La historia de Brandon Nixon y de Rita Valdéz es un relato conmovedor de resiliencia y redención. Después de que un evento traicionero lo dejara en silla de ruedas, Brandon se encuentra en una encrucijada, no solo enfrentando las limitaciones físicas, sino también el dolor emocional de una traición. Rita por su parte busca desesperadamente un respiro del ambiente tóxico creado por su esposo agresivo. al aceptar el trabajo, como cuidadora de Brandon, Rita no solo encuentra un escape temporal, sino también una oportunidad de sanar y de reconstruir su vida. A través de su mutua dependencia, Brandon y Rita desarrollan una amistad inusual, pero fortalecedora, demostrando que incluso en medio de la adversidad, la esperanza y la compasión pueden florecer, ofreciendo nuevas perspectivas de vida y de amor.
NovelToon tiene autorización de Lily Benitez para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.
Capitulo 4 ATAQUE
*BRANDON
Rita respondió que no quería involucrarme en asuntos personales, que agradecía mi ayuda con el abogado, pero que no sería conveniente que ella se mude aquí.
"Era mi cuidadora"
"Sería más fácil para ella estar aquí, a tener que madrugar para venir". Pensé.
Terminó de hablar y se retiró.
-No acepto. Le comento a Noel. La intriga me quemaba por dentro, que mujer no daría lo que fuera por estar aquí, no solo por mi, sino por el lujo en si.
-Señor... Aunque ella no lo admita ... Le tiene miedo a su esposo. Me comentó Noel.
-Averigua todo sobre él... Debemos protegerla... Reconozco que sin la perseverancia de ella aquí... seguiría postrado en esa cama. Le indico a Noel.
-Asi es señor... Se lo ve mucho mejor que hace más de medio año atrás. Me dice Noel.
De golpe ingresa Héctor.
-SE QUE ES ELLA... AUNQUE DEBERÍA AVERIGUAR SOBRE EL TATUAJE EN SU HOMBRO DERECHO... PERO TRAJE UN VIDEO PARA QUE LO VEAMOS EN LA PANTALLA GIGANTE. Nos sorprendió, por lo acelerado que estaba, se ve que no podia de dejar de pensar, en el asunto, de que Rita sea la del video, que le sube la temperatura.
-Pareces que pasas por la pubertad de nuevo... No es ella... Es mi enfermera. Le aseguro enérgico para que deje de hablar del tema.
-Mira conmigo el vídeo. Me dice pasandome un dispositivo de USB.
-Señor Brandon... Debo irme... Me avisaron que mi esposo está en emergencias. Apareció Rita.
Nervioso escondí el pendrive para que no lo vea como si cometiera un delito.
-Si... Vaya... Ya me atendió por hoy. Le respondo con la voz grave.
No podía negar que tenía un magnetismo y que cualquier hombre se rendiría a sus pies.
-NO ESTA PRODUCIDA COMO EN EL VIDEO... PERO ESTOY SEGURO QUE ES ELLA. Insiste Héctor.
-TRABAJA 24/7 QUE TIEMPO PARA HACER UN VIDEO VA A TENER. Le respondo para que deje el tema de una vez.
Héctor exhala pesadamente siguiéndome al despacho y por sus gestos estoy seguro que sigue pensando en el asunto.
-Señor... La señora Clara Osco. Me anuncia mi mayordomo Alfred.
-NO QUIERO VERLA... SABES BIEN QUE NO ES ADMITIDA EN ESTA CASA. Le digo furioso al escuchar que ella vino.
-SEÑOR NIXON... SOY EL ABOGADO DE LA SEÑORA CLARA OSCO... ROMAN ANDREA. Aparece un señor mayor de traje haciéndose presente.
-MI MAYORDOMO DIJO QUE ELLA VINO. Le aclare.
-Habra ido a estacionar la escoba. Murmuró por lo bajo Héctor.
-SE QUEDO EN EL AUTO... COMO USTED NO VA A LA EMPRESA... HE VENIDO PARA LLEGAR A UN TRATO REFERENTE... Iniciaba y lo corte en seco.
-NO HAY NADA DE QUE HABLAR. Le digo serio.
-NO ENTIENDO SU NEGATIVA... TENGO ENTENDIDO QUE FUE COMPLICADO SU DIVORCIO...
-¿COMPLICADO?... ESTOY EN SILLA DE RUEDAS. Le digo.
-DONDE ELLA FUE COMPLICE. Le dice Héctor.
-¡TERMINA CON EL TEATRO BRANDON!... LA MITAD DE LA EMPRESA ES MIA... RECLAMO SOLO LO QUE ME PERTENECE POR DERECHO. Aparece Clara de manera abrupta.
-Hay un aquelarre cerca, que viniste. Le dice Héctor tratandola de bruja, ella lo mira con desprecio sin responderle.
-¡RETÍRENSE DE MI CASA!... ¡NO LOS QUIERO AQUI!. Les ordenó eufórico, señalando al abogado y a Clara.
