Latentis

La fiesta sigue en su mejor apego, los nobles del reino se han acercado para entregar los regalos y desearle un feliz cumpleaños a su princesa, los emisarios de otros reinos que en este caso son las familias reales de dichos reinos también felicitan a Daphne, ella al ver que la familia real de las hadas se acercan a ella, con la mirada busca a la Princesa Elisa quien es la primera princesa del reino de las hadas, pero no logra encontrarla.

Unos minutos más tarde su hermano junto a Elisa se acercan a ella, Daphne entrecierra los ojos pensando que a eso se debe que no la vio cerca hace rato.

—Felicidades por su cumpleaños alteza —Dice la princesa Elisa 

—Muchas gracias princesa, es un placer tenerla aquí— le responde Daphne 

—Es un honor poder asistir a su fiesta—dice la princesa volteando a ver a Darién 

— Me imagino, bueno los dejo un momento saldré a caminar—dice Daphne levantándose de su asiento 

—No olvides volver para la danza del bosque—le recuerda su hermano

Ella asiente a lo pedido y sale hacia el balcón, ahí se sienta a observar la luna llena que está en su máximo esplendor, en sus pensamientos solo hay algo que se repite una y otra vez “Ojalá estuvieras aquí hermana” levanta la mirada al firmamento donde las estrellas acompañan a la luna en su soledad, en eso ve como una lluvia de estrellas pasa por el horizonte como si esto fuera una señal de que su deseo se va a cumplir, claro se ha acostumbrado a este mundo donde tiene un hermano, padre y madre que la adoran sin mencionar a sus familiares que la ven como un tesoro preciado caído del cielo, pero aun así siente ese vacío en su corazón.

—Es hermoso—dice observando la lluvia de estrellas

—Una mágica noche sin duda alguna—dice Arthur quién ha estado junto a ella desde que salió del salón 

—Eh sí lo es, y tú desde cuándo estás ahí—le señala con el dedo 

—Mmm desde hace poco—menciona él acercándose a ella y acorralando a la chica con la barandilla del balcón, ella se agarra bien para no caerse al vacío, por unos instantes sus miradas dicen más que sus palabras mirándose fijamente escaneando el rostro de cada uno, Arthur sin esperar invitación le planta un beso a Daphne, ella para no desaprovechar la oportunidad profundiza más el beso, disfrutando el momento justo cuando estaba en lo mejor se acuerda que debe de volver para presentar la danza del bosque.

La danza del bosque es una interpretación de la naturaleza pura, agua, Fuego, tierra, viento y espíritu, es un ritual que hacen los jóvenes que cumplen sus 17 años, aparte de tener su magia de nacimiento, cuando cumplen su mayoría de edad la madre naturaleza les otorga un don especial a los elfos ya sea controlar el agua o el viento, muchos logran tener más de un don, pero casi nunca los cuatro dones juntos. El hermano de Daphne tiene 3 dones agua, fuego y viento. 

Al regresar al salón notan que los presentes ya se han ido al jardín donde se lleva a cabo la danza del bosque, Daphne sabiendo que es lo que se acerca camina con pasos seguros y precisos hasta llegar a la entrada del bosque ahí ya se observan antorchas encendidas.

Arthur se va junto a su familia ahí le entregan una antorcha, él observa como Daphne camina hasta estar en el centro del jardín rodeado de antorchas humeantes.

Daphne por su parte no está nada de nerviosa, pero si comienza a sentir esos pequeños temblores en su cuerpo mezclados de emoción por lo que está a punto de ocurrir, de los lados de las personas salen doncellas con diferentes dones, haciendo pequeños remolinos de viento, cascadas de agua, llamas de fuego, haciendo crecer flores de la tierra, los elementos siendo invocados y las doncellas dando saltos, vueltas alrededor de Daphne en un pequeño círculo, música suave comienza a vibrar.

Las doncellas al escuchar la música comienzan a tomarse de las manos haciendo un círculo alrededor de Daphne luego se sueltan y comienzan a dar saltos como si bailaran ballet alrededor, Daphne ya sin sus zapatos no se queda atrás sintiendo como su alma le pide a gritos que comience a moverse, primero se balancea de un lado a otro dejando que su cuerpo vaya agarrando el ritmo deseado, luego cierra los ojos levantando sus brazos moviendo sus manos como si quisiera controlar el viento y vaya sorpresa para los presentes porque en su cabeza se forma un pequeño remolino de viento, ella extiende los brazos y el remolino la consume, su cabeza se siente mareada por tantas vueltas que la hace dar el viento, flores comienzan a brotar de la tierra, los pétalos son arrasados por el viento uniéndose al viento.

Ella suelta el aire contenido haciendo que el viento y los pétalos se disipen, pero no desaparecen es más cuando ella retrocede y mueve su mano como si llama a alguien agua comienza a salir de sus manos creando pequeños ríos que riegan las flores que han nacido de la tierra, ella sonríe al sentir como su energía crece en su interior, coloca sus manos hacia abajo como si empujara algo y comienza a flotar en el aire, sin darse cuenta comienza a danzar en el aire dando vueltas, giros rápidos, al colocar sus manos frente a frente junto a su pecho una pequeña bola de fuego comienza a formarse incrementando poco a poco, al tener una bola grande la lanza al cielo donde se disipa quedando solo humo, sus manos aún siguen apuntando al cielo estrellado que había hace un momento este comienza a formar nubes negras como si fuese a llover, pero lo único que será seguro que baje serán rayos que los impactarán a cada uno de los presentes.

Ellos al ver eso piensan en ir a resguardarse, pero aun el ritual no ha acabado así que deciden quedarse a esperar qué es lo que va a pasar.