Un Amor Imposible

-¿un campamento? – Mi padre dejo sus cubiertos sobre la mesa, y me miro –explícame eso otra vez, para ver si entendí bien–

Era la hora de la cena, la cual yo aproveche para decirle a mis padres que quería ir al campamento que harían como evento de bienvenida.

-ya te lo dije pa, están organizando un campamento para los de primer año, Luna y sus amigas me dijeron que irían, me dijeron que vaya también – 

-espera… me estoy perdiendo de algo ¿quién es Luna?- 

-una compañera de clases, he almorzado con ella y sus amigas, todo esta semana, son agradables – 

-¡ahh! Que tierno, la perdedora de mi hermanita, por fin tiene amigas – se burlo mi hermano August, tome un trocito de pan y se lo lance, dándole en la cara 

-August, basta – intervino mamá – creo que es una gran idea - me dijo a mí

-a mi no me lo parece – continuo quejándose mi padre 

-que tú no hayas participado jamás en ninguna actividad de la universidad, no quiere decir que tu hija no lo haga – mi tío Dimitri quien hasta ahora no había participado en la conversación también se puso de mi lado –

-¿Cuándo se van? – quiso saber 

-el jueves por la noche, volveríamos el sábado por la noche- respondí 

-¿y quién va a llevarte y traerte? Yo estoy ocupado y no puedo dejar que vayas sola –

-yo puedo hacerlo – intervino Dionisio – llevarla y traerla, no tengo ningún problema con eso – 

-lo vez, ya tengo quien me lleve al autobús y me recoja, ¿puedo ir entonces? – pregunte otra vez 

-lo voy a pensar – fue su respuesta 

-nada de lo voy a pensar, tienes permiso – le respondió mi mamá llevándole la contraria 

-hey se supone que tenemos que estar de acuerdo en este tipo de cosas antes de tomar una decisión – 

-entonces dile que si, cariño – respondió mamá con una sonrisa 

-está bien – acepto mi padre de mala gana, me levante de mi silla y fui hasta donde él estaba 

-gracias pa, eres el mejor – lo abrace y le di un beso en la mejilla – voy a terminar mi tarea, buenas noches -  

Mi familia había crecido de manera considerable, así que aunque la casa tuviera espacio, le hicieron una ampliación para que nosotros tuviéramos habitaciones a nuestro gusto, para llegar ahí, había que cruzar un pasillo largo, con altos ventanales, que iban casi del piso al techo, estos se mantenían abiertos en verano, pero en esta época ya solían estar cerrados.

Caminaba por ahí mirando hacia el exterior, cuando Dionisio vino y me alcanzo.

-Ali, ya no te preocupes tanto porque mi tío cambie de opinión, yo voy a hablar con él, tu solo ve y diviértete con tus nuevas amigas – 

-gracias, por ponerte de mi parte, pero no estaba tan preocupada, a papá le es difícil decirme que no – 

-yo siempre voy a estar de tu parte, y lo sabes, tú solo concéntrate en tus estudios, y en pasártela bien con esas chicas que dices que conociste, no pierdas el tiempo saliendo con chicos, no vale la pena – 

-no exageres – respondí y seguí caminando – tampoco es como que me la vaya a pasar soltera toda la vida – Dionisio venia tras de mi 

-lo digo en serio Ali, solo concéntrate en lo importante, ya tendrás tiempo para las citas después, cuando termines de estudiar –

-¿te estás poniendo un poquito dramático, no crees? –

-solo te doy consejos como alguien que ya paso por ahí, eso es todo – respondió 

-Alison, ¿me ayudas con algo de mi tarea? – Asher, mi primo, apareció en el pasillo y se detuvo frente a nosotros 

-¿Qué necesitas? puedo ayudarte y, para eso somos hermanos – Dionisio le regalo una sonrisa, pero Asher solo lo miro sin decir nada, para después dirigirse a mí de nuevo.

-prefiero que me ayudes tu – me tomo del brazo, y me guio por el pasillo hacia nuestras habitaciones, Dionisio dormía en la casa principal, así que no tenía razón para que vinera tras nosotros.

-¿paso algo entre ustedes dos? – le pregunte a mi primo 

-no, es solo que a veces es muy entrometido – respondió soltando mi brazo 

-y bien ¿en que necesitas que te ayude? – 

-no es necesario, acabo de recordar que ya hice esa tarea más temprano – dejándome confundida, se fue a su habitación

Estuve ahí parada hasta que Gus, mi hermano apareció a molestarme de nuevo -¿Qué haces ahí parada como boba? – paso dándome un empujón y se fue rumbo a su recamara.

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El día de ir al campamento llego, mi padre no estaba muy de acuerdo con que fuera, no dijo nada más. Tal como prometió Dionisio me llevo a donde el autobús nos recogería para llevarnos, baje mis cosas y me despedí rápidamente de él.

-¡Ali, Aquí! – me llamo Luna, fui entre los demás alumnos, y la encontré con Lidia, Kat, esta masticaba chicle, y miraba a todos con cara de aburrimiento 

-¿no tienes frio? – le pregunte cuando la vi usando un short, con una sudadera que lo cubría casi por completo 

-el frio es mental cariño – respondió, ella pasado su  brazo por mis hombros 

-se va a arrepentir a medio camino – opino Lidia, acomodando sus gafas 

-no todas son friolentas como tu – le respondió ella 

 El viaje duro casi toda la noche, me era incomodo así que no dormí en absoluto, solo dormite un poco, una vez que ellas se durmieron, estaba amaneciendo, el autobús iba a en absoluto silencio, el cielo estaba comenzando a pintarse de los colores característicos del amanecer. El resto de los alumnos y el autobús comenzó a llenarse de conversaciones en voz baja, que poco a poco, fueron subiendo de tono, todo mundo parecía emocionado.