No soportaba escuchar de ella y verla solo reavivó las llamas del odio más de lo que ya estaban.
-SOLO ERES UN DESPOJO DE HOMBRE... MÍRATE. Se burló Clara en mi cara.
-Eso dices ahora que no le puedes sacar nada... Ya se sabe lo materialista que eres. Le dice Héctor.
-ANTES DE METERTE DÓNDE NO TE LLAMARON, HAZTE ANALISIS, DEBES TENER GONORREA, POR CADA P*TA QUE FRECUENTAS. Le dice Furiosa Clara.
-Contigo no me metí... Así que estoy sano. Le dijo Héctor.
-TU AMIGO PROMISCUO Y TU IMPOTENTE VAYANSE AL INFIERNO. Grito furiosa.
-ESTUVE TRES AÑOS CONTIGO... FUE BASTANTE CASTIGO. Le dije.
Ella gruño molesta zapateo con los puños cerrados y se retiró con su abogado.
-Ya que menciono el tema... Tu amigo anda... O no. Me pregunta curioso Héctor.
-Solo no camino. Le dije serio a Héctor.
-Entonces se levanta... Eso es bueno. Dice pensativo.
-No iré contigo a ninguno de esos clubes. Le aseguro antes de que hable.
-No... Claro que no... No hay rampas para sillas de ruedas... Por lo que apresúrate a dejarla... Solo me aburro. Me dice Héctor con una sonrisa en sus labios, señal que se burla de la situación.
Paso la tarde hasta que llegó la noche, extrañaba la figura silenciosa de Rita que se colaba en mi alcoba las veces que debía tomar los medicamentos, ya iba a llegar la hora de mis pastillas y extrañaba esa crema que me preparaba como premio si las tomaba.
-Señor... Aquí le traigo el vaso de agua... Debe tomar su medicación. Me anunció Noel.
-¿Sabes algo de Rita?. Le pregunto, mientras tomo los remedios.
-No señor... No ha llamado. Me terminó de avisar y la vemos ingresar con un bolso.
-Buenas noches... En qué habitación me puedo quedar. Dijo en un tono molesta.
-¿Cómo está tu esposo?. Le preguntamos.
Me resultaba raro que salió preocupada y ahora volvía en ese estado, señal que pasó algo que le hizo decidir para quedarse.
-Se puede morir. Dijo con la mandíbula apretada.
-¿Qué pasó?. Le pregunté.
Ella inhaló y exhaló pesadamente como tomando fuerzas para hablar.
-Le dió un infarto. Iniciaba y ahogo un llanto, al apretar su nariz, con sus dedos indice y mayor, inhalando. - En un motel con otra, que aseguraba ser la novia. Concluyó Rita al no poder seguir contando, por la frustración que eso le generaba.
Con Noel nos miramos tragando grueso sin saber que contestarle.
-Y... NO PUEDO GRITARLE... ESTA EN COMA... OJALA QUE SE SALVE... PARA QUE SE SEPA LO DESGRACIADO QUE ES... PORQUE SI MUERE SEGUIRA MANTENIENDO ESA IMAGEN DEL HOMBRE PERFECTO. Comenta al tomar fuerzas para hablar.
-Calma Rita... Llamaré a mi abogado... Él sabrá aconsejarte en este asunto... ¿Tu estás casada legalmente con él?. Le pregunto.
-Si... Nos casamos por civil. Me cuenta.
-Entonces... Eres la esposa... Te corresponde todo, si no llega a salvarse. Le trato de consolar.
-Claro... Cómo las cuentas... Ahora me cierra porque casi nunca su sueldo alcanzaba... Yo refaccione toda la casa... De mi sueldo... Él siempre está justo. Comenta haciendo gestos con las manos.
Llame a Alfred y le pedí que le armen una habitación, ella estaba muy molesta que no quería regresar a su casa, en ese estado solo deseaba quemar todo lo de su esposo.
Cómo ella no era parte del área de cardiología, solo podía ir como familiar a visitar a su esposo, mi abogado le recomendó que no debía alejarse, estar atenta a su evolución, marcar presencia, eso le sumaba puntos, por si llegaba a mejorar e iniciaría el divorcio.
En las noticias se dió a conocer el caso de un reconocido hombre perteneciente a las fuerzas que defendían nuestro país, en un reconocido motel, donde sufrió un infarto en pleno acto con una joven de veinte años.
Con Noel nos miramos.
-¿Cómo será que se enteraron?. Me preguntó Noel.
-Quien sabe... Tal vez un reconocido periodista tenga alguien que le brindo la noticia. Le digo haciéndome el desentendido.
-Esto le dolerá a Rita... Pero a la vez será un alivio... Ya no tendrá esa imagen de buen hombre. Me dice Noel en complicidad conmigo al desconfiar que posiblemente fui yo el que dió esa información.
En mi alcoba antes de dormir siempre miro en mi celular, en las diferentes cámaras, cada sector de la casa. En una de ellas ví a Rita acostada en la cama, mirando su teléfono y suspirando de manera pesada.
