LA SIRENA DE LA COSTA

#ARIA DELMAR

Note que los ojos de Perla se tornaron mas oscuros cuando la revise, de seguro se darian cuenta que algo en ellas era diferente, eran sirenas que vivieron siempre en el mar, tenia marcas en el costado de su cuello y su piel era suave y rebasladisa.

-TENGO ALGO PARA DESPERTARLA, ES MEJOR DEJARLAS Y NO MOVERLAS. Me apresure a decir.

-INSISTO QUE SE LE LLEVE A VER A UN DOCTOR. La voz de Federico retumbo.

En eso aparecio mi padre.

-¿Qué sucede? ¿Por qué estan todos aqui? Indago.

Me adelante a hablar.

-ENCONTRAMOS A ESTAS HERMANAS HERIDAS Y LAS ESTAMOS AYUDANDO, LES DIJE QUE DEBEN QUEDAR REPOSANDO.

"Son sirenas" movi mis labios para que los lea sin que los otros escuchen.

Mi padre al ver mi gesto carraspeo.

-HE, SI, SI, DEBEN REPOSAR. Dijo apoyando lo que decia.

-PERLA ESTA CON FIEBRE Y CORAL ESTA DESVANECIDA POR UN GOLPE EN LA CABEZA HAY QUE LLEVARLAS AL DOCTOR.

Señalo Federico.

Mi padre suspiro rascándose la cabeza.

-ARIA OCUPATE DE QUE BAJE LA FIEBRE DE PERLA, ¿ASI SE LLAMA?.

-Si, asi es. Le respondi señalando.

-LLEVALA A QUE LE BAJE LA FIEBRE AL BAÑO.

Ordeno y se aproximo a revisar a Coral, toco la cabeza de ella, midio su pulso y asintio en señal que estaba bien.

-TE AYUDO. Me dijo Luis alzando a Perla.

-VOY CON USTEDES. Agrego Erik.

-LUIS Y ERIK, DEJEN A PERLA CON ARIA Y AVISEN A PABLO LO QUE SUCEDE, FEDERICO LLEVA ESA PARRILLA CON ELLOS, NOSOTROS CUIDAMOS A LAS CHICAS.

Les indico para que salgan de la casa.

-QUISIERA QUEDARME. Insiste Federico.

-DEBEN LLEVAR ESO ENTRE LOS TRES ES PESADO PARA UNO, ESTAMOS CON ARIA AQUI.

Mi padre con su voz de orden le señalo, por lo que nos les quedo de otra que obedecer.

Luis bajo a Perla en la tina vacia y salio junto a Erik.

-Vengo luego. Me dijo Erik.

-Si, claro. Le respondí nerviosa.

Cuando salieron cerre la puerta y me incline a mojar a Perla, en eso ella desperto asustada.

-Tranquila, te estoy refrescando, para bajar la fiebre. Le dije.

-¿Y Coral? Pregunto agitada.

-Mi padre la esta atendiendo.

-No nos llevaran a emergencias, ¿cierto?

-Tranquila, no pasara. Voy a abrir la llave para enfriarte. Le señale.

-No me veran. Dijo agitada.

-Cerre la puerta. Le muestro.

Cuando termine con ella la ayude a salir.

-Te hizo bien el baño, te preprare un remedio para que te sientas mejor. Le dijo mi padre al verla.

-Es muy amable... ¿Mi hermana?

-Esta bien, no te preocupes, esta dormitando nada mas, le puse compresas frias, en la cabeza para que el chichon baje y su pie esta vendado, le costara caminar. Le dijo mi padre.

-Que contrariedad. Se quejo Perla.

-¿De dónde son? Le pregunto mi padre.

-Somos... Viajeras o como se dice...

-Turistas. Le ayude.

-Eso, turistas.

-Tienen manera de comunicarse con sus padres, podria llamarlos.

-He, no es necesario, estabamos de regreso, pero solo paramos a descansar.

-¿Hacia dónde viven? Podria llevarlas si no puede caminar tu hermana.

