NovelToon NovelToon
La Aventura Zodiacal (LA Sociedad Del Poder)

La Aventura Zodiacal (LA Sociedad Del Poder)

Status: En proceso
Genre:Mundo de fantasía
Popularitas:940
Nilai: 5
nombre de autor: Juliet Castillo

La historia se centra en 12 personajes que descubren que poseen poderes especiales y que son la clave para salvar al mundo. Estos personajes tienen que aprender a controlar sus poderes y luchar contra fuerzas oscuras. La historia se desarrolla en el marco de "La Sociedad de Poder", donde los personajes deben enfrentarse a diversos desafíos y peligros.

NovelToon tiene autorización de Juliet Castillo para publicar esa obra, el contenido del mismo representa el punto de vista del autor, y no el de NovelToon.

22. Jaque Mate.

JAX:

Giré a la izquierda y, antes de empezar a caminar a paso ligero, escuché pasos apresurados detrás mío. Aceleré el paso, deseando llegar más rápido, hasta sentir que alguien pronunciaba mi nombre.

Me volví, encontrándome frente al capitán, el octavo Tessier. Parecía haber llegado corriendo desde su casa, con la cara roja y la respiración agitada.

—Como siempre, llegas tarde—me reí—. ¿Cómo haces para ser tan lento?

—Me tomo mi tiempo, eso es todo—contestó, encogiéndose de hombros—. ¿Qué tal tu día?

—Aburrido—mentí—. Me desperté y empecé a hacer el desayuno, pero me llamó antes de haber comido. Ahora tengo un montón de platos en la cocina que lavar.

—Debe ser terrible vivir solo —dijo el chico, sonriendo.

—Tú también vives solo—le recordé, rodando los ojos.

—Sí, cierto—asintió—. ¿Puedo ir a tu casa después de la reunión?

Aparté la mirada. Quería decirle que sí, pero no podía permitir que viera a los chicos. Además, estaría ocupado entrenándolos.

—¿A mí no me invitan?—preguntó una voz detrás nuestro, haciéndome sobresaltar, pero al reconocerla, solté un suspiro de alivio.

—¿Eres el primero en saber de la reunión y llegas tarde? —le pregunté a Haru riendo—. ¡Los chicos son un desastre!

—Lo mismo te digo—respondí—. Haru, mi mejor amigo, invítame a tu casa y deja a este idiota fuera—le pidió a Tessier, dándome un empujón con la mano.

—Eres demasiado cruel conmigo—contesté, fingiendo estar herido.

—¡El último en llegar es una gallina!—gritó Tessier, echando a correr a toda velocidad.

—Agradece que te haya ayudado—susurró Haru, mirándome con el ceño fruncido—. No sé qué tramas, pero te ves raro desde hace dos días.

—Gracias—susurré, antes de salir corriendo—. Llámame inmaduro si quieren, pero es mejor que ser una gallina.

Al final llegamos tres minutos tarde, pero a tiempo. Kevin nos miró a todos antes de hablar.

Tenemos que decidir cuándo ejecutaremos al anciano—dijo el capitán general—. La llegada de esos intrusos complica las cosas.

Miré a Gienn con furia, antes de apartar la vista y esperar a que alguien hablase.

—Yo digo que lo ejecutamos ahora—dijo el chico, mirándome como retándome—. Si el anciano muere, los intrusos no tendrán nada que hacer aquí.

—Yo digo que primero nos centramos en atraparlos—le contradije—. Después ejecutaremos a Sao.

—¿Alguien tiene otra opinión?—preguntó el capitán general.

—Estoy de acuerdo con Jax—asintió Damian—. No dejaré que esos chicos se vayan sin haber luchado con ellos una segunda vez.

—A ti solo te interesa la pelea—exclamó Samuel, el noveno capitán, rodando los ojos.

—De acuerdo, tienes razó —asintió el capitán, encogiéndose de hombros. —Yo también estoy de acuerdo con Jax—añadió Selma, la decimotercera capitana.