-Señor... Se va a acostar. Aparece Noel.
-No ... Quisiera estar un rato más. Le digo.
-De acuerdo... Iré a la cocina. Me avisó.
-Te llamo. Le dije.
-Si señor. Me responde.
Al rato escucho el golpeteo en la puerta, ese tan particular que me anuncia quien es, y veo ingresar a Rita, tenia puesto una calsa larga negra y una remera de algodon mangas largas en color gris con él dibujo en blanco y negro de la cara de un oso.
-Me avisaron que tomo sus medicamentos... Por lo que le traje su premio. Me dice enseñándome el pote de crema en la mano.
-Crei que descansarías. Le dije.
-No tengo sueño. Me responde.
-Si pudiera en tu caso... Tomaría... Suele ser un sedante al dolor. Le sugiero.
"No solía tener ningún vicio, Porque a mí esposo no le gustaban los olores", penso Rita ante lo que le dijo el señor Brandon.
-Mantengo la mente ocupada... Trabajando... No tengo vicios. Me responde Rita.
-Tienes un vicio. Le digo y me mira sorprendida.
-El trabajo. Le comento, veo que hace un gesto asintiendo.
-¿Quieres tomar algo?. Me pregunta.
-Estoy medicado... No puedo. Le digo.
-Me refiero... A qué si quiere... Un vaso de agua... Leche. Me dice.
-Me gustaría un vino... Está el clima ideal para eso. Le digo,
Ella se muerde el labio, sin decir nada, sale de la habitación.
"Creo que la moleste", pensé suspirando pesado.
Al rato aparece con una caja en la mano.
-Si me ganas en ajedrez... Te dejare tomar una medida. Me dice.
-No me desafies... Mira que si me lo propongo soy muy bueno. Le digo mientras ella acomoda las piezas.
Iniciamos el juego, la veía concentrada en cada movimiento, veo que ingreso Noel y le hice gestos de que se vaya, el asintió retirándose despacio.
Note que en realidad ella solo estaba haciendo pasar el tiempo, como siempre no me decía que no, se mostraba comprensiva, pero al final me hacia hacer lo que ella decia. El sueño me comenzó a invadir y en un momento me quedé dormido.
Nose cuánto paso que un sonido me despertó y veo una figura oscura que se desplazo en la habitación, avanzando hacia mi.
Cuando diviso que levanta su brazo derecho con una inyeccion en la mano le atajo en el aire, en los brazos tengo fuerza y me defiendo.
Rita aparece, con una reacción rápida lo reduce aplicandole golpes en sus costillas y rodillas. Veo que usa sus piernas como tijeras, tirando al piso al sujeto, sentándose en él.
Llame a Noel que ingreso ayudando a Rita para reducir al sujeto, le quitaron lo que le cubria el rostro.
-¿Quién te envío?. Le exigió Noel que le diga.
Pero el tipo no respondía, Rita mientras me revisaba si estaba bien.
-¿Te lastimo?. Me preguntó preocupada.
-No... Estoy bien... Pero... ¿Dónde aprendiste a pelear así?. Le pregunto.
-Mi abuela me hacía ir desde pequeña a clases de karate. Me responde.
-¿Vivias con tu abuela?. Le pregunto.
-Si... Desde que tengo memoria... Siempre estuve con ella. Me cuenta, poniéndome crema donde me lastimo el tipo.
-No piensas hablar... Ya hablaras. Escucho que le dice Noel al tipo haciendo que se levanté.
-Llevalo al cuarto. Le indico a Noel, mientras le marco a Rita que me ayude a acomodarme en la silla de ruedas.
En el cuarto que no tenía escape de sonido alguno, Noel ato al tipo en la silla, le puso una mascara que aisla la voz y si uno quiere escuchar lo que dice solo se gira una parte de la mascara que es como un botón redondo.
-Antes de tener este empleo estuve en las fuerzas... Precisamente en la parte de espionaje... Pero por una herida en pleno ejercicio de mis labores... Me dieron el retiro... Pero el conocimiento de como infundir dolor... Jamás se me olvidó. Le comento Noel mirándolo fijo.
-No diré nada, malditos imbéciles. Escupió furioso.
-Te preguntaré una vez... ¿Quién te envío?. Le pregunto Noel.
-Tu madre. Le respondió y Noel le rompió el dedo meñique de la mano derecha.
"AAAAAHHH" Grito adolorido.
-¿Que le ibas a hacer al señor Brandon?. Le pregunto.
-Solo le daría vitaminas. Respondió con una sonrisa de burla.
"AAAAAHHH" Le rompió el anular de la mano derecha.
-DE ACUERDO. Dijo cuando vio que Noel le iba a romper otro dedo antes de preguntarle.
-Me pagaron para que le ponga esa inyección... No sé quién... Solo me contactan por un chat... Hacen el depósito y la indicación del encargo...