Soy La Urraca En Este Cuerpo!

¿Traición a la patria? - pregunto Aldo dándole una mirada a Europa, quien sintió que se le helaban los huesos.

- País Y, están trabajando para el país Y - respondió tratando de sonar serena.

Aldo se quedó en silencio bajando la vista, Europa sabia que estaba evaluando tal posibilidad, así como la posible razón detrás de esto.

- Te escucho - pronuncio luego de unos minutos, mientras abría el folder en la mesa.

Europa empezó a realizar su presentación tocando los puntos importantes, dando a conocer las razones tras sus acusaciones, luego siguiendo con las consecuencias que esto traería para la familia Arco.

Secuestro de personas y dinero ilícito, el dinero obviamente no era limpio, seguro era traído por los extranjeros y estas personas eran intercambiadas por ello. Todas las personas desaparecidas tenían el cabello negro, una altura promedio de 170 cm y eran de 15 a 24 años de edad, por supuesto, la mayoría de estas eran de pueblos lejos de la capital.

Evasión de impuestos, la familia Min ideaba una forma astuta de hacerlo, sin embargo, sus hijos no eran buenos para quedarse callados y revelaban algunas pistas en sus publicaciones.

Con respecto a la traición, era una sospecha ambigua, pero fuerte y necesitaba que Aldo se encargara de juntar evidencia sólida de este hecho.

- ¿Qué tan segura estás de todo esto? - pregunto Aldo al finalizar la presentación.

- Estoy totalmente segura de que es así - respondió con seguridad Europa.

- ¿Tienes un bolígrafo? -

- Sí - respondió Europa para después pasarle uno.

- Anota tu número - Aldo intercambio su móvil por el bolígrafo.

Europa agrego a contactos su nuevo número y dejo el móvil sobre la mesa. Para retirarse y servir agua en dos tazas.

Dejo una taza para Aldo y ella tomó un sorbo de la suya, luego encendió las luces, para después observar su presentación en la laptop.

Al costado estaba Aldo escribiendo en las hojas de su reporte, todos sus movimientos eran elegantes y limpios, su letra era armoniosa y estable, el ambiente alrededor de él era el de un gran erudito. Al dejar de lado el título de un casanova, Europa reconocía que Aldo reunía todos los requisitos para ser el hijo del cielo y ser inmensamente favorecido.

Pero, el protagonista era Alonso. Europa chasqueo la lengua, girando la cabeza en dirección de Aldo. Verlo era una bendición, gozaba de una belleza envidiable, pero tenía un aura fría, probablemente heredada de sus padres, Europa negó, era su mecanismo de defensa frente a los ojos críticos del mundo, para poder sobrevivir.

En la novela nunca mencionaron a la madre de Aldo, solo a su padre, quien falleció poco después de ser devuelto. Europa sonrió, al menos tenían algo en común, ambos fueron robados, solo que el fue encontrado antes que ella.

Europa aparto la vista y decidió esperar en silencio a que Aldo acabe, mientras guardaba sus cosas dentro de la mochila.

Luego de un tiempo Europa escuchó que Aldo dejaba el bolígrafo en la mesa y guardaba cuidadosamente las hojas dentro del folder.

- Perfecto - murmuro Aldo.

- Guárdala dentro de aquí - Europa le paso una bolsa, ante la mirada desconcertada de Aldo - será más fácil llevarlo - finalizo Europa torpemente.

- Su paga se le enviará a su nuevo número - declaro Aldo.

- No me falta el dinero - lo rechazo Europa - Dije que te ayudaría a ser el heredero de los Arcos y cumplo mi palabra. Si quieres agradecerme - guardo silencio unos minutos antes de sonreir - reservame una mesa en el restaurante Mo, dicen que tiene el mejor biste del país -

- ¿Haces esto por Alonso? -

- No - respondió secamente - ¿Cómo podría Alonso compararse con los hijos de las grandes familias de la capital? - preguntó disgustada.

- ¿Se le acabó el amor a la dama pequeña de la familia Son? - preguntó burlonamente.

- Solo tienes que recordar que en estos momentos estoy apostando por ti, cuando tomes el puesto de patriarca seré desvergonzada y te pediré ayuda para que mi hermano herede la familia Son - respondió seriamente.

- Así que, ¿podrías escoger a otra persona? -

- La situación me obligo a escoger a una de manera rápida, no tuve muchas opciones desde el principio -

Aldo tarareó - Y si no hubiera estado esa noche, ¿a quién escogerías? - pregunto luego de un momento.

- A nadie - respondió rápidamente Europa, luego de unos minutos en silencio.

No había otra persona dentro de ese bar por la que podía apostar todo y saber que ganaría, para empezar ni siquiera sabía que estaba él ahí - Originalmente no pensaba encontrar a alguien con quien trabajar esa noche. Simplemente en medio de la fecha desperté y tuve que proteger mi integridad - rio nerviosamente Europa.

- Cualquiera hubiera estado bien, después de todo - le dio una vaga mirada a Aldo antes de continuar - planeaba golpearlos luego y después escapar a casa - a medida que hablaba su voz se hacía pequeña.

Aldo soltó una risa baja.

Europa tocio levemente - Esto compañero, no se lo tome a pecho, dejemos los rencores a un lado, ahora trabajamos juntos - sonrió torpemente - trabajaré más duro para compensarlo -

- Pensaré en lo que puedes darme como compensación -

Europa solo asintió.

- Dejémoslo así, es hora de volver - pronuncio Aldo mirando la hora.

- Vale, te acompaño abajo - ofreció Europa mientras se ponía la mascarilla.

- No es necesario - Aldo la rechazo.

Europa lo acompaño hasta el ascensor, después de despedirse entro nuevamente al departamento. Limpio las tazas, tomo sus cosas y salió con dirección a casa.

El taxi la dejo a unas cuadras de la villa y realizo el mismo recorido en reversa que hizo para salir de la Villa.