-No se preocupe, nos arreglamos.

-Asi como esta tu hermana no podra andar y tu tuviste fiebre, toma este te, tomalo todo, no pueden andar solas asi. Insiste mi padre.

-Vivimos en una isla, no tiene modo de llevarnos.

Explico Perla.

-Entonces van en avion.

-He... ¿Avion?

Mi padre le ponia nerviosa a Perla por lo que interferi.

-Por lo que me contaste estaban en un bote, pero la tormenta lo destruyo. Le dije.

-Aha, si, asi fue. Dijo ella respirando aliviada.

Mi padre me miro con una sonrisa, el sabia lo que eran, solo finge no saberlo para no ponerla nerviosa.

-Pobre, no me quiero imaginar por lo que pasaron, donde quedaron, que comieron. Comento él

-Nos las arreglamos. Escuche decir a Coral que se desperto y trato de incorporarse.

-Hermana, no puedes, mira tu pie. Le dijo Perla.

Pero Coral igual trato de incorporarse y volvio a sentarse resoplando molesta.

-YA DESPERTASTE, QUE ALIVIO. Aparecio Federico acompañado por los demas.

-Que barbaro, menos mal se encontraron con ellos, hay muchos que se aprovecharan de dos jovencitas. Comento Damaris.

-Gracias por la ayuda, debemos irnos. Anuncio Coral seria.

-No puedes marcharte asi, mira tu pie, descansa, despues puedo llevarlas si asi lo prefieren. Se ofrece muy amable Federico.

-Considero que deben ver a un doctor. Expreso Luis a Perla.

-Ocasionamos muchas molestias, estamos bien. Dijo Perla.

-Pueden comer con nosotros, vamos a armar la mesa aqui. Propuso, mi padre.

-No es mala idea, segun el abuelo faltaba poco. Dijo Erik.

-Voy a ir a avisar, vengan muchachos, ayuden a traer todo, por cierto nos facilitan unas bandejas. Ordeno Damaris.

-Si, Aria, mira en ese estante. Me señala mi padre.

-PREPAREN TODO AQUI, ENSEGUIDA VOLVEMOS. Nos dijo Damaris, una vez que se las entregue.

Se veia entusiasmada por conocer la casa de mi padre.

-No podemos quedarnos. Nos dice Coral nerviosa.

-Vamos a comer pescado asado, deben probar, es muy rico. Las trato de persuadir.

- No, son amables, pero no. Anuncio decidida Coral incorporandose con la ayuda de su hermana.

- CHICAS, SE LO QUE SON, YO LAS LLEVARE A SU CASA, UNA VEZ QUE TERMINE LA COMIDA, NO DIRE, NI REVELARE NADA, PREGUNTEN A MI HIJA. Expreso mi padre serio.

Coral me miro al tiempo que Perla, en eso regresaban los demas con las cosas.

-Estas de pie, no puedes, descansa. Insiste Federico al ver a Coral proxima a la puerta.

-Aun no preparan la mesa, vamos, enseñame Aria donde estan las cosas y armamos, traje este mantel por si no tenian. Ordena Damaris.

Coral y Perla al verse rodeadas no les quedo de otra que quedarse. Luis estaba atento a Perla y Federico a Coral. Ellas miraban inquietas hacia mi por si les hacia algun gesto o algo, pero no lo hice, solo estaba atenta a que no intenten nada contra nadie.

En minutos se preparo la mesa, se pusieron velas, como una fiesta de fin de año.



Erik me llevo a un costado, mientras los demas estaban ocupados alrededor de Coral y Perla.

-Al fin te tengo para mi. Me susurra dandome un beso.

-Siempre. Le respondí.

-Mi hermano esta interesado en Coral y Luis en Perla, se les nota. Me comenta Erik.

-¿Cómo sabes? Indague incrédula.

-Es muy obvio, la atención que tienen hacia ellas.

Expreso seguro.

-Ellas no lo estan. Le respondi.