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El resto del día la pasamos acomodando las tiendas de campaña, en realidad no hicimos mucho, pero estaban preparando una fogata, para encenderla al anochecer, me aleje un poco para caminar por la orilla de lago. Vi a un chico caminar por el muelle, se agacho al parecer veía algo ahí abajo, de repente se la madera se rompió y el cayó al agua.

Espere un momento, pero no lo veía salir, así que me quite los zapatos, la sudadera y entre al agua, estaba horriblemente fría, pero yo era muy buena nadadora, así que rápido llegue al él, y lo jale hacia la superficie.

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 Jasper 

Me aleje un poco de donde se estaban preparando la fogata, camine por la orilla del muelle, y acuclille en la orilla, para ver los peces más de cerca, cuando de un momento a otro sentí la madera crujir, no alcance a quitarme, cuando esta se rompió y caí al lago, yo era un nadador pésimo, además al sentir que era más profundo de lo que creía me entro pánico, y comencé a hundirme.

Justo cuando pensé que nadie ma había visto, y no recibiría ayuda, alguien vino, me tomo por la cintura y me jalo a la superficie, donde pude tomar aire, y fue cuando vi que mi rescatista, era una chica, ella me llevo hasta la orilla, y me dejo sobre la tierra, se inclino sobre mí.

-¿estás bien? – me pregunto 

Pero yo no podía responder, solo podía mirarla, el agua le escurría por el cabello, y la cara, era un chica muy bonita, nunca en la vida me había cruzado con ella, debía de ser de primer año también, pero de una carrera diferente.

-¿eres mudo a acaso? – pregunto ella sentándose a mi lado, yo me senté y comencé a toser, me dio golpecitos en la espalda y escupí algo de agua – eres muy imprudente, si no eres buen nadador ¿qué diablos hacías ahí? – me dijo esta vez ya molesta, y poniéndose de pie.

-no creí que el muelle fuera tan poco resistente – atine a decir, por fin, ella ya estaba recogiendo sus zapatos, pero yo no quería que se fuera.

-pues ese muelle es un peligro – respondió, ella comenzó a caminar, yo quería ir tras ella, pero mis amigos, venían hacia mí, solo quería saber quién era esa chica y darle las gracias. 

Una vez que los organizadores supieron de mi accidente, clausuraron el muelle, y prohibieron a cualquiera subirse ahí.

Cerca de las diez fue la fogata, yo no quería ir, porque me sentía un poco avergonzando, el chisme de que me caí al lago y casi me ahogo se rego por todo el campamento, y la gente cuchicheaba, estaba a punto de volver a mi tienda de campaña, la vi, estaba con alguien que yo conocía, era mi ex compañera de preparatoria, así que saludarla era el pretexto perfecto para que saber quién era ella. 

-escuche que casi te ahogas-  se burlo Katia 

-¿estás bien? – me pregunto Lidia, esa chica era diminuta, ni parecía universitaria 

-estoy bien, solo quería saber quién es la chica que estaba hace un momento aquí, y que se fue con Luna –

-todos los tipos son iguales, ven una cara bonita y se alborotan – 

-no es por eso, ella me fue quien me ayudo – 

Luna y esta chica venían de regreso, y me alcanzaron a escuchar -¿fuiste quien la saco? – le pregunto a ella 

-era la única persona cerca, si no lo hacía yo no lo haría nadie más – respondió como si fuera lo más obvio del mundo, ya no tenía el cabello mojado, ahora lo llevaba recogido, y sujeto con algo que parecían palillos de metal, los cuales tenían un adorno al final, nunca vi a una chica usar algo así, era un poco exótico, pero ella lo lucia bien.

-antes quise darte las gracias, pero te fuiste – 

-no me lo agradezcas es incomodo – respondió ella mirando a otro lado 

-¿al menos puedo saber tu nombre? – 

-¿para qué? Yo ni siquiera se el tuyo – 

-me llamo Jasper, ahora ya lo sabes ¿Cómo te llamas tu? – 

-Alison – me respondió dejando mi mano estirada, parecía bastante incomoda 

- Venga Ali, parece que nunca has tratado con chicos, ¿iba a preparatoria de mujeres solamente? – le pregunto Kat 

-¿yo? Estudie en Santa Ana – respondió ella, y nos quedamos callados – acaso aquí no hay señal – se quejo y se retiro con su celular en mano 

-eso comprueba mi teoría –comenzó Kat –

-¿Qué teoría? –pregunte 

-que Alison es una niña rica, a ese lugar es carísimo, solo hay tres maneras de ir, que tu familia haya ido ahí, por ende ya tienes un lugar seguro ahí desde la primaria, dos que tus papás den una fuerte suma de dinero, para que te den un lugar, tres con una beca – 

- ¿y no puede ser ella de la tercera opción? – pregunte 

-no lo creo, ahora la pregunta es ¿Qué tan rica es? – 

-¿a ti que te importa? – le respondí a Kat 

-yo solo te aviso que ella y tu no están en el mismo nivel, así que ni te enamores de ella – me respondió y yo mire hacia donde ella se había ido, era muy bonita, pero hasta yo sabía que ella no estaba en mi liga.