más tiempo en casa, me atrevo a decir que hasta más tiempo que del que pasaba después de que Miguel naciera; tal parece que extrañaba mucho a su hijo. Prácticamente, Sebastián cenaba todas las noches con nuestro hijo y por supuesto conmigo bien sea en casa o en la panadería, al principio los dejaba solos para que Miguel compartiera con su padre, pero en vista de que los días de visita de Sebastián fueron aumentando entonces no me quedó de otra que irme acostumbrando a esta nueva rutina, luego empezamos a salir de paseo, otro día al parque, al cine, por pizza, por helados y así por diferentes actividades, mucho más que cuando estábamos casados... ¿¿Que loco no? Ahora prácticamente vivía más en mi casa o en la panadería que cuando vivíamos juntos. Aprendí a controlar mis sentimientos por el bien de todos, mi hijo está muy alegre cuando comparte tiempo con su padre y eso es muy bueno, pero mi corazón sufre cada día más y más sobre todo cuando está muy cerca de mi y no puedo ni tocarlo pues recuerdo que ya no es mi esposo, pues le pertenece a otra mujer.

Últimamente trato de no estar presente en sus actividades juntos, invento cualquier excusa convincente de la panadería y de verdad que me ha dado buen resultado en estos días, pero hasta donde voy a llegar? Mejor dicho hasta cuánto podre aguantar está situación? Pues si sigo así nunca voy a lograr olvidarme de este hombre, el padre de mi hijo, el mismo hombre que amo con todo el corazón desde el primer día que descubrí este sentimiento por él.

Después de esa conversación con Sebastián, la loca, disculpen... "La Señora Lisbeth" no me fastidio por unos buenos días, mejor dicho por semanas, pero era que Sebastián estaba de viaje y yo felizmente descanse de las llamadas insultantes, mientras que Miguel me preguntaba constantemente cuando regresaba su padre y era... como que si no hablaban todos los días? Sebastián le llamaba después de salir del colegio, a media tarde, en la noche; yo solo veía quién llamaba y automáticamente le entregaba el teléfono a Miguel... voy a sonar algo inmadura, pero que alguien me ayude a seguir adelante y borrar todos los hermosos y felices momentos que pase al lado de ese hombre que luego me monto los cachos, pero como hago con este ingrato corazón que no me quiere ayudar a seguir adelante y es que cada vez que lo veo siento que el corazón se me va a salir del pecho...

📱 Hola! --contesto después de varias llamadas sin contestar y que Miguel está dormido--

📱 Buenas tardes! Abbi sé que es un poco tarde, pero me gustaría pasar a ver a mi hijo.

📱 Buenas tardes! Sebastián aún estamos en la panadería...

📱 Entonces paso por ustedes?

📱No es buena idea Sebastián! Estoy algo ocupada, pero si quieres puedes pasar por Miguel y luego me lo llevas a casa.

📱 Perfecto! Gracias Abbi.

Me dispuse a seguir trabajando mientras que mi hijo duerme plácidamente en el mueble de la oficina. Me gusta estar en todo aunque no soy buena en la repostería, eso se lo dejo a Alice y los trabajadores, si a ellos les queda mejor y así no malgastamos material.

- Mami, no me siento bien...

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...🌻❤️🇻🇪😔...