-Deberan decirle a ver que ellas opinan.

-Espero no se ilusionen estan de paso dijeron ser turistas. Anuncie al saber que por ser sirenas y no querer a los humanos, lo menos que van a aceptar es tener algo con ellos y mas por como contaron haber perdido a su madre.

-Hay maneras de seguir conectados. Susurro en mi oido aferrado a mi cintura mientras me daba un beso en el cuello.

-VENGAN A SENTARSE. Llamo nuestra atención mi padre.

-¿Qué son ustedes? Pregunto Perla con curiosidad.

-Somos novios, pronto nos casaremos. Le dijo Erik con total seguridad en su voz.

-¿Le cantaste para que sea asi? Me pregunto Perla.

-No, no canto. Le dije mirandola fijo.

-¿Eres de cantar? Le pregunto mi padre que escucho lo que hablamos al estar próximo a nosotras.

-Toco un... Instrumento. Dijo dubitativa como pensando en la palabra que describa lo que queria decir.

-Puedes tocar para nosotros, me gustaria oír como lo haces. Le pidio Luis.

Ella miro a Coral como pidiendole permiso y note que le inclino la cabeza en señal de que lo haga.

Por mi parte tenia mis dudas, no sea otro modo de hipnosis.

-Estamos comiendo. Dije para disuadir de que no lo haga.

-A mi me gustaria oir. Expreso el abuelo de Erik.

"Si, toca" dijeron en coro los demas.

En eso que se incorporo Perla miro hacia afuera y note que sus ojos se abrieron de par en par y giro presurosa mirando a su hermana que al ver su cara se ve que adivino el temor en sus ojos.

-Si no es molestia quisera descansar, me duele el pie. Anuncio presurosa Coral.

-He, si, por aqui. Le señalo mi padre.

-Deja que te ayude, se ofrecio Federico.

-Voy contigo. Le dijo Perla presurosa.

En eso golpearon la puerta.

-Voy a ver. Les dije.

-DEJA HIJA, VOY YO. Se impuso mi padre.

-BUENAS NOCHES... DISCULPEN LAS MOLESTIAS, SOMOS DE LAS FUERZAS MARINAS, ESTAMOS AVERIGUANDO SI POR LAS DUDAS NO VIERON EN LA COSTA DOS JOVENES DE SEXO FEMENINO, ERAN TRIPULANTES DE NUESTRO CRUCERO Y CAYERON AL MAR. Un hombre en un tono extranjero anuncio a mi padre.

-NO, NO VIMOS NADA. Respondio mi padre con rostro de roca sin gesto alguno.

-BIEN, DISCULPE LAS MOLESTIAS, PERO POR LAS DUDAS LE DEJO ESTOS RETRATOS POR SI LAS VE Y NOS LLAMA, SU FAMILIA LA ESTAN BUSCANDO. Concluyo con un dialecto que se le trababa la lengua.

-MUY BIEN, ESTARE ATENTO. Respondio mi padre y cerro la puerta.

Se giro pensativo, me miro.

-ME DISCULPARAN, FUE LARGO EL DIA, PERO QUIERO DESCANSAR. Anuncio serio.

-SI AMIGO, YO TAMBIÉN, ESTUVO MUY RICO TODO. Agrego el abuelo de Erik.

- ARIA, PODEMOS PASEAR EN LA PLAYA. Me propuso Erik.

-Me encantaría, pero quiero descansar. Le dije.

Me dolía dejarlo ir, pero quería averiguar que nos ocultaban Perla y Coral.

-Nos vemos mañana. Me dijo posando un beso en mí.

-Si. Le respondi en un suspiro.

-Despídenos de Perla y Coral, vendremos mañana a ver como estan. Anuncio Luis señalando a Federico.

-Bueno. Le respondí al despedirlos.

-Estuvo todo muy rico. Nos vemos.

Se despidio Damaris con tristeza de tener que dejar a mi padre, al parecer queria estar un rato mas.

