La Niñera Latina.

Fernando detuvo en auto y bajo primero mientras Camila sacaba a Tatiana de su silla de bebé.

Al tomar a la bebé y salir del auto escuchó como la mujer que lo esperaba le dijo.

Desconocida: Vaya pensé que había venido por nada, ya casi me iba de aquí.

Fernando: Deja la exageración hermanita.

Camila escuchó el intercambio de palabras y guardo silencio.

Fernando abrazó a su hermana.

Fernando: Camila ven aquí, te voy a presentar a mi hermana.

Camila se acercó con Tatiana en brazos.

Fernando: Camila te presenta a mi hermana Fernanda, Fernanda te presento a Camila.

Camila: Mucho gusto.

Fernanda: Es un placer, la princesa de la tía está enorme.

Dijo cargando a Tatiana.

Fernando: Entrenos a la casa.

Fernanda: Chicos dejen mis maletas y regresen yo los llamo cuando quiera que vengan por mí.

Los hombres hicieron lo que ella les pidió y se fueron, Fernando ayudo con las maletas a su hermana y Camila también lo ayudo a pesar de la negativa de él.

Fernando: Bueno ya están todas tus cosas aquí, ¿y eso que decidiste venir?.

Fernanda: Saque un tiempo libre para venir aquí, además tú sabes que tengo que volar de un extremo del mundo para venir aquí.

Fernando: Lo sé, ¿mis padres saben que estás en el país?.

Fernanda: ¿Para qué? Ellos fueron muy claro la última vez que nos vimos.

Camila: Yo me voy a retirar con Tatiana para que se duerma un rato.

Fernando: Está bien Camila.

Ella subió a la habitación y después de un baño y fruta Tatiana quedó dormida.

Al bajar los hermanos seguían conversando.

Fernanda: Y dime Camila ¿de dónde eres?.

Camila: Soy de Venezuela señorita.

Fernanda: Señora cariño, estoy casada.

Camila: Disculpe entonces, señora.

Fernanda: Deja las formalidades conmigo, mi hermano dice que eres de su entera confianza así que por favor te pido que solo me digas Fernanda.

Camila: Está bien, voy a hacer algo para comer.

Fernanda: Yo te ayudo, supongo que aún no tienes a nadie que te cocine.

Fernando: Sabes que me gusta hacer mis cosas, Pero con Camila es diferente ella cocina muy rico y me va a engordar.

Fernanda: No la culpes por tu glotonería.

Camila sonrió por el cruce de palabras que tenían los hermanos y ya no se sintió tan nerviosa por la nueva integrante en la casa.

Ellos comenzaron a cocinar y almorzaron juntos en la cocina.

Fernando: ¿Y como está mi cuñado?.

Fernanda: Está muy bien, me dijo que si quería tener hijos y le dije que estaba bien.

Fernando: ¿Tú cómo mamá?.

Fernanda: Si, ¿por qué no? Además ya soy una mujer adulta que está casada, tiene una empresa y comodidades no veo porque no tener hijos ahora.

Fernando: ¿Tomioka y tú son felices?.

Fernanda: Si lo somos, cada día me demuestra que soy lo principal en su vida, la empresa muchas veces ha pasado en segundo plano y sobre todo me apoya en todo lo que quiero hacer en mi vida, por lo tanto, yo también lo apoyo y amo cada día más, no podría estar con mejor hombre.

Fernando: Me alegro mucho que siguieras a tu corazón y seas feliz.

Fernanda: Camila, ¿desde qué trabajas con mi hermano tú lo has visto feliz?.

A Camila la tomo por sorpresa esa pregunta, Pero la contestó.

Camila: Solo cuando está con Tatiana lo he visto feliz de resto es muy serio y poco sonriente.

Fernando: Oye, ¿por qué no me preguntaste a mí?.

Fernanda: Sé que no me dirías la verdad.

Fernando: Eso es trampa, voy a la oficina por unos palets y regreso espero no tardar más de 2 horas.

Fernanda: Anda tranquilo, Camila tendrá compañía.

Fernando se fue dejando a las dos mujeres sola en casa.

