SOLA

Elizabeth miraba el horizonte pensando en su padre, eran muy unidos y solo quería hablar con él, la ama de llaves ingresa a la habitación diciéndole que el Sr. quería verla.

Elizabeth se pone de pie y sigue a la Sra. donde se encontraba Leandro con esa imponencia que lo caracteriza.

Elizabeth: buenas tardes me mando a buscar,

Leandro la miro y cada día la veía más hermosa aunque su mirada era triste su belleza no se apagaba, lo que Elizabeth ignoraba era que Leandro cada noche ingresaba a la habitación de ella se sentaba en el sillón únicamente a contemplar su belleza.

Leandro: quiero que hablemos de ti, debes aprender hablar italiano debes aprender a comportarte, empezarás a recibir clases en casa y de tú depende si permito que salgas.

Elizabeth se sintió feliz por lo menos podría estudiar, cosa que aprovecharía lo más que pudiera, pero quedo helada con lo que Leandro le siguió diciendo.

Leandro: he decidido que cuando cumplas 17 serás mi mujer desde hoy comienza tu aprendizaje en todo.

Elizabeth no sabía que decir al menos no la obligaría a nada por ahora, en el fondo quería que el tiempo se detuviera no pasara esos dos años.

Leandro solo se retiró la dejo ahí, perdida en sus pensamientos.

Así transcurrió el tiempo ya había pasado 6 meses, Elizabeth estudiaba en la villa, era muy inteligente y aprendió italiano con mucha facilidad, estaba más acostumbrada, pero siempre pensando que ese no era su hogar, estaba sola sin los suyos y los extrañaba.

Una tarde el Ama de llaves le dijo que debía ir a comprar la despensa, Elizabeth se emocionó le pidió que la llevara.

El Ama de llaves llamo al Sr. Leandro le hablo de la petición de Elizabeth, él no estaba muy convencido.

En realidad ella no había dado queja, no conocía todavía fuera de la villa, así que autorizo su salida claro con escoltas siempre vigilada.

Dejaron la villa, llegaron al mercado, Elizabeth se emocionó al ver gente, comida, respirar otros aires estaba feliz, al mirar alrededor vio que tal vez podría salir con facilidad.

Todo se derrumbó cuando vio a su lado dos hombres que le dijeron que no se alejara, uno de ellos le paso un celular, ella al contestar se dio cuenta que era Leandro, quien le decía que la tenía vigilada que no se alejara porque ya sabia de los castigos.

Elizabeth se congeló, ella había sido castigada dos veces, La última vez que la castigo fue porque ella entró al despacho sin autorización, Leandro la dejo ingresar y que revisara, luego cuando ella creyó que no la habían descubierto él llegó, entro a su habitación, le Mostró la grabación.

La llevo a su despacho arrastras, allí la dejo en ropa interior y la puso sobre su escritorio boca arriba, la amarro sacó un látigo y castigo su cuerpo.

Desde ese día Elizabeth no se acerca a ese despacho, a menos que la mande a llamar.

Evita lo más que pueda estar cerca de Leandro, cada día se le hace más complicado, ya que él ha tomado decisiones sobre ella, no se puede negar.

luego de las compras llegaron a la villa, Elizabeth subía a su habitación, pero Leandro la esperaba le aviso que saldrían y le dijo que se alistara.

Elizabeth obedeció se puso hermosa y salieron, Leandro la llevó a una fiesta de su empresa a pesar de su edad Elizabeth se supo desenvolver sin problemas y brillo.

Leandro solo la miraba, Enzo se dio cuenta, le tocó el hombro y le dijo.

Enzo: está hermosa no parece de 15.

Leandro odiaba que le recordarán su edad, el solo pensaba en cuando cumpliría sus 17, era lo que se había propuesto, así la gente no hablaría mucho, ya que había decidido que ella era la que le daría el heredero a su imperio.

ya había investigado, a los 15 sería muy arriesgado un embarazo a los 17 lo podría asumir con menos riesgo, la noche paso con normalidad, Elizabeth disfruto, así tuviera todas más miradas en ella.

De regreso a la villa Leandro subió el vidrio que separaba al conductor de ellos, miro a Elizabeth y la tomo como un lobo la beso como si fuera el final.

Leandro sabía que ella sería su perdición, no importaba porque igual él sería la de ella.

llegaron a la villa, cada uno se fue a la habitación, a descansar.