Gabriela Linarez es una mujer de 25 años, lleva tres años casada con el que es el amor de su vida, Camilo Paredes..
Su primer año de matrimonio fue de mucho amor y cariño, ella se dedicó por completo a su hogar, con la esperanza de poder formar una familia completa, pero la vida no le dió la dicha de poder quedar embarazada..
Es la heredera de una gran familia.
Su esposo Camilo es un hombre común de 30 años..
Gabriela, le entrego el poder de sus empresas mientras ella jugaba a ser ama de casa, pero la felicidad se fue desvanecido al pasar de los años.
Encontró a su adorado esposo enredado en la cama con una amante..
Gabriela huye y se aferra a una vida que no es de ella.
En esa falsa fachada, conoce el amor más puro y sincero, poniendo ese amor en riesgos por sus mentiras.
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Capítulo #17 Sirvienta por elección.
Julieta: Señorita Yenni entiendo que usted sea una persona cariñosa y está acostumbrada a un trato diferente conmigo, pero entienda mi patrón me llama por mi nombre, por favor no moleste a mi jefe.
Yenni: tenemos una conversación pendiente, esto no se quedará así JULIETA.
Julieta: la llamo luego Señorita.
🥵🥵 Dios mío, mi amiga casi mete la pata, no quiero mirar el rostro de Ernesto pues se ve que está muy molesto.
Ernesto: por que dejas que te trate así?.
Julieta: le debo respeto, era mi patrona..
Ernesto: ahora eres mi empleada, te ordenó que no vuelvas a dejar que nadie te hablé así de esa manera.
Julieta: ok.
Regresamos a casa, por supuesto todos íbamos en total silencio..
...ΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩΩ...
...*Ernesto*...
Hoy fue un día muy ajetreado, conseguir un vestido en esta cuidad para Zara es muy díficil, no veo otra opción que llamar a su diseñadora y que venga a hacerle unos cuantos, no quiero volver a pasar por esto.
Estando en la joyería pude ver cómo Julieta observaba muy detenidamente un collar, no pare mujer de buenos gusto, aunque hoy lo demostró con ese hermoso vestido que eligió para mi niña, cuando fui a pagar ordene ese hermoso collar para ella.
por otra parte no puedo creer lo que me está pasando con esa espantosa mujer, me molestó mucho como la otra mujer le hablo, pero no entiendo por qué me molestó tanto el trato que le dio.
Sus palabras sonaron a amenaza, y eso no me gustó, no permitiré que alguien le haga daño.
A Pesar de ser una mujer fea y con malos gustos en su vestimenta, pude darme cuenta que con Zara fue diferente, ella le encontró un vestido tan hermoso..
Me fascina la manera en que está educando a Zara, cada día me deja más impresionado su forma de expresarse al hablar, su correcta postura al caminar y ni hablar de la educación que mantiene en la mesa a la hora de comer.
Si no fuese tan fea consideraría dejarla en casa como la madre de Zara, cumple con todas las exigencias para una madre, solo que sería la burla de la escuela si llegase a ir a una reunión.
Me costó mucho conseguir un colegio que estuviese apto para Zara, Mañana la llevaré personalmente, será su primer día de clases.
Ernesto: buenos días mi niña, levántate hoy vamos a tu primer día de clases..
Zara: me lo juras papi?.
Ernesto: si mi niña te lo juro, ahora levántate y vamos.
Deje a Julieta a cargo de Zara mientras yo bajé a ayudar con el desayuno, siempre es ella la que cocina y tiene la casa pulcra, a pesar de que es la sombra de Zara aún le queda tiempo para encargarse de todos lo quehaceres.
Mi padre me consiguió todos los empleados que le solicite, pero me siento tan Agusto viviendo con ellas, aunque a veces pienso que Julieta se debe cansar de tantos oficios..
El desayuno fue en paz y armonía pero todo fue arruinado por la Señorita Espanto.
Zara: listo papi cómo me veo?.
Ernesto: hermosa y preciosa.
Zara: papi viste las trenzas que me hizo Julieta?.
Ernesto: se las hiciste tú misma?.
Julieta: no, fue una estilista invisible que contraté.
Ernesto: -.- luego hablaremos tu y yo.
Sentí que morí al escucharlo decirme esas palabras, toda mi piel se erizo de solo pensar en que pudiese castigarme en la cama, por Dios que pensamientos tan pecaminosos.
si no es por que traigo una gran cantidad de polvo, el podría haber visto todo mi rostro rojo..
Julieta: Se obediente y has todas tus actividades..
Zara: Te lo prometo.
luego de que ambos se fueran, quedé en casa sola.. es extraño por qué ya estaba acostumbrada a la presencia de mi niña, decidí lavar y planchar la ropa de Ernesto hasta que recordé que hoy sería la fiesta en la noche..
Arregle uno de mis uniformes que Gustavo me envió, es de sirvienta pero el mando a bordar con hilos dorados unas pequeñas flores..
Espero nadie pueda reconocerme o mi secreto sería revelado, no podría imaginar el rostro de Ernesto decepcionado y ni imaginar el de mi pequeña, no se, si el sería capaz de alejarme de ella como castigo..