Los acompañamos a la puerta, ni bien cerramos con mi padre nos miramos y caminamos en dirección al cuarto donde estaban Perla y Coral.

Mi padre sin llamar abrio la puerta, ellas estaban sentadas en la cama las dos tomadas de la mano.

-MUY BIEN, QUIERO QUE DIGAN LA VERDAD. Les dijo con voz potente.

-¿La verdad? Indaga Coral evadiendo responder.

-SI VAN A SER ASI, VOY A LLAMAR A ESOS OFICIALES...

-¡NO!... SE LO CONTAREMOS...

-LAS ESCUCHO. Anuncio mi padre.

Perla abrio la boca emitiendo un canto que dejo a mi padre hipnotizado.

-¡NO PUEDEN HACER ESO! ¡LES BRINDAMOS HOSPITALIDAD! ¡SE LES CURA LAS HERIDAS!

Grito molesta.

-NO SE LO PEDIMOS. Expreso Coral.

-TE EQUIVOCAS, PERLA SUPLICO, POR MI SE VAN YA DE MI CASA Y QUE ESOS HOMBRES LAS ENCUENTRE, MI PADRE PODIA AYUDARLAS Y SON UNAS MALDITAS MAL AGRADECIDAS. SOLO SABEN ACTUAR ASI DE HIPÓCRITAS.

-NO SOMOS MAL AGRADECIDAS, NO PODEMOS CONFIAR, YA LO HICIMOS UNA VEZ Y NOS USARON COMO ATRACCIÓN EN UN CRUCERO, LOGRAMOS ESCAPAR APENAS, DEJANDO ATRAS A NUESTRA MADRE.

Expreso Perla.

-NO LES CREO NADA.

-NO TE MENTIMOS, NUESTRA MADRE SE ENAMORO DEL DUEÑO DE ESE CRUCERO, LO CONOCIO EN LA PLAYA DONDE VIVIAMOS, LA LLENO DE FALSAS PROMESAS Y NOS TENIA A NOSOTRAS DE REHEN PARA QUE ELLA HAGA LO QUE ÉL LE PEDIA.

Explico Coral.

-Si es asi ¿Cómo escaparon?

-EN LA TORMENTA NUESTRA MADRE NOS LOGRO LIBERAR, PERO ELLA QUEDO ATRAS, NOS IBAMOS A NUESTRA ISLA A PEDIR AYUDA, CUANDO ME LASTIME Y NO PODIA SEGUIR.

Conto Perla

-Las ayudare a que se vayan, pero espera aunque sea un dia, debes curarte eso. Le señalo a Coral.

-ERES MUY AMABLE.

Me dijo Perla.

-PERO DEJA DE HIPNOTIZAR A MI PADRE O NO LAS AYUDARÉ.

Perla asintio, volvio a cantar sacando del trance a mi padre.

-ME VAN A CONTAR. Reacciona mi padre.

-PA, DEJALAS DESCANSAR, MAÑANA NOS DIRAN. Le dije.

-SEÑOR, GRACIAS. Le dijo Coral.

-BIEN, SOLO QUIERO ENTENDER, ESOS HOMBRES ME DIERON SUS RETRATOS.

-NOS USABAN COMO ATRACCIÓN EN SU CRUCERO. Escuche que Perla hablo.

-SOLO QUERIAMOS REGRESAR A CASA. Agrego Coral.

-Entiendo, descansen y mañana hablamos Las despidio mi padre.

Estando en mi cuarto escuche un sonido, por lo que me pare a ver. Coral y Perla se estaban marchando a escondidas, descubrieron hacia donde podian salir al mar por el costado de la casa.

-¿Se van? Les pregunté.

-SI, NO PODEMOS QUEDARNOS, VEN CON NOSOTRAS, NO ES TU LUGAR AQUI. Me dijo Coral.

-ES MI HOGAR, NO ME IRE.

Exprese seria viendolas ir, no sabia si llegarian lejos, pero al parecer no se sentian seguras aqui.

(CORAL)

(PERLA)