—¿Alguien está de acuerdo con Gienn?—preguntó el capitán general.

—Yo—dijo Karen, la segunda capitana.

—Dos votos contra tres—confirmó Kevin—. ¿Alguien más tiene algo que decir?

Nadie habló ni se movió.

De repente, en mi mente apareció un meme que Sao me había enseñado, pequeño. Decía: "Si no me muevo, no me ven". Era exactamente lo que estaban haciendo los demás capitanes, quedándose al margen.

—Entonces, asunto resuelto. Concéntrense en los chicos—concluyó el capitán general antes de levantarse.

Todos empezamos a irnos, pero la voz del capitán general me detuvo en seco.

—Espera, Jax—me pidió, acercándose con pasos amenazantes.

Sentí el corazón latirme con fuerza. Kevin era muy inteligente y nos conocía como a sus propios hijos. Seguramente se había dado cuenta de algo.

—Dime, ¿no sientes algo extraño por aquí?—preguntó, mirándome con su penetrante mirada.

—No sé a qué te refieres—respondí con voz firme.

—Siento que hay algo más—explicó Kevin—. Creo que el problema no son solo esos intrusos, sino alguien mucho más poderoso y peligroso.

Guardé silencio, mirándolo con las cejas levantadas. Últimamente me sentía incómodo, como si alguien me estuviera vigilando constantemente. Además, en la Sociedad del Poder había aparecido un aura muy negativa, algo que nunca había sentido antes estando con los chicos. Al contrario, el aura que emanaba de ellos era positiva y decidida.

—Alguien está moviendo los hilos—susurró, sacándome de mi ensimismamiento—. Solo busca el momento perfecto para dar el jaque mate.

—¿Alguien más está controlando todo esto?—pregunté, confundido—. ¿Entonces por qué no dejamos en paz a los intrusos y buscamos al verdadero... malo?

—Ser capitán general no es hacer lo que te dé la gana—explicó—. Ser capitán general es considerar todas las posibilidades y elegir la que mejor sirva en el momento. No puedo obligarlos a dejar de perseguir a esos intrusos. La verdadera amenaza ahora son ellos.

El capitán general se dio la vuelta y me miró con el ceño fruncido, visiblemente esperando mi opinión. Un escalofrío recorrió mi espalda al ver la expresión cansada y frágil. Nunca había visto al anciano así. De costumbre siempre se mostraba frío, distante y determinado, pero ahora…

—¿Por qué me dice esto a mí y no a los demás?—pregunté—. Sabe que yo no soy bueno pensando. Eso sería más el punto positivo de Selma o…

—Tú eres mi aprendiz—explicó con una triste sonrisa—. Eres la única persona que entrené desde los dos años. ¿En serio crees que no voy a confiar en ti?

—Entonces déjamelo a mí—le pedí—. Encontraré ese verdadero intruso y le daré su merecido.

—Que tengas suerte—susurró, dándome media vuelta—. El futuro siempre es muy confuso, pero sé que superaremos esto. Como siempre.

—Abuelito, la mejor manera de predecir el futuro es crearlo—le recordé con una sonrisa—. Me lo dijiste muchísimas veces cuando era pequeño.

Kevin se giró y me miró con una sonrisa orgullosa, antes de desaparecer. Suspiré aliviado, antes de darme la vuelta y salir de la torre general. Entonces, según el capitán general, la verdadera amenaza no eran los chicos.

—¡Jax! —me llamó una voz familiar.

Me giré, encontrándome cara a cara con Selma. La chica llevaba una sudadera negra y unos vaqueros, con zapatillas negras. Su cabello, que le llegaba a la mitad de la espada, era de color marrón oscuro, al igual que sus ojos. La chica me miró con una mirada penetrante, que me hizo preguntarme si no era hija o nieta de Kevin.

—¡Hey!—la saludé con alegría—. Gracias por apoyarme contra Gienn.

