Lia siempre ha sido la chica invisible en la escuela, centrada en sus estudios y lidiando con una complicada vida familiar. Para ella, la secundaria es solo un paso hacia un futuro mejor, lejos de los dramas adolescentes y las expectativas de los demás. Pero su plan de pasar desapercibida se ve truncado cuando se cruza con Mateo, el chico más popular y carismático del instituto.
Mateo vive bajo la constante presión de ser perfecto. Como estrella del equipo de fútbol y el sueño de muchas chicas, su vida parece ideal. Sin embargo, detrás de su sonrisa encantadora, se esconde un joven que lucha por encontrar su propia identidad y escapar de las expectativas impuestas por los demás.
Cuando un proyecto escolar obliga a Lia y Mateo a trabajar juntos, sus mundos chocan de una manera inesperada. Lo que comienza como una colaboración forzada se transforma en una conexión genuin
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Capitulo 3: Secretos Revelados
El proyecto de ciencias estaba prácticamente terminado, y Lia y Mateo habían establecido una rutina de estudio en la biblioteca. Los días que pasaban juntos se volvieron cada vez más naturales, y Lia empezó a disfrutar de la compañía de Mateo más de lo que había anticipado. Sin embargo, un secreto que había estado guardando durante mucho tiempo estaba a punto de salir a la luz.
Una tarde, mientras revisaban los últimos detalles del proyecto, Mateo parecía más distraído de lo habitual. Lia notó que, cada vez que él intentaba concentrarse, miraba repetidamente su reloj y suspiraba.
“¿Todo bien?” preguntó Lia, preocupada por su cambio de actitud.
Mateo levantó la vista, forzando una sonrisa. “Sí, todo bien. Solo… tengo algo que decirte.”
Lia dejó el cuaderno a un lado y lo miró con curiosidad. “¿Qué pasa? Si te preocupa algo, puedes decírmelo.”
Mateo dudó un momento, claramente luchando con sus palabras. Finalmente, se inclinó hacia adelante y dijo en voz baja, “Hay algo que no te he contado. Algo que… podría cambiar cómo me ves.”
Lia frunció el ceño, sintiendo una mezcla de ansiedad y expectación. “¿Qué es?”
Mateo tomó una respiración profunda antes de hablar. “Mi familia está pasando por problemas financieros serios, y eso ha afectado mucho mi vida. A veces, siento que estoy atrapado en un papel que no elegí, y que la gente solo ve lo que quiero mostrarles.”
Lia lo miró con asombro. Aunque sabía que Mateo tenía una vida pública impresionante, no había imaginado que hubiera problemas personales tan profundos detrás de su fachada. “Lo siento mucho, Mateo. No tenía idea de lo que estabas pasando.”
Mateo asintió, agradecido por su comprensión. “No lo mencioné antes porque no quería que me viera como una víctima. Pero creo que es importante que sepas la verdad.”
El ambiente en la biblioteca se volvió más íntimo y silencioso, marcado por la revelación de Mateo. Lia sintió que la barrera entre ellos se desmoronaba y vio a Mateo bajo una luz completamente nueva.
En ese momento, Lia también sintió el impulso de compartir algo sobre sí misma. “Hay algo que también debería contarte. Mi familia… no es perfecta. Mi mamá está enferma y mi papá trabaja constantemente para mantenernos. A veces, me siento como si estuviera llevando todo el peso del mundo sobre mis hombros.”
Mateo la miró con comprensión y empatía. “No sabía que estabas pasando por eso. Debe ser realmente difícil.”
Lia asintió, sintiéndose aliviada al compartir su carga con alguien que parecía comprender su situación. “Sí, es difícil. Pero hablar contigo me hace sentir un poco más ligera.”
El silencio que siguió fue cómodo, lleno de una nueva sensación de conexión. Mateo extendió su mano sobre la mesa y la tocó suavemente. “Me alegra que lo hayas compartido conmigo. Creo que esto nos acerca aún más.”
Lia sonrió tímidamente y tomó la mano de Mateo con la suya. “Sí, creo que tienes razón.”
A medida que la tarde avanzaba, Lia y Mateo se sintieron más cercanos que nunca. La revelación de sus secretos no solo les permitió comprenderse mejor, sino que también profundizó su vínculo emocional. Mientras se despedían al final del día, Lia sintió que algo había cambiado entre ellos, creando una base más sólida para lo que estaba por venir.