Fernanda: Y dime, ¿ya conociste a nuestros padres?.

Camila: No.

Fernanda: Que suertuda, ellos en mi opinión no son los mejores del mundo.

Camila: Si no le molesta, ¿me podría decir por qué dice eso?.

Fernanda: Pues a mis padres nunca les ha importado la felicidad de mi hermano o la mía más que los negocios familiares y nosotros salimos muy rebeldes si me lo preguntas, pero aun así mi hermano si dio su brazo a torcer un poco.

Mónica es la madre de Tatiana, ella y mi hermano fueron obligados a casarse, Pero durante el proceso se enamoraron, Pero muy pocos saben que desde un principio solo era un negocio, al año de casados ella salió embarazada, Pero no quería la criatura, mi hermano le dijo que él criaría a ese bebé solo, pero que no lo abortara al terminar el embarazo ella firmó los papeles del divorcio y también dónde le cede todos los derechos de Tatiana.

A mis padres no les importó mucho por todo lo que mi hermosa tuvo que pasar, pues mira tú tienes 6 meses trabajando aquí y nunca los has visto y eso dice mucho, en mi caso yo me escape de mi boda arreglada, ellos no querían a Tomioka porque según ellos no me iba a dar un futuro, pero a mí no me importo y creamos un plan donde el día de la boda yo me iría con él a Japón y así fue, cuando mis padres se enteraron viajaron a buscarme, pero ya yo estaba casada y lo último que me dijeron fue que ellos no tenían una hija y que no los buscará para nada.

Mi hermano también estaba en Japón y me apoyo de hecho él fue mi padrino.

Antes de que ellos regresarán a España, Tomioka les demostró que él no era un don nadie al contrario tenía empresas importantes en el mundo y que yo no iba a necesitar nada de ellos.

Puedes creer que al ver el dinero que Tomioka tenía se disculparon conmigo, pero mi respuesta fue clara.

Camila: ¿Y cuál fue?.

Fernanda: Que no tenían que disculparse por qué ellos no tenían ninguna hija.

Y desde entonces no he tenido contacto con ellos para nada, solo con mi hermano y no pude estar con él en los momentos difíciles porque yo estaba con Tomioka quien había tenido un accidente automovilístico que aunque no fue grave de muerte su pierna se vio afectada y estuvo en cama durante 3 meses y después empezaron las terapias hasta ahora que está bien y pude venir.

Camila: Vaya, bueno el señor Fernando poco habla de su vida personal, Pero sabía que algo había pasado, ya que su semblante solo cambia cuando está con Tatiana y por lo general mencionar algo que tenga que ver con la madre de la bebé era un tema incómodo así que siempre trato de no tocar temas que puedan torturar su alma, es un buen jefe y un buen hombre no es justo para él por lo que pasó.

Gracias por confiar en mí y decirme esas cosas, prometo ser cautelosa.

Fernanda: Mi hermano es un buen hombre y me dijo que eras muy buena no solo con Tatiana sino también con él y de alguna manera tu compañía lo ayuda mucho y por eso te agradezco.

Yo me quedaré aquí un mes, ya luego tengo que volver y espero que mi hermano saque tiempo para ir con ustedes me encantaría ser su anfitriona.

Además de que me caíste muy bien, supongo que podemos ser amigas.

Camila: Muchas gracias, puede contar conmigo para lo que necesites.

Tatiana comenzó a llorar y Camila subió rápidamente a la habitación tomándola en brazos y cantando para que dejara de llorar.

Fernanda: Eres buena en esto, tratas muy bien a mi sobrina y eso se agradece.

Camila: Bueno la realidad es que me enamoré de ella y durante todo este tiempo la he querido mucho más, es una princesa hermosa que merece todo el amor del mundo.

Fernando en su oficina escuchaba todo lo que su hermana y Camila hablaban.

Fernando: Que chismosa es mi hermana, pero aun así Camila es tan buena que puso cara de tristeza mientras ella le contaba mi vida.

Dijo Fernando desde su escritorio observando la escena en la habitación de su hija.

¿Será que me gusta Camila?.