—No pasa nada—respondió, encogiéndose de hombros—. Sao me cae bien.

Asentí, invitándola a caminar conmigo hasta nuestras casas. Como su casa estaba a pocos metros de la mía, no habría problema en dejarla en la suya e ir a la mía con los chicos.

—Y ahora dime—dijo, deteniéndose de golpe— ¿Qué tramas?

La miré confundido, pensando que solo hablaba de lo que haría esa tarde. Pero su expresión me hizo darme cuenta de que hablaba en serio.

—¿Por qué te peinaste el pelo hoy?—preguntó, levantando una ceja.

—Porque quise—respondí, recordando que Aries me había enseñado cómo peinarme para verme más serio y menos infantil.

—Sueles hacerlo solo con tus manos—continuó—. ¿Y por qué llevas perfume de mujer en tu ropa?

Intenté responder, pero Selma siguió hablando.

—Perfume de mujer del mundo real, o mejor dicho—me miró con una sonrisa maliciosa.

—¿Estás celosa, Selma?—sonreí, intentando suavizar el ambiente—. Sabes que mi corazón te pertenece desde que éramos pequeños.

—Deja de tonterías—suspiró, poniendo los ojos en blanco—. ¿Necesitas más pruebas de que estás ayudando a los intrusos?

Apreté los labios. Harry me había puesto perfume de mujer en mi ropa para vengarse de haberlo atacado ayer con la ola de agua. Intenté encontrar una excusa creíble, pero Selma dio un paso más, mirándome con seriedad.

—¿Perdón?—pregunté, confundido.

—Ya escuchaste bien—asintió—. Sao me ayudó y apoyó cuando aún trabajaba en la Sociedad del Poder. Ahora quiero ser yo quien le ayude.

—No tienes pruebas—dije con naturalidad—. No puedes venir y decir que "x persona hizo x cosa" sin pruebas.

—Jax, eres mi amigo y te conozco mejor que nadie—explicó, y por alguna razón sentí un pinchazo cuando me llamó "amigo"—. Has estado muy ocupado estos dos últimos días, igual que un padre estaría ocupado por sus hijos. Hoy viniste peinado y con colonia del mundo real. Además, ayer te vi yendo a salvar a esos gemelos—concluyó.

Me quedé callado. Selma me había dejado con la boca abierta. Ella sí que era inteligente.

—Confía en mí—me pidió—. Haré lo que sea por el abuelo.

Suspiré, antes de asentir lentamente y darme la vuelta. Selma soltó un pequeño grito de alegría y me siguió, con una gran sonrisa en la cara.

Selma fue la primera persona con la que hice amistad, incluso antes que Haru, mi mejor amigo. Aunque parecía inteligente, su fuerza y poder eran inigualables entre los más poderosos de la Sociedad del Poder.

Seguí caminando hasta llegar a mi casa. Respiré hondo antes de abrir la puerta. Si los chicos desconfiaban de mí, este era el momento perfecto: la persona que prometí protegerlos y ayudarlos traía a una desconocida a casa, alguien que podría, según ellos, traicionarlos.

—¡Chicos! —los llamé, cerrando la puerta tras de mí.

Géminis fue la primera en aparecer. Miró desde lo alto de las escaleras. Al ver a mi acompañante, palideció y se escondió tras una pared, pensando seguramente que no la habíamos visto.

—Ven, Géminis—le dije, tomándola de la mano.

—Parece un gatito pequeño y tierno—susurró Seijun con una sonrisa.

—Todos son así de cariñosos—le aseguré—. Intenta no asustarlos—le pedí.

Géminis volvió a mirar con cautela, antes de dar un paso adelante.

—¿Qué es esto?—preguntó con el ceño fruncido.

—No te preocupes—la tranquilicé—. Ella también es buena.

1
Flor♡
me gusto /CoolGuy/
Juliet Castillo: Un faltan más capítulos
total 1 replies
NovelToon
Step Into A Different WORLD!
Download MangaToon APP on App Store and Google Play